XXIV

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Capítulo 24.

"Tienes que canalizar si esto es lo que quieres, si quieres un nuevo rumbo. A veces confundimos la felicidad momentánea con nuestro destino".

Buenos Aires, Argentina. 3 de junio de 2019.

Alessandra: Gracias por hacer esto por ella.

Enviado 13:50

Miré la escuela primaria, esperando la hora de salida de la pequeña. Me encontraba en una banca mensajeando con Less.

Lo que me traía varios recuerdos de cuando ella y yo estábamos juntos, cuando éramos inseparables. Era la misma escuela.

Devon: Por mi pequeña amiga, lo que sea Less. Disfruta tu tarde de descanso ;). Puedes pasarla a traer a las seis a mi casa. Te esperaré con pastel. Por cierto, estar aquí me recuerda a cuando tú usabas dos colitas. Eres muy linda, por cierto.

Enviado 13:52.

Levanté mi vista para volver a ver la entrada, algunas madres ya estaban aquí. Unas me comían con la mirada, literalmente. Hablaban entre sí y me señalaban. Yo les sonreí cordialmente y creí que la más joven de ese grupito, se desmayaría. De reojo noté como seguían observando. Creo que el encanto Devon ha vuelto a surtir efecto, oh no.

Alessandra: Creo que me has convencido con lo del pastel. Y yo sigo siendo linda, no sé de qué me estás hablando Dev.

Enviado 13:53.

Reí un poco y abrí la imagen de perfil de Evane. Estaba ella sonriendo, mientras abrazaba a su hija. Se miraba feliz, se miraba ella. Y sin duda no es linda, ella es hermosa.

Devon: ¡Ayuda! Las madres me están acosando con la mirada. Soy muy encantador para mi gusto. Y tienes razón, no eres linda

Enviado 13:56.

Alessandra: Eso te pasa por galán. Y oye, eso duele. Soy muy linda :(

Enviado 13:57.

Noté por cierto tiempo que escribía y escribía. Pero envié primero mi mensaje.

Devon: Eres hermosa.

Enviado 13:58.

Sonreí victorioso por mi respuesta, Alessandra estaba escribiendo por tanto tiempo. Pareció una eternidad.

Cuando sentí, la campana empezó a sonar y los niños empezaron a salir. Yo guardé mi teléfono y busqué con la mirada a la pequeña Noah. Me levanté de la banca y me acerqué al grupo de madres, las oía hablar por lo bajito.

—¿Eres nuevo? —me giré para verlas, todas sonreían y estaban sonrojadas. ¿Qué tengo en la cara? ¿Será que me queda mejor el pelo largo?—Perdón por ser tan entrometida. Soy Valeria, y nosotras queríamos darte la bienvenida a la escuela.

—¿Gracias? —¿Un comité de bienvenida para los padres? Yo no soy padre. ¿Debería aclararlo? —. Pero yo...

—¿Eres padre soltero? —me preguntó interrumpiendo. Vaya, qué directa. Tenía una linda sonrisa y menos apartaba la vista de mí y eso que estaba casada, vaya vida. Mierda, estaba coqueteando. Aléjate de allí Devon.

Estaba guapa pero por mi mente rondaba la imagen de Samantha. Ella aún estaba tan presente en mi vida, ya no dolía pero recordaba amarla, con cada poro de mi ser. Y en todo caso, también tenía la sonrisa de Evane en mi mente.

—No yo...

—¡Devon! —giré mi vista para encontrarme a una de las niñas más lindas, esta saltó para que la tomara en brazos. Noah estaba feliz, lo supe por su mirada y entusiasmo. Sus ojos tenían un brillo peculiar que me gustaba ver, y yo era el causante. Me sentía feliz, como si estuviera tomando las decisiones correctas. Yo sonreí abiertamente al verla.

Hermosa Pertinencia (Beautiful Last Chance)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora