Aquelarre: Aullando a tu pies, luna del placer. (Ishimondo) (Parte 1).

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El motociclista comenzó despacio, encontrando su camino en la entrepierna de Kiyotaka. No tenía a disponibilidad sus manos así que obviamente iba a ser más complicado el obtener la erección completa, sin embargo, esto no significaba que quisiera "echarse para atrás" con eso, acercándose a este lugar embriagándose del aroma que su novio despedía, los shorts junto a la ropa interior muy apenas le daban la visión del falo en media erección y los genitales... Los que no tardó nada en devorar.
Primero dio un par de lamidas en el pene apenas duro que se curvaba, pasando su lengua por encima de este por toda la base, su rostro sonrojado y con estas acciones sólo pudieron provocar que la respiración de Ishimaru se agitara, observando a su novio cerrando los ojos mientras se dedicaba a sus genitales, tomando uno de estos entre sus labios lamiendo y succionando, dedicándose a esto pasando su lengua por alrededor atrapando la carne del monitor de pasillo antes de pasar al otro.
La respiración de Kiyotaka estaba acelerada mientras le observaba, aferrando una de sus manos, aquella con la que sujetaba la correa, al sofá mientras con la otra acariciaba parte del hombro y luego las mejillas del motociclista, subiendo por sus cabellos largos y sintiendo lo en verdad suaves que eran estos cabellos sin teñir.
Mondo continuaba succionando esto, lamiendo alrededor con su lengua, ligeramente áspera, como si intentara llenar las bolas del muchacho de cabello negro de su saliva... Entonces se alejó, subiendo hacia la ya completa erección pasando toda su lengua por esta, subiendo por el tronco y dejando un rastro de saliva encima de las venas palpitantes que recorrían el miembro, así hasta la punta, que sobresalía entre el resto por grosor.

Y abrió su boca, sintiendo los ojos rojos encima suyo abrió esta tomando parte del miembro del contrario entre sus labios y su lengua, el interior de su boca, cálida y húmeda le recibió entre las paredes de sus mejillas teniendo algunos problemas en cuanto a su tupé, apenas encontrando la manera de depositar hasta la mitad de aquel miembro dentro de su boca. Ajustó su lengua a la nueva sensación, primero lamiendo un par de veces en la punta mientras descendía la carne que recubría esta hacia abajo con sus labios, bajando con su lengua también mientras hacía esto. Lamió cuanto pudo, recubriendo el miembro de Kiyotaka de su saliva encontrando un ritmo y forma de mover su cabeza, así hasta que cuando menos lo tenía pensado ya tenía al monitor de pasillo jadeando debajo suyo, gimiendo un poco demostraba le gustaba todo eso, pues, si bien no había jalado de su correa o había dicho algo concreto con el mero hecho de presionar la cadena y dejar escapar esos sonidos él lo demostraba.
-Mng... Mondo... Tu boca... - Kiyotaka apenas y pudo pronunciar, siendo demasiado obvio el que sólo quería elogiarlo, más aún confirmado por las palabras que diría a continuación -... Tu boca... Se siente... Mnn... Increíble... - Pasaba sus manos por el tupé y las falsas orejas de lobo, el rostro de Mondo apenas iluminado por la luz de las velas y de la película que en la televisión se seguía reproduciendo mientras cerraba sus ojos llenando su boca de su novio, llegando hasta la base cuando sentía la punta invadiendo su garganta, luego subiendo con ese mismo ritmo en el que podía jurar que Kiyotaka había comenzado a empujar sus caderas dentro de su boca.

