Criminal |Richard Camacho| (2MO)

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-Richard la verdad no sé qué decir- se pone a dar saltos como loca.

-Solo quiero que me respondas, si quieres estar conmigo si o no. Es solo una repuesta sencilla.

-¿Pasó algo? ¿Eres esquizofrenico? Porque hace un rato me estabas diciendo que no quieres nada conmigo y ahora me estás proponiendo matrimonio.

-What? ¿Cómo qué matrimonio? Eres muy precipitada.

-Lo siento Richard, es que he soñado tantas cosas contigo que todavía no me creo que quieras estar en una relación conmigo.

-Y creo que voy a rendirme a la verdad.

-No Richard, ¿por qué?

-Estás dando bastante vueltas y no me haz dicho si quieres estar conmigo sí o no.

-Es que me pusiste nerviosa y empecé a decir cosas sin sentido.

“Como todas las que dices”- pensé.

-No te preocupes por eso, yo te quiero tal cual eres siendo disparatada o no, lástima que me di cuenta tarde de lo mucho que quiero estar contigo y de verdad que te pido mil disculpas por todas las palabrotas que te grité y por lo mal que te hacía sentir después de todo lo que te decía, fui un desubicado.

-¡Ay Richard! Pero si no te tienes que preocupar por nada de eso. Yo entiendo perfectamente que fui muy dura contigo al inicio con insistirte que aceptaras lo de tu novia muerta. De verdad que me pasé muchísimo pero es que te amo, quería que estuviéramos juntos.

-Me gustaría que no tocaras el tema si no quieres que retire lo dicho.

-¡No Richard! Acepto salir contigo, quiero que seamos bien felices juntitos- se acerca para darme un beso pero la evadí.

-Vayamos a casa, ¿quieres?

-Dale.

La llevé a casa, tenía miedo de estar con ella a solas de verdad. Aproveché que se fue a mí habitación y llamé a Matt.

-Necesito hablar contigo urgente, ¿dónde estás?

-Estoy cerca de tu casa pero no voy a poder ir, perdóname Richard.

-No me importa, quiero que vengas es bien urgente- colgué.

Esperé alrededor de 2 horas a que Matt llegara. Durante todo ese tiempo ni subí para ver como estaba Sabaneth, tenía miedo de que quisiera tener sexo conmigo cuando me he estado guardando las ganas para estar solo con Amaya.

Escucho que Matt llama a la puerta.

-¡Matt, por fin llegaste!

-Richard, no sé porqué me llamaste con tanta urgencia, espero y haya sido muy importante todo lo que me tengas que decir- dice Matt.

-He hecho un gran descubrimiento que si te cuento no me lo vas creer Matt, es importante lo juro.

-¿Y ahora que es?

-La cafetería tiene un pequeño apartamento en lo que se puede considerar su sótano, entré a una de las habitaciones y encontré una puerta con candado, quizás allí esté nuestra respuesta.

-Espera... ¿Cómo me dijiste que entraste?

-Sabaneth, creo que ya sabes quien es.

-Sí, la loca que te vive persiguiendo.

-Pues resulta que ella dice que vive ahí y que a señora de la cafetería es su tía. En uno de los armarios hay una puerta, hay que romper esa puerta.

-¿No crees que es más fácil conseguir la llave? Así podemos entrar y salir todas las veces que queramos pero si la rompemos no.

-Matt, si la rompemos podemos sacar a Amaya si está ahí y después que la tengamos no importa puerta ni llave, solo que pudimos rescatarla.