Here I am ~ #FanFic

Capitulo 3: Gritos.

Mandy Williams.-

Me senté porque me sentía desfallecer, necesitaba tanto de su compañía, tanto de su voz, de sus consejos, de alguien que me cuide, que me haga sentir niña, necesitaba tanto a Harry.

- ¿Harry? – dije por lo bajo, ya no podía arrepentirme de haberle llamado.

- ¿Quién habla?

- Hace 8 meses que no estás para cantarme –mi voz estaba a punto de quebrarse pero traté de aclararla.

- ¡Maldita seas, Mandy! ¿Dónde estás? Sé que estas en Londres, pero ¿dónde? –tuve que alejar un poco el celular de mi oído, mi amigo gritaba, no sé si de emoción o por lo enojado que podía estar.

- No me odies –susurré apenada.

- Lo haré si no me dejas verte ahora –insistía él, también quería verlo y que me contara todo lo que ha pasado.

Acordamos en juntarnos en una pizzería del centro, en aproximadamente 30 minutos. Ya estaba lista, físicamente lista, pero el corazón lo tenía apretado y me sentía tan nerviosa in saber por qué.

Ya estaba caminando y faltaba media cuadra para llegar, pero un gentío a las afuera de la pizzería llamo mi atención. Habías mayoritariamente niñas, bueno no tan niñas, muchas de mi edad e incluso mayores ¿Qué pasaba? Me acerqué rápido y poniéndome en puntillas para intentar verdor sobre las cabezas de todas estas personas, metiéndome entre medio para saber qué rayos pasaba.

-Ahí está –gritaban unas haciendo que el resto se desesperara para poder captar algo de lo que sea que estaba adentro.

-Disculpa –toqué el hombro de una chica, ella volteó- ¿Quién está dentro?

-¿Cómo no lo sabes? Dios ¡es Harry Styles! –me respondió histérica, la miré alzando una ceja y asintiendo como si eso fuera obvio.

Salí entre empujones y dolor de cabeza del tumulto, poniéndome lejos de sus molestos gritos, de los flashes y carteles coloridos con palabras de amor y uno que otro diciéndole que e cacen con ellas, y en muchos vi las siglas “1D” ¿Qué significaba eso?

Empecé a caminar de vuelta al departamento sin ganas de llegar realmente, pero es que no tengo donde ir, no tengo a mis amigos aquí, bueno si a Harry, pero si hubiese entrado a reunirme con el, estaría mezclándome con su fama, sus líos de paparazzi y las ¿fans? No quiero eso, no quiero interrumpir y armar problemas en la que ahora es su vida, una vida sin mí, y con sus amigos, su banda y quizás cuantas cosas más de las que no estoy enterada.

Llegué a casa, mis tíos estaban cenando, me invitaron a comer con ellos pero me negué dirigiéndome a mi cuarto con la escusa de que estaba cansada y quería dormir. No me importaba que fueran recién las ocho de la tarde, me puse pijama y me tiré a la cama. Silencio, eso era lo que me calmaba, sin televisión para no saber del mundo, sin radio en mi pieza por el hecho que también pasaban noticias del mundo ahí, si, puede sonar antisocial y anticuado, pero es así como me gusta, sin noticias de la prensa rosa, ni Hollywood, ni famosos, ni música comercial, ni bellos rostros, ni publicidad, nada. Con los chismes que ponen en la revista en la cual trabajo me basta y me sobra por ahora.

Entraba una llamada a mi celular, vi que era Harry y no sabía si contestarle o no ¿Qué hago? Quiero escucharlo y darle explicaciones porque las merece, pero tengo miedo.

-Aló –murmuré al contestar- Harry, lo siento, fui… lo juro, pero había tanta gente, y gritos desesperados por doquier, me sentí diminuta con tantas personas acosándote y no supe que hacer… estoy en casa ahora –dije todo tan rápido que el aire me faltó.