Ishimaru seguía empujando sus caderas dentro de la boca del motociclista con aquel ritmo tan apresurado, el de exagerado tupé pasando la lengua por la punta cada tanto recogiendo el sabor del presumen que se comenzaba a agrupar saliendo por esta, salado le anunciaba de a poco el orgasmo estaba a llegar.
Gemidos por parte de Mondo y alrededor del miembro del de cabello negro enviaban escalofríos junto a aquellas vibraciones que sólo lograban hacer que Ishimaru se sintiera cada vez más a punto del límite. Sus piernas que se tensaban un poco le anunciaban estaba tan a punto de llegar, él, con esta advertencia y apenas controlando a su acelerada respiración y entrecortada voz intentó apartar a Mondo, había un cosquilleo en su abdomen que se extendía hacia la punta de su pene cada tanto y esto ya no lo podía ignorar.
-Mnn... Agh... Nnah~... Mon... Mondo... - gemía, de poco a poco perdiendo esa actitud dominante que había estado intentando conservar -Mo... Mondo... Suficiente... Yo... Ahhn... Voy a... Estoy a punto de... Mmn... Apártate... Por favor...-
El de cabellos bicolor escuchó eso, levantado su mirada hacia Kiyotaka tomando una muy buena imagen del rostro lujurioso de su pareja... No tenía intenciones de perder eso por nada, presionando y succionando con más insistencia alrededor de la gruesa polla del contrario.
Kiyo gemía enredando sus dedos en el cabello lacio y sin teñir de Mondo, haciendo pequeños rizos con sus dedos y luego soltando estos, su otra mano seguía, aunque inmóvil sujetando la cadena.
-Mnng... Ahh... Mondo... Mondo~ yo voy a... Mnn... Apártate... - El formular palabras, embriagado por ese placer y su acelerada respiración era una actividad poco satisfactoria, eso a mucha diferencia de lo que ocurría en su entrepierna -Mondo... Yo... Anh... De verdad voy a...- estaba tan cerca, obteniendo de Oowada un sonido de negación que era lo único que podía formar con su boca ocupada, moviendo su cabeza de arriba hacia abajo seguía chupando cuanto podía.
-¡Mondo, Mondo~! Yo... ¡Mmgh, ahh! Voy a... Voy a... ¡Apártate!-

Con acciones y reacciones diferentes a las que él hubiera querido intentó alejar a Mondo utilizando la suela de su bota al casi patearle, pues había colocado esta encima del abdomen del motociclista, y, aunque en parte si había logrado empujarle sólo había obtenido el acercarle cuando por supuesto había dejado libre a su erección, pero, por no lastimarle y todavía sujetando la correa le había alejado meramente para devolverlo al mismo lugar y quizás todavía peor.
Con toda la estimulación previa había terminado por correrse al haber hecho esto, la mejilla de Mondo cubierta por su propia saliva y entonces la semilla de Kiyotaka, la cual se extendió en el líquido blanco por un lado del rostro de Oowada, quien apenas sintió este líquido tibio sacó su lengua para probar un poco de él, lamiendo por encima de sus labios sonriendole al de cabello negro con eso, sus ojos lavanda fijos en los rojos.
Había una mezcla de emociones transitando en la mente del monitor de pasillo, quien, al ver esto no tuvo más que tragar saliva... Le gustaba lo que veía, pero ¿Cómo podía llegar a aceptar eso sin parecer un pervertido? Cerró sus ojos tomando una muy larga respiración... Tenía un papel que necesitaba conservar y no dejaría que los consejos de Tanaka simplemente se perdieran.
-Estuvo mal...- con su respiración recuperada finalmente escupió -... Por ello y como castigo no tienes permitido el limpiarte o levantarte... ¿Entendido?-
Mondo asintió, perplejo en un primer momento, él en verdad consideraba el sexo oral beneficiaria en algo a que su novio detuviera ese juego extraño... Pero no... Parecía sólo le había dado la oportunidad de sentirse con más poder sobre él.
-¿Me desatarás?- el pandillero, algo ingenuo, preguntó.
-¿Debería?- Entrando en papel Kiyotaka le respondió, por supuesto con otra pregunta y la mirada fría actualmente -... Con alguien tan sucio como tú...-
... Mondo sonrió nerviosamente, quizás le había otorgado más libertad de hacer con él lo que quisiera de la necesaria.
-Ky... Kyoudai... Vamos... -
-¡¿Debería?!- interrumpió, su tono de voz alto mientras jalaba un poco la correa.
Oowada pasó saliva, claro que, si le había dado más libertad de la necesaria, pero... ¿Eso estaba tan mal?... Había asegurado hacerlo feliz, después de todo.
-... No...- bajó su cabeza, negando despacio, y... Quizás estaba loco, pero podía asegurar que había sentido una sonrisa en Ishimaru con eso.

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