⚜️Chloe Bourgeois reina de París ⚜️ #Changermlbfandom

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La puerta fue abierta con brusquedad, la rubia inmediatamente se separó del asiático que parpadeó un par de veces al verse interrumpido en sus acciones. Estuvo tan cerca de besar a la chica pero no lo consiguió.

Adrien entró furioso al ver tal escena, sus emociones explotaron y no pudo controlarse.

—¿¡Qué crees qué haces?!—Se acercó al chico que río levemente.

Le pareció muy divertida su reacción, pues se delató por si solo, Adrien Agreste tenía sentimientos por Chloé Bourgeois. Damón era listo y era consciente que una escena de celos, podía arruinarlo todo.

—¿Tengo que pedir permiso para hablar con Chloé?—se cruzó de brazos—¿O acaso te molesta?

Su sonrisa creció al ver la incredulidad del rubio que se quedó sin palabras y soltó un quejido frustrado.

—No parecía que querías hablar con ella.

—Soy culpable de lo que hago, no de lo que tú comprendas.

No podía contener las inmensas ganas que tenía de carcajearse del pobre modelo que ya no podía contenerse e intentaba, atacarlo con los peores argumentos posibles.

—No te vuelvas a acercar a ella.—dio varios pasos—Ni se te ocurra mirarla.

El asiático miró desafiante al modelo que sin pensar, tomó de la cintura a la rubia, pegándola lo más posible a su cuerpo.

Chloé al sentir el tacto del rubio, se sonrojó fuertemente, con un brillo en sus ojos. No quería admitirlo pero era muy agradable sentir los brazos de su amigo rodearla.

Se dio una bofetada mental, ella no podía sentir esto, era impensable. Quería pensar que solo era una mala broma de su mente, no quería admitirlo, no quería ni pensarlo; ella estaba enamorada de Adrien Agreste.

—Calma tigre,—burlón dio un paso al frente—no seas egoísta.—Adrien apretó su agarre sobre la rubia.

—No soy egoísta.—Respondió inmediatamente.

—Pf, me prohibes acercarme cuando tú,—miró de los pies a la cabeza al chico—estás muy pegadito a ella.

Adrien sintió una especie de balde con agua fría, volviendo a la realidad de sus acciones donde Chloé estaba junto a él.

—No quieres compartir a esta bella reina con el mundo.—arqueó una ceja al ver los ojos dudosos del modelo.

—Está "reina" no vale la pena.—Marinette entró a la sala.

—Eh cuidado con tus palabras linda.

Damón podía ser coqueto y caballeroso pero no iba a tolerar que llamaran así a "su reina".

Ninguno se dio cuenta de la ausencia de los rubios debido a su competencia de miradas. Ambos asiáticos buscaron a uno de los rubios por el lugar pero se habían esfumado.

—Supongo que solo estamos tú y yo.—resopló desganado el chico.

—No,—habló rápidamente—solo estoy haciéndole un favor a tu hermano.

—¿El cobarde?—se cruzó de brazos—Te sugiero que lo ignores, es un llorón.

—¡No hables así de Axel!

Ambos se fulminaban con odio, Marinette para defender al dulce chico y Damón, él tenía sus razones.

—Eres bastante torpe,—dijo arrogante—no llevo aquí ni semana y media y ya descubrí varias cosas.