~Tres semanas después~
Pov Mariane~
Tres semanas han pasado ya desde la última vez que vi a mis padres y a Ash. Por más que he tratado de sacarles información de quién fue el demente que los mando a secuestrarme, ninguno a querido responderme. Malditos idiotas.
Otro día más en este gigantesco departamento, no hago más que dormir o mirar por la ventana. Logan desaparece la mayoría de las tardes, dejándome con el par de idiotas a cargo de mí.
¿Qué pasó con la estupenda escapada de la última vez? Bueno, cuando creía que todo iba perfectamente bien y podría ser al fin libre, Logan hace su gran aparación por la puerta del edificio. Al parecer a medio camino se olvidó de su billetera y se tuvo que delvover. Como ya deberían de imaginarse, intente escapar pero también aparecieron Juan y Gabriel detrás de mí. Me acorralaron y ¡BÚM! otra vez me encontraba encerrada en el departamento.
Si se preguntan si volví a escaparme, la respuesta definitivamente es no.
Me di completamente por vencida por mi mala suerte y eso me frustraba.
Últimamente lloro por las noches, generalmente cuando se van a dormir y no hay nadie vigilandome. No es que me traten mal, solo que extraño demasiado a mi familia. No hay días malos pero tampoco buenos. Trato de mantenerme alejada de ellos tres pero se me es imposible. Siempre están detrás de mí vigilandome y eso me agobia bastante pero que más puedo hacer, ese es su trabajo y yo no puedo hacer nada al respecto.
Creo que son ilusiones mías pero al parecer han notado que mi estado de ánimo ha ido disminuyendo por cada día que pasa. A pesar de hacer el mayor intento posible de que no se me note en absoluto.
Pov Logan~
He notado a Mariane bastante triste, bueno, no solo yo.
Gabriel me contó que despertó una madrugada y fue por un vaso de leche a la cocina. Escuchó unos sollozos que provenían de la habitación de ella pero no quizo interrumpir ya que era tarde y se podía enojar o peor aún, podía pegarle y dejarlo casi inconsciente. Tan solo pensar que ella estaba aquí encerrada, por algo tan insignificante como la envidia y el deseo de venganza por parte de "Él", me daban ganas de mandar todo a la mierda.
Pero no podía, realmente necesito el dinero. No, para mí no. Sino para la pequeña Spencer.
Mandé a Gabriel y Juan temprano en la mañana a comprar cosas para divertirnos y así poder subirle el ánimo a Mariane. Aproveché que Mariane aún dormía, ya que era relativamente temprano, y fui a buscar la Xbox a mi casa y de paso saludar a mi mamá y también preguntarle sobre Spencer. Cuando llegué a la entrada del edificio me encontré con Juan y Gabriel peleándose por quien subía cada bolsa.
—...Lleva tú esa, tú la compraste. —dijo Juan molesto tirando unas bolsas al suelo.
—Sí, pero... —Juan no lo dejo terminar y añadió.
—Nada de peros, te las llevas tú. —agarró otra cantidad de bolsas y subió.
Gabriel no pudo hacer nada más que agarrar las bolsas y subir. Me lo quedé mirando mientras entraba al ascensor, definitivamente nunca cambiarían.
Mariane aún dormía. Habíamos aprovechado de ordenar y limpiar el lugar, también adornamos con globos y cosas para comer como también para tomar, cerveza, vodka y ron. Juan y Gabriel habían comprado varios juegos, monopolio, twister y unas pistolas de agua.
De repente veo a Gabriel cargar una torta con velas hacia la habitación de Mariane, cosa que me pareció rara ya que no les dije que compraran una torta. Cuando se encontraron frente a ella, Juan la despierta y empiezan a cantarle el feliz cumpleaños a viva voz, mientras que Mariane los miraba confundida.
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Secuestro por Venganza [Sin Editar]
RomanceDicen que las venganzas no son para nada buenas y mucho menos si secuentran a una persona para poner en acción dicha venganza. Mariane Montgomery es victima de este suceso tras despertar y desconocer todo a su alrededor. Nunca pensó que asistir a un...