7; ocean.

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"No."

Harry lo miro con clara frustración, él ya estaba con mitad del cuerpo en las frías pero hermosas aguas del Caribe, y sólo lo había hecho porque Niall le prometio que si le demostraba que no iba a pasarle nada, entonces él se metería.

"Esta todo bajo control, Ni." Le aseguro, y para convencerlo se sumergió en el mar para que todo su cuerpo estuviera empapado.

"¿Lo ves?"

Niall tenía sus pies a la orilla del mar. Con el pequeño oleaje que llegaba, su cuerpo entero se estremecía y un constante estrés se instalaba en su cuerpo al sólo ver a Harry a metros de él en medio de tanto...peligro.

"Bebé. No te pasara nada, te lo prometo." Harry en verdad quería que su novio entrara con él al mar, quería abrazarlo y colmarlo de besos mientras jugaban o simplemente miraban el paisaje.

Niall volvió a negar. Era simplemente un miedo que no pensaba afrontar en esos momentos. Se dio media vuelta y fue hasta donde estaba sus cosas, extendió una toalla y se sentó ahí.

Harry suspiro rendido y comenzó a hacer su camino fuera del mar, llevo su pelo hacia atrás y lentamente salió de las suaves olas. Se acercó al cuerpo cálido del rubio poniéndose en cuclillas frente a él.

"Ni." Le llamo, quería verlo directamente a los ojos. "¿Es qué acaso no confías en mi?" Murmuro, su corazón esperando por la respuesta.

Niall lo miro detenidamente, luego agachó la vista y negó. "No es eso." Respondió, y Harry en verdad notaba lo enfadado y triste que su novio se sentía.

"Puedes decirme, cariño" Harry toco la suave pierna de Niall y comenzó a dar pequeños masajes.

Niall sólo suspiro. En sus ojos se notaba la pelea que tenía internamente. 

"Es algo tan simple como que de niño casi me ahogo." Murmuro, sus ojos llenándose de lágrimas.

"Tenía ocho años. Mi casa estaba cerca del rio." Se encogió de hombros y Harry sólo pudo atraerlo a sus brazos cuando lágrimas calientes mojaron su rostro.

(...)

Harry veía detenidamente a su novio, entre las penumbras y apenas con la luz de la luna, Niall seguía luciendo como un ángel. Sus mejillas coloreadas de un rojo fuerte por el calor, y por lo que sea que hicieron antes de que cayera dormido.

Lo amaba tanto y siempre haría lo que sea para tenerlo feliz. Y en ese momento, tenía una cosa clara: lo ayudaría a superar su miedo al océano.

(...)

Sabía que algo le molestaba y era el culpable de que su sueño terminara, y en otras ocasiones como el gran perezoso que era lo hubiera dejado pasar, sin embargo, ahora ese algo, le molestaba tanto que tuvo que abrir sus ojos. Un brillo le aturdió hasta no ver nada por algunos segundos.

— ¿Harry? – luego de poder enfocar, lo primero que su vista capturo fue a un Harry sonriente, y encontró que lo que le molestaba era el sol que entraba por alguna parte.

— ¿Cómo dormiste? – Harry le pregunto, pero Niall, habitual en él en las mañanas murmuro algo intangible y quiso acurrucarse en el pecho del mayor.

— ¿Podrías por favor recorrer las cortinas? El Sol está horrible...

Niall apenas en sus sentidos escucho a Harry reír. Abrió un ojo y con el ceño fruncido estaba dispuesto a reprocharle, pero se arrepintió porque no quería discutir, sólo quería seguir durmiendo. Bufo como niño pequeño he intento zafarse de los brazos de Harry, pero su cuerpo entero se tensó cuando su pie toco algo apenas lo movió.

ONE SHOTS; STYLAN.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora