Cuando Nos Descubra La Casualidad

Nuestra Canción Favorita

Las cortinas se abrieron de golpe y todos miraban sin entender, se acercaron a mirar, era improvisado en todo los sentidos, nadie esperaba que hiciéramos eso, Max sabía que le costaba a Robert hacer eso en frente suyo, por eso que nos ocasionó el pasado. Hacía tanto tiempo que no cantaba para tantas personas, sentía un pequeño ardor en la garganta y no exactamente por no haber ensayado y cantar si no por que quería cantar más fuerte.

Wrapped around your finger
I'd spent my whole life
Trying? ways to have you
And everything was alright
Almost but not quite
I'd be tanlged up without you Or a mess?
Like a nightmare in an empty bed
With you its like im mcoming home again
(hey) Baby you're hands down
the best thing about me
And baby
I dont where I was
But im so glad you found me
wrapped inside your sheets
will i look after you
because you look after me
and kiss me till i bleed i dont want anything but all of you
i know i swore i said: i'll never love again
but oh man oh man you're my best friend
baby you're hands down the best thing
about me and baby
i don't where i was
but i'm so glad you found me
baby you know i love you
more than my words
know how to show you baby.

Miraba a Tom cada que sentía que lo que decía era justo lo que pensaba de nosotros, él me miró fijamente, sabía que hablaba sobre él, me Sonreía feliz. Era eso, era una casualidad hermosa, eso que me hace sentir en casa, y agradecía por encontrarnos. Max lloraba, por el gesto que sabía no era cualquiera, esto era diferente, era eso que sabía no era fácil pedir viniendo de mi o de Robert, pero no tuvo que pedir algo como eso, por que el merecía esa ocasión, merecía ese comienzo, merecia perder el miedo al pasado, miedo al recuerdo, el merecía eso, por lo menos una canción. Aún que esa canción no era suficiente, él merecía mil canciones, Robert lo sabía, yo lo sabía, y por él, hubiese cantado hasta quedarme afónica. Los dedos me ardian por sentir las cuerdas, hacía tanto que no hacía eso, tantos años. Todos nos aplaudían, estaban felices, y en realidad nadie notó el parecido de mi voz, o de la banda, y era una cosa más que agradecer en el momento.
Regresamos a nuestras mesas, sabía que Robert quería un brindis y estaba dispuesta a hacerlo, además debía por que si no servirían rápido la comida y el postre. Volví a la mesa con Tom, que siempre está sonriente, y jamás voy a hartarme de su sonrisa y del azul de sus ojos. Robert se levantó de la mesa en la que estaba sentado, los meseros sirvieron vino blanco a cada invitado de las mesas, que no eran muchas. Hizo sonar su copa golpeando con un cubierto, todos voltearon de inmediato a verlo, se acercó al micrófono para dar gracias a todos y cada uno de los invitados.

-Quería agradecerles a todos, no solo por el lindo gesto de aguantarme cada día, si no de tomarse el tiempo de venir este día tan importante para mi, aunque siendo sinceros no sabia que pasaría y eso es lo segundo. Y si me lo permiten quiero ser le primero en dar mi brindis, antes que nadie por que creo que, es justo lo que e soñado últimamente - río nervioso y todos reímos a la par, sostuvo la copa en sus manos, se acomodó el saco y se aclaró la garganta, volteo a ver a Max, que lo miraba sonriente pero no era cualquier sonrisa, era de esas sonrisas especiales que sabes no se le dan a cualquiera, y lo sabes y te sientes agradecido - Hace casi diez años conocí a Max, en un café, lo vi y lo reconoci en en instante, me quedé con él en una mesa platicando, pasaron horas y no nos dimos cuenta, yo le veía ahí frente mio, bien peinado, con su camisa lisa y pulcro, con esas sonrisas de película, y me vi a mi mismo en sus ojos, estaba desaliñado, con el cabello sucio y despeinado, la ropa salpicada, y en definitiva olía a cigarrillos, no podía dejar de pensar que no era nada frente al hombre que tenía enfrente de mi. Sus ojos me dijeron lo contrario, miré mi reloj, recordé la fecha el lugar y hasta los rayos del sol que entraban por la ventana y hacían resplandecientes sus ojos, y lo supe, estaba enamorado, y era el diagnóstico de enamoramiento más corto de todos, y lo sabía, quería comprobar que no era solo algo pasajero, y después de días, meses, no solo descubrí que me encantaba, y que estaba enamorado, si no que estaba a sus pies y no podría ni quería levantarme - giro hacia Max, se podía ver un par de lágrimas correr de sus ojos - Eres lo mejor que no creí que me pasara, por que me hiciste el cambio más grande de todos, me hiciste de nuevo, desde cero, me viste desde las cenizas y me hiciste fénix, estuviste tanto para mi más que yo mismo, y fuiste mi fe y me esperanza. Si alguien me hubiese dicho que sucedería esto, cuando era más joven me reiría, no hubiese creído esto pero aquí estoy y no me arrepiento de nada, por que todos los caminos, cada paso que di me trajo a ti, y ahora, que encontre mi universo, ahora que estoy en casa, no quiero salir jamás, solo quiero ver las estrellas que iluminan tus ojos, y calentarme con los rayos de tu sonrisa, embriagarme con el olor de tu perfume, y dormir bajo la protección de tus brazos, y se que ya nada me falta, todo eres tu, todo lo que siempre e querido, y no hay nada más valioso que el amor que me das, y tampoco busco mas tesoros, ya encontré el mio - alzó su copa y todos repetimos el acto - Quiero hacer un brindis no a nuestra boda, ni mucho menos a nosotros los novios, quiero hacer un brindis por Max, por ser tan fuerte y dedicado, y por aceptar a un vago torpe como yo, y darme futuro y esperanzas. Por Max - todos alzamos la copa y dijimos al unísono "Por Max" luego bebimos de la copa, habían algunos llorando o riendo, los niños jugaban y reian al atravesar el jardín -