Capitulo 28

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Temprano en la mañana había salido del hotel. Les dejamos a Juan y a Gabriel una nota y una bolsa llena de monedas para que se fueran a una sala de juegos que había cerca del hotel. Espero que con eso les sobrara para pasar todo un día metidos ahí.

Tuvimos que contratar también a alguien que los vigilara aunque sea desde lejos para que no se metieran en problemas. Generalmente cuando se ponen a jugar se vuelven un poco más odiosos de lo normal y no era bueno.

Me fui con Andrés a la central de policías en dónde estaban tomando el caso de Mariane. Adentro había un gentío enorme y habían personas que iban de allá para acá con una gran cantidad de papeles.

Me hicieron entrar a una sala en dónde me interrogaron todo lo sucedido el día anterior. Realmente no era mucho lo que podía decir ya que sólo había visto de pasada a Frank entrar a un edificio y que solo había sacado como conclusión que ahí se encontraba unas de sus oficinas. No era mayor información pero parece que con eso a ellos les bastaba.

Les di la descripción del acompañante y con eso me dejaron un buen rato sentado en aquella oficina sin hacer nada.

Veía que el jefe hablaba por teléfono y le comunicaba algunas cosas a Andrés pero nada más relevante que eso.

-Bien. Es hora de que vayamos a ver el lugar. –dice Andrés sacándome de la oficina para dirigirnos al auto patrulla.

Le fui dando la dirección pero cómo no me sabía el nombre de las calles le dije que habíamos ido a una plaza y luego a una feria. Andrés sabía en dónde se encontraban esas cosas y nos dirigimos ahí. Desde ese punto pude guiarme hacia la cafetería y luego de unos minutos nos encontrábamos en la esquina del lugar.

Le señalé por dónde habíamos visto a Frank y al otro chico entrar. Era un edificio bastante alto y al parecer uno de los más reconocidos de la ciudad.

No sabíamos si Frank se encontraría adentro o no pero decidimos esperar un rato en el auto para ver si salía o entraba al lugar o algunas cosas raras que se viera en el lugar. Estuvimos así una media hora sin ninguna novedad hasta que vimos como Frank salía del edificio con el mismo chico de la vez pasada y se subían a un auto para luego irse.

Miré a Andrés que estaba serio viendo como Frank se iba alejando poco a poco.

-¿No los seguirás? –le pregunte con el ceño fruncido.

-No, hay que averiguar que tiene en esa oficina. –dice saliendo del auto.

-¿Y cómo harás eso? –le digo cuando los dos nos encontrábamos afuera.

-Si hay secretaria yo la distraigo mientras que tú entras a la oficina a revisar.

No puede decirle nada ya que se había puesto en marcha hacia el edificio. Me daba bastante miedo entrar ahí dentro pero no me quedaba de otra que hacerlo sobre todo porque Andrés me obligaría entrar en contra de mi voluntad.

Cuando entramos nos dirigimos a recepción para preguntar por la oficina de Frank, después nos fuimos al ascensor y subimos al piso cinco en dónde estaba todo relacionado con la pequeña empresa de la que él era dueño.

Al salir del ascensor nos encontramos de frente con la secretaria que se quedó mirando por harto rato a Andrés con una sonrisa coqueta. Esto sería pan comido para él.

-Hola, buenas tardes. –dice Andrés acercándose al mostrador.

-Hola, ¿En qué puedo ayudarle? –pregunta con un tono sensual. Me daba asco ver esa escena. Me excuse con que quería ir al baño pero no me pescaron.

Era hora de realizar lo que habíamos planeado afuera que no era mucho que digamos. El piso estaba dividido en dos pasillos y nos sabía hacia dónde ir, la secretaria me indicó que el baño se encontraba hacia la derecha. Por suerte a Frank siempre le ha gustado tener sus oficinas para ese lado. No entendía su obsesión por eso, decía que eso le daba buena suerte para los negocios que manejaba. No sé qué tipo de suerte pero según le resultaban siempre.

Secuestro por Venganza [Sin Editar]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora