Taeyeon
- ¡Mamá está en casa! -grité lo suficientemente alto como para que mi vecina le diera golpes a la pared.- ¿Ginger? - lance los cascos al suelo y afirme mi mano en la manilla de la puerta. Sentí el ladrido fuerte y mi mundo se iluminó al verlo correr hacia mí y de un solo salto me empujo contra la puerta haciéndola cerrase de golpe. -Hey, chico. Ya no eres tan liviano como hace unos años atrás,
Ginger era un french poodle y demandaba mucha comida, tratos especiales y atención, y más que nada; espacio. Lo tenía hace más de 8 años, y lo adopte cuando era un cachorro con pocos días de vida que trágicamente perdió a su madre.
Sí, me enamoré de el por las cosas en común que teníamos.
-Quieto. - dije decisivamente y mire de reojo a Ginger que se sentaba en el suelo y me miraba con atención. -Dejaré el plato y esperaras a que me mueva y te diga "Come" solo ahí, tú lo harás ¿Entendido? -Ginger giro su cabeza con duda, como siempre en la misma situación que nos llevaba años, el trataba de entenderme pero la comida lo distraía. -Tomare eso como un "Entendido", está bien-comencé a bajar el plato y él ya había metido su hocico adentro. Deje molesta el plato en el suelo - ¡Oh mierda! ¿Qué no puedes ayudarme a cumplir mi fantasía de ser como el encantador de perros.
Ginger me ignoro y siguió comiendo sus galletas con salsa de carne, mientras yo preparaba mi propia comida. Consistía en meter la pizza en el microondas y listo. En el preciso instante en que me festejaba por mis dotes en la cocina fue cuando recordé mi celular, casi corrí hasta el bolso y lo saque revisando el mensaje, luego me lance al sofá esperando que el microondas preparara mi comida.
- ¡Ginger, necesito tu compañía!
Un solo grito y en 3 segundos Ginger estaba a mi lado acomodando su cabeza en mis piernas mientras sus grises ojos me miraban atentos, agradecía tanto la comida.
-Esta chica está jugando con fuego, mira. -le mostré la pantalla del celular y sonreí al ver que el chocaba su nariz contra el aparato -Olvide que no sabes leer humano, ok, dice esto: "Cuando dijiste que llamara pronto, acepté, pero pronto para mí, es en al menos una o dos semanas, a no ser que llames antes. Fany"
Me sentí estúpida por sonreír tanto. Tiffany en verdad no llamaría y yo no era de llamar primero, pero demonios, no esperaría una semana o dos.
- ¿Debería llamarla? -Ginger aulló al sentir a su novia hacerlo del primer piso, el molestoso llamado del amor en la madrugada. Decidí imitarlo para tortura de mis vecinos. - ¡AUUU es si, mi hermano! Pero lo haré más tarde, me merezco unas horas de sueño ¿No?
Si Ginger hablara, habría dicho: Tal vez no, perra.
No alcancé a dormir más de 3 horas y mi cretino despertador comenzó a sonar. Lo detuve de un grito y agachó las orejas. Yo amaba a Ginger con cada parte de mi cuerpo y alma, pero santa mierda, ¿Por qué se ponía a ladrar cuando sabía que yo merecía descansar? Después de todo, yo lo mantenía. Podría simplemente hacerlo cuando yo no estuviese, me importaba muy poco la tranquilidad de los vecinos.
Luego de una larga y placentera ducha, me puse mi ropa de ejercicio y me dispuse a hacer lo que no hacía en semanas; limpiar el departamento. Tendría que decirle a Yuri, que le dijera a Boa que me diera un maldito aumento para contratar a alguien que limpiara por mí. Además no ayudaba mucho que Ginger se cagara junto al balcón siendo que le había puesto un maldito arenal para eso.
Después recordé que no era gato.
Luego de 20 minutos de un rápido aseo bajé al primer piso y dejé las bolsas de basura en el contenedor. Estaba exhausta, debía fumar.
ESTÁS LEYENDO
Taeyeon & Tiffany (D&K)
FanfictionSiempre hay chicas malas y buenas. Tiffany es una de las buenas: siempre obedeciendo a sus padres, a sus amigos y a todo lo que se espera de ella. Sus secretos siempre fueron suyos, era algo que al menos le quedaba, pero uno de estos secretos es de...