24 "Vhope"

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El silencio era agradable, pensaba Taehyung, y es que desde su soledad se la pasa así precisamente, sólo, al principio le molestaba. Extrañaba a HoSeok, extrañaba su escandalosa risa y sus bromas sin gracia, que él era el único en aplaudir y reír. Simplemente, lo había extrañado los primeros días.

Pero gracias a ese pequeño ser dentro suyo, la mayor parte del día se dedicaban sus pensamientos en él o ella. Le emocionaba saber que dentro de unos meses tendría una barriga más grande, como tenía su amigo Jungkook, sólo esperaba pasar un embarazo normal. Ya que no contaba con nadie para que lo ayudará, tenía a sus amigos. Si, pero no podía pedir su ayuda por más que ellos mismo se la ofrecieron. Jimin tenía exámenes finales y Jungkook, obviamente, tenía que cuidar de su pequeño "sobrino".

¿Sus padres? Ellos ni siquiera saben sobre su estado, ni de su ruptura con HoSeok. No sabían nada, por que para ellos, nunca tuvieron un hijo llamado Taehyung.

Y no es que al pequeño Tae le afectará, sufrió cuando apenas era un puberto, pero ahora era completamente distinto.

Taehyung se removió una vez mas en su cama, ya habia amanecido, hace muchas horas atrás. Pero él simplemente no quería levantarse de su acogedora cama, no tenía sueño. Pero sus ojos querían estar cerrados y ¿quien era él para impedirlo?

Una fina sabana cubría su cuerpo, que por cierto, estaba semidesnudo de la cadera para abajo, sólo tenía su boxer, amaba dormir así, se sentía más cómodo.

Escuchó su celular sonar avisando de un nuevo mensaje de texto así que con pereza lo tomó entre sus manos, pensó que podrían ser sus amigos o compañeros de la Universidad, pero el número era desconocido. Fruncio su ceño deslizando su dedo en la pantalla aceptando el mensaje.

"Buenos días, pequeño dormilón👀"

Extrañado volvió a leer una vez mas el mensaje, no tenía ni la menor idea de quien podría ser. Se encogió de hombros mientras se dedicaba a bloquear ese número. Ni siquiera tenía una foto de perfil, sus amigos no eran ya que conocia sus numeros muy bien.

Minutos más tarde se levantó de su cama, estiró sus músculos relajandolo demasiado, hasta un hueso había sonado. Como ya se le hizo costumbre, estuvo un rato acariciando su vientre, este tenía un adorable bulto. Con una gran sonrisa en su rostro, decidió ir a asearse para después salir de su casa, estar sólo mucho tiempo comenzaba a molestarle después de unas horas. Iría a visitar a su sobrino por que no lo veía desde hace unas semanas y lo extrañaba.

Se metió al baño con un cambio de ropa más su toalla. Medio hora después se encontraba limpio y fresco. Arregló su cabello y su rostro, aplicando un poco de maquillaje. Y no se podía mentir a si mismo, quedó demasiado atractivo, era verdad eso de que los cosméticos hacían magia.

Bajo la corta escalera con intenciones de hacer un desayuno. Cargo su celular en lo que hacia eso.

Apenas olfateo el aroma de los huevos revueltos, las náuseas volvieron y rápidamente fue al baño de la sala, devolviendo la cena. Cuando terminó cepillo sus dientes y lavó su rostro.

Al final sólo comió fruta, ahora entendía a Jungkook.

Fijando de no dejar nada encendido, tomó su celular y llaves para después  abandonar su departamento. Que por cierto, este no era ni muy pequeño ni muy grande, era perfecto para él. Constaba con dos habitaciónes, un pequeño estudio, dos baños, cocina comedor y un pequeño balcón.

Y lo más importante, y lo que más le gustó, fue que era perfecto para su bebé.

Abandonó el edificio y comenzó su tranquila caminata hacia la casa de Jungkook, que también ahí se encontraba Jimin, el doctor a su cargo le había recomendado caminar todas las mañanas una distancia moderada. ¿Y que mejor forma de poner en practica visitando a sus amigo?

Papá Soltero [Jikook M-preg]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora