Perder Tu Amor ||Everlark|| [Terminada]

Capítulo 3

Katniss

En la mañana siguiente, Lorenzo estaba muy raro. Cada tres minutos nombraba a Peeta y luego le decía: «nada»

-Peeta. -llamó por milésima vez.

-¿Qué sucede, Campeón? -le preguntó.

Esperábamos la misma respuesta de siempre pero está vez mi hijo no respondió lo que esperábamos.

-¿Te puedo llamar «papá»? -preguntó con timidez, Lolo.

Su pregunta había dejado helado a Peeta. El rubio me miró esperando mi respuesta pero yo estaba igual que él.

Estaba segura que a Peeta le encantaría ser llamado de esa forma, estuvo con él desde que era un bebé y las veces que Finnick no podía estar -obviamente que era por problemas de trabajo-, era Peeta quien estaba con él, y sé que Peeta no quiere sacarle el lugar a nadie.

-Mmm..., A mí me encantaría que vos me llames de esa forma -decía el rubio con cautela-, pero primero tendrías que hablar con mamá y sobre todo con papá.

-Genial... -respondió con entusiasmo-. Hoy lo hablaré con mamá y mañana lo haré con papá.

-Hola... Estoy acá. -dije, haciéndome notar por ambos que al parecer ignoraron mi presencia en su charla.

-Mami, estabas acá -soltó con inocencia-. Le pregunté a Peeta si podía llamarlo «papá» y él me dijo que tenía que hablarlo con vos y con papi. -me explicó Lorenzo, y volvió a tomar de su leche.

-Es muy lindo que quieras llamar a Peeta de esa forma, él te cuidó y te cuida además te ama desde que eras un bebé pequeñito -dije-. De mi parte tenés permiso pero debes hablar con papá.

-Mañana que voy a su casa.

Me emocionaba mucho saber que mi hijo vea a Peeta como a un padre, él más que nadie se lo merecía y se que Finnick no tendría ningún problema con eso, se llevaba bien con mi nuevo esposo.

-Cómo te llevas con Annie últimamente. -quise saber.

-Bien -contestó sonriendo-, aunque a ella no la voy a llamar «mamá».

-¿Por?

-Porque la abuela Cressida dice que mami siempre habrá una y que pudo tener una del corazón como Annie pero yo no quiero llamarla así... Annie ya tiene una hija y Peeta no, además el es mi papá del corazón. -explicó mi pequeño.

-¿La abu Cressi lo sabe? -hablé con sorpresa.

Cressida es la madre de Finn. Nos llevamos muy bien y mi hijo confía en ella plenamente por lo que no debería de sorprenderme pero que ella estuviera de acuerdo con eso me dejaba más admirada de esa mujer.

-Sí y no sólo eso le dije -su carita se puso seria-, le dije que Annie no me cae muy bien y que ella solamente es la mamá de mi hermanita.

-Estás muy enojado con ella. -habló Peeta.

-No me dejó ver dibujitos porque la bebé dormía.

Peeta y yo compartimos miradas y empezamos a reír. Sabíamos el motivo de ese viejo momento.

-Pero ese acontecimiento sucedió hace casi dos meses y sabes muy bien lo que pasó -lo acusé-, estabas escuchando la televisión muy fuerte y que Rufi había estado muy enferma lo cual no podía dormir muy bien por las noches.

Lorenzo iba a prostestar pero lo interrumpí: -No quiero protestas porque tu abuela me lo contó todo sobre ese día.

-Está bien.

-Deberías darle una oportunidad a Annie, tal vez no como se la diste a Peeta pero podrías llevarte bien con ella por papá y Rufina.

-Pero no sé si quiero llevarme mejor con ella.

-Annite te ha cuidado desde que eras chiquito al igual que yo y de seguro te quiere tanto -Peeta le estaba hablando-, le debe doler que vos no la quieras y a tu padre también le duele eso... Cuándo Rufina sea más grande, ¿Te gustaría que ella le hable mal a tu mamá?

-Obviamente no me gustaría que Rufi le hable mal a mami.

-Entonces no hagas lo mismo con su mamá.

-Voy a hablarle bien a Annie sólo porque no quiero que Rufina le hable mal a mamá y también porque a papá le duele. -dijo Lolo.

Me alegra un poco saber que al menos se pudo arreglar algo con respecto a ese tema. Le caía bien, el mismo lo había dicho pero necesitaba un empujoncito.

-Algo es algo pero así se habla, campeón. -le festejo Peeta, le revolvió los pelos cobrizos a mi hijo y luego me guiñó el ojo.