Bebé Por Contrato (EN EDICIÓN)

CAP. 27 NO ESTOY CELOSA

-Hola-saludo a las dos chicas que están tiradas en los sillones comiendo chatarra.

-Hola, Barry-saluda la chica de cabello negro y labios finos.

-Oh, ella es mi amiga, la conociste en la boda-se apresura a decir Kelly. Le sonrío a la chica, trae puestos unos shorts deportivos y una camiseta negra de tirantes dejando muy poco a a la imaginación, instintivamente miro hacia el valle de sus pechos. No es más ni menos que Kelly, pero está guapa, demasiado, además su cabello es largo y brilloso, y su voz es tan seductora, por Dios, y sus labios. No me había dado cuenta, son bellísimos, rosados y carnosos. Sus piernas se ven bastante tonificadas cuándo ella se levanta para saludarme, seguro que hace ejercicio porque es alta y con una muy bonita figura esbelta. Me mira y me sonríe maliciosamente, esperen, ella es la amiga de Kelly, ¿por qué me mira así? ¿Que no tiene respeto?

-Soy Liz- me tiende la mano y cuándo se la estrecho ella me jala hacia sí y le arrebata un beso en la mejilla, rápidamente busco la mirada de Kelly quien está pasivamente tranquila, con un semblante de decepción pero no de enojo ni de tristeza.

-Ya me conoces-se me escapa una risa estúpida.

-¿Cómo estás?-ignoro a está chica y miro a Kelly. Camino hacia ella y le doy un pequeño estrechón de mejillas-¿Todo bien?

-Sí, claro-dice apresuradamente.

-Bueno, las dejo, iré a la cocina por algo de comida,¿gustan?

-No.

-Sí.

-¿Qué?-me río nervioso.

-No, estamos viendo una película -contesta Kelly un poco malhumorada.

-Por Dios Kelly, no puedo vivir de comida chatarra, comamos algo y le seguimos al maratón de pelis.-Sugiere Liz con una sonrisita.

-No, yo me quedaré a verla. Total, tú ya las viste. -Kelly se tira de nuevo en el sillón y le pone play a la película de comedia.

-Bueno, pues vamos.

Camino hacía la cocina y la chica viene atrás de mí siguiéndome. La cocinera no está, ni una de las chicas que le ayudan.

-Las cocineras ya se han ido-comento.

-Yo cocino, se me da muy bien la cocina, pensé en ser cheff, pero me dediqué a la música -ooh, ya. La recuerdo, es la única chica de la banda que tocó en la boda. Regreso a ese día, todos los de la banda vinieron a saludarnos y Kelly nos presentó, ella tenía un vestido azul marino ceñido y unos zapatos muy altos, en realidad no se veía como ahora o simplemente no le tomé atención.

-¿A qué te dedicas?-Le pregunto.

-Mmh, de todo un poco, ¿sabes? Estudié ingeniería pero no la concluí, porque desde que terminé el insti me fui directo a la academia de música, fue tan larga pero la terminé, ahora doy clases a unos pequeños en un colegio particular y doy clases en un instituto. También doy clases de yoga y soy instructora en un gimnasio del centro. -Sonrie orgullosa de sí misma.

-Suenas muy embelesada por tu vida.

-Ohh, si. Aprendí que soy hermosa y que nadie es menos ni más que yo.-Susurra arrogante. -Bueno, ¿qué te apetece?

-Ahhm, no sé, ¿un filete de salmón?

-Oh muy bien, me sé una receta riquísima-comenta, observa la cocina buscando con que iniciar, se maravilla con todo, lo puedo notar en su rostro bonito.

Observo sus movimientos, son fluidos, y son seguros, se puede notar su gran autoestima. Seguro que es una mujer exitosa.

-¿Te consideras exitosa?

-No, afortunada. Mi papá fue quien me crió, con mano dura, quería que me en listara en el ejército, lo hice. De ahí yo hice lo que quise, la ingenería sólo fue un pasatiempo en dónde aprendí muchísimo, también podría ejercer, pero no. No me falta el dinero, no me faltan amigos ni nada, pero... No me siento exitosa, aún puedo alcanzar más metas. -Me miray me dedica una sonrisa deslumbrante, ella observa la cocina y abre la nevera buscando lo que pedí, revolotea y sostiene una paquete congelado -me parece que esto es-susurra y se lo lleva al fregadero.

20 minutos después la cocina huele maravillosamente bien, ésta chica si sabe cocinar, he estado aquí esperando pero ya me harté de sólo ver como cocina y como canta una canción de rock.

-Iré a tomar una ducha, no tardaré mucho.-Le sonrío y salgo de la cocina, de camino a mi habitación me topo con Kelly quien sale de la suya muy deprisa -hola.

-¿Qué tal la estás pasando con mi amiga?-susurra ella inquisitiva.

-Ehhh, bien-me paso la mano por el cabello nervioso.

-Ah muy bien-susurra con una sonrisa falsa.

-Hey, ¿éstas celosa?-le pregunto cuándo hace ademán de marcharse.

-¿Qué?-pregunta alarmada.

-¿estás celosa?-repito con una sonrisa.

-CLARO QUE NO-chilla.

-Okey-me río y me doy la vuelta, entro en mi habitación y busco mi reproductor de música, pero no está.
Camino hacia el baño y abre el grifo de la ducha-¿qué se te ofrece Kelly?

-No estoy celosa -afirma, sus palabra suenan duras y decididas.

-Dije que estaba bien-alzo las manos en señal de derrota.

-Le he contado a Liz nuestro secreto, pueden ser amigos, no me interesa, a Liz le vendría bien un desliz, además dice que eres guapo-me mira a lo ojos y suspira-podrias hacerla feliz.

-¿Por qué me dices esto?-ella no me contesta, sólo me mira y se va.

Sin lugar a dudas las mujeres son una caja de sorpresas. No fue mi intensión hacer que Kelly pensara cosas raras, sólo fue una pregunta sin sentido, sólo quería molestarla. Pero bueno.

-Huele delicioso-comento cuando entro a la cocina-gracias-Liz me pasa un plato extendido con mi filete de salmón, pasta y ensalada. Wow, está chica es buena. Entonces me la imagino a ella aquí conmigo, embarazada y cocinando. Me borro rápidamente la imagen de la cabeza, eso es estúpido. Bueno en realidad no tanto, y Kelly tiene razón, ella misma lo ha dicho antes, esto es un trato, puedo hacer lo que quiera. Además me ha dado carta blanca con Liz, ella dice que la haga feliz, sin embargo, ¿que hay de su felicidad?

PRIMER CAPÍTULO DEL AÑOOOOO.,
Iba a actualizar mucho antes, pero se me olvidó terminar el capítulo. Pero actualizaré de nuevo esta semana, lo prometo. Espero que se la hayan pasado muy bien el 31, besos. Los quiero un montón.