La reina de mis noches

Capítulo 29

Los siguientes días transcurrieron con relativa tranquilidad. Llamé a la empresa y me tome otra semana de vacaciones. Sabía que, después de eso, no podría seguir afirmando que ella todavía me necesitaba.

Al rato decidí hacer otra llamada, necesitaba confidencialidad y la mejor abogada, claramente tenía a la persona correcta, tome el celular y busque entre los contactos, el teléfono sonó y al rato contesto esa voz tan familiar que me calmaba al instante.

— ¡Camz!, ¿cómo estás? — contesto alegremente a pesar del llanto de bebé que se escuchaba a través del teléfono — ¡Normani apresúrate que Elizabeth muere de hambre!

— ¡Ya voy Dinah, y no me grites, ten compresión conmigo que tú no eres la que amamanta! — se escuchó la voz de Normani.

— Hola Dinah — suspire pesadamente.

— Pasa algo malo — no era una pregunta, solo afirmó totalmente segura, dios esta mujer sí que me conoce — ¿Qué sucede?

— Es... es Lauren — no pude evitar llorar al instante.

— Está bien, cálmate ¿sí? respira profundo y me cuentas.

Hice lo que me pidió, me tome unos segundos para respirar, secar las lágrimas que habían logrado salir de mis ojos y calmarme, le conté todo lo que había ocurrido desde que llegue del viaje de la cabaña ella escuchaba atentamente a cada una de mis palabras sin interrumpirme.

— Camila lo que me estas contando es muy fuerte, es algo serio — dijo al fin.

— Lo sé y te pido que la ayudes.

— Eso no lo pongas en dudas, la ayudare, esa chica... Halsey ira a la cárcel te lo juro, ¿cuándo llegas de Francia?

— En unas cuantas semanas.

— Está bien, cuando llegues, tomare un vuelo a New York, empezaremos a trabajar en ese asunto. También necesito hablar con Lauren, y tranquila que tu familia no se enterara.

— Gracias Dinah... ¿crees que el juzgado la tome en serio? Es decir, es una prostituta y lo que hace es ilegal, ella me lo dio a entender.

— Por eso no te preocupes, nunca perdí un juicio cuando trabajaba para los tribunales, y este caso no será la excepción llamare a unos contactos y prepare unos documentos de valides, haremos creer que Lauren es masajista, solo prestaba un servicio.

— Pero eso... está mal, ¿estás segura de hacer eso?

— Quieres hacer justicia ¿o no?, dímelo Camila, quieres ver a esa mujer tras las rejas ¿o no?

— Por supuesto que si Dinah, eso es lo que más anhelo en estos momentos.

— Perfecto, entonces jugaremos bajo mis reglas. Todo saldrá bien confía en mí y déjalo en mis manos, ahora solo preocúpate por disfrutar estos días con ella en Francia.

— No necesitas pedirme que confíe en ti, eres mi mejor amiga Dinah, y seguiré tu consejo tratare de disfrutar estos días con ella.

— Así se habla y no seas tan cabeza dura que te conozco bien Mila.

— ¡DINAH, Lizzy está llorando y ya le di de comer estoy segura que llora por ti, ven y cárgala para que se calme! — se escuchaba la voz histérica de Normani.