12.

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Tiffany.

Taeyeon salió velozmente del baño, la oí cuando me gritó que estaba lista y la vi correr envuelta en una toalla blanca hasta su pieza. No me atreví a seguirla, pero si entré corriendo al baño. La carne no era un muy exquisito perfume que digamos.

Me quité el vestido lamentando que fuera víctima de la salsa. Amaba ese vestido, y sabía mejor que nadie que no se salvaría de esa. Al menos, mi ropa interior estaba sana y salva. Taeyeon dijo que me prestaría de su ropa, así que me salve del momento incomodo en que su ropa interior no me hubiese quedado.

Entré a la ducha y me quedé debajo del chorro de agua viendo cómo se volvía color café. El agua caliente hacia que todo oliera a una barbacoa.

Aun así, ignore el hambre y pensé.

¿Podía vivir con esto? Obviamente no me refería a la salsa de carne corriendo por mi cuerpo, si no a mostrarme tal y como era porque, hasta el momento, solo me mostraba así con Yoona y Taeyeon y quería que todo el mundo me conociera así, pero era tan complicado sabiendo lo que venía, las opiniones y el posible rechazo.

Había escuchado a mi madre hablando con desprecio hacia los homosexuales por años, y cada palabra estaba grabada en mi cabeza y hacía eco cada vez que Taeyeon me hacía reír o cada vez que me miraba. Podía oír a mi madre diciendo: Solo son una falla, pobres desgraciados.

No podría vivir sabiendo que mi madre pensaba eso de mí: que solo era una falla, algo que no salió bien.

Envolví mi cabello en una toalla más pequeña y me envolví el cuerpo en la más grande. Salí en puntitas por el pasillo hasta el cuarto de Taeyeon, no oí ruidos así que pensé que Taeyeon debía estar en la cocina o en living, así que solo entré.

Pero si estaba en el cuarto.

Estaba de espaldas y en ropa interior. Ropa interior pequeña, de encaje y negra que parecía hecha para sus curvas y su bronceado cuerpo. Tenía unos cuantos tatuajes, pude ver la palabra purpose en su nuca, rosas en su hombro derecho, una J en su cintura, y una grande y hermosa mariposa negra en la parte baja de su espalda.

-Ya me bañé.

Probablemente era evidente, por las toallas y eso pero no se me ocurrió nada más que decir. Estaba demasiado impactada por el exceso de belleza frente a mis ojos.

- ¿Necesitas ropa interior? -ella no se giró, siguió inspeccionando en su closet mientras arrojaba ropa a la cama.

-No...mi ropa interior está bien. -y lo estaba, solo porque no la estaba usando justo en ese momento. -Me preguntaba si tenías alisadora...

Finalmente, Taeyeon se giró completamente dando una rápida vista de sus pechos antes de cubrirlos con una polera roja que dejaba a la vista su abdomen. Otro tatuaje se escondía en su pelvis, el mismo que había tratado de ver la otra noche.

-No, no tengo de esas mierdas, matan al cabello.

- ¡Mi cabello depende de esas mierdas!

Taeyeon solo sonrió mientras se ponía unos ajustados jeans negros que tenían agujeros por los lados.

-Lo siento querida, no tengo. Iría a pedirle a Hyoyeon pero acabo de oírla saliendo con Heechul.

-No importa-mentí-Me vestiré. Elige algo lindo. -gire de vuelta al baño mientras ella reía.

-Te elegiré uno de mis favoritos.

Una vez en el baño y con ropa interior puesta, mire mi reflejo, mi pelo estaba húmedo, pero las ondas ya estaban formándose. Demonios. ¿Y si mi cabello natural no le gustaba a Taeyeon? Debería correr el riesgo. Además, según la mayoría de personas que había visto mi cabello (Familia-Yoona-Key) mi cabello era hermoso.

Taeyeon & Tiffany (D&K) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora