Taeyeon & Tiffany (D&K)

29.

Soy una nómada
Soy una aventura de una noche
No pertenezco a ninguna ciudad
No pertenezco a ningún hombre
Soy la violencia en la lluvia torrencial
Soy un huracán. —Hurricane, Halsey

Taeyeon

Me sentía algo bendecida con mis dotes para conocer a la gente, a veces solo necesitaba mirarlos y me daba cuenta de sus debilidades. La mayor debilidad del hermano mayor de Victoria era su ego, obviamente para él era una cualidad excepcional y cuando vio mi moto menciono cuan poco femenino era y como esa moto debería ser manejada por un hombre.

Su ego y su machismo serian su perdición.

Rápidamente aproveche el momento a solas con el idiota para mencionar el tema que era obvio para ellos: su hermana y su locura.

—Ustedes saben que su hermana tiene conductas pecadoras y lésbicas ¿Cierto?

Su mirada de molestia se enfocó en mí y le sonreí angelicalmente; como si jamás hubiera tocado a su hermana.

—Sí. Es su secreto y nosotros como hermanos se lo guardaremos de papá.

—Bueno pero ella no está muy preocupada de mantener el silencio. Me amenazó diciendo que su mismísimo padre vendría por mi cabeza.

—Es una niña caprichosa, siempre lo ha sido. Fue tu maldito problema meterte con ella, nosotros solo venimos para controlarla.

—Demonios, yo no sabía que era loca. Actuó muy normal.

—Cuidado. Es mi hermana y no hay nada que soporte más que a una imbécil insultándola.

Levante mis manos y me encogí de hombros. No era un buen día para morir en manos de un Ruso. Si moría en manos de alguien seria de algo más de mi cultura, un chupacabras o algo así.

—Como sea, si tanto la quieres supongo que te gustaría que ella estuviese con alguien que la amara y sinceramente yo no soy esa persona.

—Ella ya te eligió, por más que le hagamos entender que no te tendrá no va a hacernos caso.

Mordí mis labios sin sentido buscando una solución que tardó mucho en llegar, de hecho, Xia llego con ella.

— ¿Es cierto que hacen carreras clandestinas cerca de aquí?

Ampolleta ecológica a favor del medio ambiente... ¡Encendida!

— ¡Oh, sí! Estoy invicta desde que tengo 19 años. —Xia me sonrió sorprendido pero Jian frunció su ceño. —Ningún hombre me ha ganado.

—Nunca has competido con un verdadero hombre entonces. —me encogí de hombros y el miro hacia el estacionamiento. —Yo te ganaría.

—Lo dudo, estaré en la meta y tu trasero estará a la distancia que estamos de China.

— ¡Adoro a esta chica! —Xia me sonrió y yo le levante las cejas a Jian. —Deberían competir.

—Esta noche, Taeyeon. —me di la vuelta para chequear mi moto y sonreí al haber conseguido tan fácilmente lo que quería. —Vamos, chica. ¿No dices ser tan genial?

—Solo compito cuando hay algo que ganar. —me gire a verlo y él me miro con duda. —Si ganó; se llevan a Victoria de regreso a China y no vuelvo a ver a ningún Song en el resto de mi vida.