Cuando Nos Descubra La Casualidad

Ya Están Aquí

Emma y Sarah se ofrecieron a cocinar, claro Tom las ayudaba, Diana hacía postres especiales para mi y James me contaba chistes, fueron cinco días donde sólo veía la cocina, la sala y la habitación, me sentía enferma, aun cuando no era nada de eso.

-Vamos linda, solo faltan dos días, ya empacamos ropa para ti, es algo suelta, los hilos pueden lastimarte un poco y créeme vas a necesitar una faja, ayuda a mucho a la espalda - ellos se preocupaban tanto por mi, como si fuera de la familia -

-Tom, quería pedirte algo - jugaba con mis dedos - Sabes preguntaste por esto miles de veces y creo que tienes razón, y tengo razón pero, quiero decirle a David cuando van a nacer las niñas, solo eso, no va a acercarse a ellas a menos que lo vigilen mil policías por que si le hace algo a mis hijas lo voy a matar- Tom se sentó aún lado mío en la cama -

-Yo le diré, y le enviaré una fotografía de ellas, cuando las pueda ver en los cuneros - tocaron la puerta de la habitación, yo solo había ido a cambiarme los zapatos debido a que mis pies están algo hinchados -

-Madelein - Sarah se asomó por una pequeña rendija - Cierta personita a venido a verte - no entendía quien podría ser - Ven tienes que verle - me levanté de la cama con ayuda de Tom y salí a ver a la sala, la madre de Tom, James y Emma habiam salido a comprar así que estaba vacía, caminé hasta la sala y ahí sentados estaban Robert y Max con su pequeña Candace - Vuelvo más tarde iré con madre -

-¡Robert! - grité emocionada, Tom se quedó parado en el marco de la puerta, mirándonos feliz - Ya puedo dar a luz con calma - el se levantó de inmediato y fue a abrazarme - Y mira, Candace es enorme, se supone que debe ser pequeña, ella va a jugar con mis hijas -

-Me duele verla crecer, y a sus abuelos - deshicimos nuestro abrazo y de inmediato Max me abrazó, Robert es como mi hermano así que el también era mi hermano -

-Mírate, dos días para ser mamá, ni yo lo creo - me miró atónito - Parece que fue ayer cuando bailaste con Tom en ese cumpleaños suyo, que duró poco, espera a que las niñas nazcan y conocerán una verdadera fiesta - vaya que parecía que hubiese sido hacia poco, pero no, un par de meses después ya esperábamos a las niñas -

-Vaya dos días - me senté en el sillón - Ya me veo en la sala de partos, pero principalmente ya me veo cargandolas, tienes que entrar cuando ellas vayan a verme, ni creas que no vas a hacerte responsable como tío Robert, por que no puedes, tu prometiste llevarme comida real al hospital y vas a cumplir -el se río por lo que dije, pero era una promesa -

-Lo se eso haré, seguro que papi - miró a Tom que les llevaba un vaso de jugo de naranja - Y sus abuelos estarán ahí así que entraré después de ellos - bebió un poco del jugo para aclararse la garganta al mismo tiempo que Tom se sentaba aún lado mío - Se que dijiste que no pero trajimos obsequios para Diana y Dafne -

-Nosotros mismos lo elegimos, por cierto cuado vayas a ponerle música a las niñas procura que no sea barbie, nosotros desayunamos y cenamos con ellos y créeme es horrendo - ya me veía como ellos en un par de meses -

-Estamos hospedados muy cerca de aquí así que como no podremos estar todos en el hospital vendremos aquí a verlas cuando estén en casa, estaremos solo cuatro días no queremos incomodar - Tom sabía bien que necesito de el, y su familia entendía es más, eran muy amigables -

-Esta bien, pueden venir cuando quieran, y que bueno que vinieron a tiempo por que cuando Madelein dijo que no daría a luz hasta que llegaras comencé a preocuparme, por que se que puede ser real - Tom estaba preocupado, sabía que lo haría, por que sin Robert no me sentiría segura para nada -