Capitulo 9

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Estoy en frente del gran muro mirando la puerta de barrotes negros.

Toco el timbre y a los pocos segundos alguien contesta.

-Si? -Reconozco la voz de Olivia.

-Hola, soy Esther.

-Ah hola, quieres algo?

-Quería hablar contigo.

-Vale, pasa.

Habré la puerta de barrotes negros, entro y la cierro detrás de mi.

Voy por el jardín de la entrada a paso ligero y veo como sale Olivia de su casa y me espera en el porche.

-Esther, tu no tendrías que estar en clase? -arquea una ceja y se cruza de brazos.

-Si... pero te tengo que contar un par de cosas, si no fuera importante no habría venido.

-Entiendo, y lo sabe tu madre?

-No, y por favor no se lo digas.

Ella frunce el ceño aun con los brazos cruzados.

-Vale... -Dice por fin.

Entro a su casa, y un escalofrío recorre mi cuerpo.

-Ves subiendo -Señala con el dedo índice la escalera - voy a por un vaso de agua, quieres algo de beber?

-No, gracias -Le digo con una sonrisa.

Voy subiendo las escaleras poco a poco, llego al pasillo y me dirijo a la habitación de enfrente, antes de llegar a la habitación, me doy cuenta que la puerta de la derecha, la que tiene esos arañazos al rededor, esta un poco abierta, me paro en frente de ella y la observo con curiosidad.

Los arañazos nos son profundos, y tampoco grandes, parecen hechos por un gato.

De inmediato pienso en su gato, pero un gato no puede llegar tan arriba, es que hay arañazos hasta por encima de la puerta.

Estiro mi mano para coger el pomo, las yemas de mis dedos ya lo están rozando cuando de repente empiezo a escuchar susurros que provienen del interior, aparto rápidamente mi mano del pomo y retrocedo unos pasos.

-Que pasa Esther?

Me giro y veo a Olivia con un baso de agua entre las manos y mirándome con el ceño fruncido.

-No, nada -digo sacudiendo la cabeza - que la puerta estaba abierta y la iba a cerrar.

-Abierta? si yo no he entrado a esa habitación, pero bueno, gracias por cerrarla.

-Si yo no la he ... -Miro hacia la puerta y esta cerrada.

-Que has dicho? -Me dice abriendo la habitación de enfrente.

-No, nada - Le digo con una sonrisa forzada.

-Pasa -Hace un gesto con la mano.

Me siento en el mismo sitio que la ultima vez y ella igual, estamos frente a frente y el gato blanco como la nieve se posa en las piernas de Olivia.

-Como se llama? -Le digo señalando al gato con la mirada.

-Bupy -Me dice acariciándolo.

Sonrió.

-Bueno, cuenta por lo que has venido aquí.

-Creo que el espíritu maligno del que te hable el otro día...-Digo seria - se me a vuelto aparecer dos veces más.

Ella también me mira seria.

-Cuentame  todo, no te dejes ningún detalle.

Apoyo mis codos en la mesa y cruzo los brazos, dispuesta a contarle todo.

Le empiezo a contar cuando se me apareció esa silueta por la noche, de los susurros, las risas infantiles y de la niña que me encontré anoche, descalza y pálida, que me repitió varias veces si quería jugar con ella.

Se lo conté todo con lujo de detalles.

Al acabar ella medita mi relato un momento, se frota la barbilla con la mano derecha y frunce el ceño.

-Esta claro que no es un espíritu cualquiera, y bastante poderoso si es capaz de aparentar a una niña "viva", porque esta claro que esa niña no era normal, ni mucho menos.

Le miro preocupada, ella sigue con el ceño fruncido y meditando, yo solo espero a que continúe hablando.

-Solo se me ocurre una cosa... -hace una pausa y traga saliva- hacer espiritismo para echar a ese maldito espíritu y devolverlo a su lugar.

-Es-espiritismo? -Le digo asustada.

-Ya se que todo esto para ti es difícil de asimilar, pero si no nos deshacemos de ese espíritu te va a seguir molestando y cada vez van a ser más fuertes sus ataques.

Suspiro profundamente ...

-Vale.

Ella me coge de la mano y hace una sonrisa triste.

-Se que podrás echar a ese espectro.

-Ah que lo tengo que echar yo sola?

-Si, yo solo te enseñare como hacerlo, luego lo otro esta en tus manos.

Ahora tengo más miedo del que tenia y empiezo a palidecer.

-No te preocupes, se que eres capaz y muy fuerte.

Se levanta de la silla y viene hacia mi, yo me levanto y al segundo ella me esta abrazando, empiezo a notar como mis ojos se humedecen,todo esto me supera.

...

Hemos estado hablando un poco más, y me a dicho que pasado mañana valla a su casa y empezara a enseñarme espiritismo.

Estoy nerviosa y tengo miedo, pero a la vez siento que yo he nacido para esto, para echar a los espíritus malignos de este mundo y en cierto modo es verdad, he nacido para esto.

Camino hacia mi casa y voy pensando como le diré a mi madre todo esto que esta pasando y de lo que va a pasar, pero es mi madre y creo que debe saberlo.

Otra cosa que me ronda por la cabeza es esa puerta con arañazos, me pregunto que habrá ahí, pero nada bueno seguro... he oído susurros que provenían de su interior y la puerta se ha cerrado sola, y si ese cuarto lo usa para sus invocaciones o para hacer brujería?

Cada vez tengo más curiosidad por saber que hay detrás de esa puerta.

Los puedo ver.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora