Cabaña

349 25 0
                                    

La casa estaba muy bien decorada, la sala era enorme con un gran televisor, y sobre la chimenea habían muchas fotos de Tom y sus hermanas, todas de cuando solían ser niños, y también de Tom y su golden globe, todo era muy inglés. Ya había estado en Londres años atrás en el estadio dando un concierto, y en una premiere. Su madre y sus dos hermanas no dejan ni respirar a Tom, entre cosas que habían sucedido cuando regresaron, sobre sus contratos y cosas de ese estilo, a mi no me habían tomado mucho en cuenta y por mi estaba bien, quería pasar inadvertida pero creo que los días que estaría eso seria algo, complicado. Yo estaba sentada a su lado viendo cómo hablában, y ya me había desesperado un poco, saqué mi teléfono de mi bolso y textee a Robert, quien sólo me decía que así es la familia de vez en cuando, como se supone que iba a saberlo, mis padres nunca estaban, no tengo hermanos, pero me hizo reír con un solo mensaje, me envió una imagen de el y Max en California, ambos al lado de un enorme muñeco en el parque te atracciones. Me reí por lo bajo y ahí fue cuando reaccionaron de mi presencia a su lado.

-Disculpa de verdad creo que no te tomamos mucho en serio, solo que bueno, Tom no vuelve muy seguido por su trabajo, siempre hemos sido muy unidos - dijo Emma, la hermana de Tom con una gran sonrisa, creía que estaba enojada, pero estaba mas bien algo desconcertada, ya que me había entretenido con mi teléfono -

-Esta bien yo entiendo que lo reciban con mucho cariño, eso es algo lindo, jamas había visto tanta calidez - y era verdad, lo más cercano a ver algo como eso, fue una vez en una película, de caricaturas para ser exactos, y era como ver algo extraño -

-Tu familia debe de recibirte con la misma calidez, digo eres la hija ejemplar, que es el médico bondadoso, alegre, y reconocido, deben de estar sumamente felices por ti - ya me harté de éstas preguntas, Tom carraspeo la garganta pero sus hermanas no entendieron - ¿Cómo son tus padres? - esa fue la parte más difícil de enfrentar, hablar de como me olvidaron ya no es problema, pero describirlos, ya no se como hacerlo, Tom me vio y negó con la cabeza, sabía que no quería responder, y sus hermanas aún no entendían que con los ruidos falsos de aclarar su garganta quería decir ya basta -

-Ellos - pero mi mirada se perdió en la pared, en la foto familiar de Tom, y los recordé hacia tanto que no lo hacía, ya casi los había olvidado - Mi padre era... es muy alto, con un par de canas en su cabello, ahora que lo pienso jamás lo vi sin un buen traje puesto, tiene los ojos azules, y casi no Sonreía a menos que fuese por negocio, y mi madre ella, siempre vestía muy elegante, siempre estaba bien peinada, y creo que nunca la vi sin zapatos altos, y sin maquillaje, y fumaba, ambos, no se decir cual era o es su cosa favorita, casi no me hablában, solo un par de veces cuando recordaban que estaba al final de la enorme mesa, o cuando nos encontrábamos en alguna... - iba decir alguna premiere, o en alguna presentación, me perdí mucho en una foto, y para ese momento Tom ya había hecho mejores señas a sus hermanas, que ahora me veían algo apenadas - ¿A qué hora nos vamos? - dije a nada de que mis ojos se cristalizaran -

-En en - tartamudeo Sarah - En dos horas, hicimos algo especial por su llegada - tragó saliva con dificultad, se levantó del sofá y fue a la cocina - Vengan, deben estar hambrientos - me levanté como autómata y seguí a Tom, aun estaba metida en mis pensamientos - El platillo favorito de Tom un postre de chocolate con el té, aun es temprano pero no hay horario para un buen té - Emma acompañó a la cocina a Sarah, la madre de Tom se sentó en la mesa, yo me senté al lado suyo, la mujer me veía muy sonriente - Tom ¿Podrías venir un segundo? - Tom estaba parado detrás de mi, cuando su hermana se asomó desde la puerta de la cocina, Tom asintió y fue hasta su hermana -

-Cuéntame querida ¿Qué tal el hospital? Tom nos a contado mucho sobre tu trabajo, es admirable lo que haces por esos niños, también nos enteramos que te ganaste ese premio por ayudar a niños en Sudán, Tom habló tanto de ti al conocerte ahí - solo asentí con la cabeza, no sabia como responder -

Cuando Nos Descubra La Casualidad Donde viven las historias. Descúbrelo ahora