Bloodstream -Yoonmin-

Capítulo 24... Yoonmin...

Jin estaba terminando de preparar la comida para Jimin, cuando éste se asomó ligeramente por el marco de la puerta, con evidente timidez.

Sonrió aunque eso no evitó su sorpresa al notar como Yoongi lo estaba acompañando.

-Huele delicioso... -sonrió el pequeño acercándose.

SeokJin nunca había sido cruel con el pequeño y Jimin tampoco se había acercado demasiado a NamJoon para cambiar su actitud; así que a pesar de que por su culpa JungKook ya no vivía con ellos, le agradaba el humano. Puesto que también soltaba halagos sobre su comida, algo que no había hecho desde que él mismo era sólo un mortal.

- ¿Qué es? -intentó descifrarlo desde donde estaba, poniéndose de puntitas para observar.

Así el mayor de todos se percató que Yoongi le sostenía la mano y el sumiso chico no sabía si avanzar.

-Gracias, Jimin -respondió por sus palabras agradables-. Acércate. Es carne de conejo ¿Te gusta?

Jimin asintió efusivamente y después miró por algunos segundos al pelinegro, como pidiendo permiso para aproximarse, con sus adorables ojos de cachorro en ese puchero.

-Anda. Ve -Yoongi acarició su mejilla con una mano, accediendo y luego lo empujó suavemente animándolo a comer.

Jimin se acercó rápidamente tomando un lugar en la pequeña isla de la cocina, saboreando el platillo incluso antes de siquiera comer.

-Bien, los dejo -comentó Jin de manera distraída mientras terminaba de acomodar los trastos-. A juzgar por lo bien que se ven, creo que necesitan tiempo a solas y así, podrían hablar sobre conejos y planes -esa última frase la dijo mirando directo a Yoongi, con otro significado y con cierto recelo en su tono de voz mientras salía de la habitación.

Yoongi sostuvo la mirada hasta que el mayor los abandonó. Aún no quería hacerlo pero tendría tarde que temprano.

- ¿Sucede algo, hyung? -cuestionó Jimin mirándolo atento en el mismo segundo que comía de forma adorable.

-No, pequeñín. Sigue comiendo -sonrió sentándose junto a él.

Jimin siguió comiendo, con la mirada atenta del mayor sobre sus acciones. Era tímido todavía y no podía evitar sonrojarse por llamar la atención -así de mucho- del vampiro.

- ¿Qué? -cuestionó con una sonrisa, llevándose un bocado a los labios para disimular.

- ¿Sabes lo adorable que eres siempre? -Jimin enrojeció aún más de ser posible y negó varias veces, acostumbrado a siempre responderle al mayor-. Pues lo eres. Como ahora... -Jimin casi chilló pero afortunadamente se contuvo.

- ¿Le molesta a Hyung? -susurró intentando concentrarse en otra cosa que no fuera ese precioso chico.

-Mucho -contestó enseguida. Jimin lo miró con pánico-, aunque me he encandilado con el tiempo... podría pasar la eternidad admirándote.

-Hyung... -Jimin sonrió, siendo su turno de ser atrevido y mantener la mirada del otro.

El pequeño ni siquiera se percató de cuando YoonGi tomó la crema de la carne con la punta de su dedo y ensució su nariz para romper esa atmósfera tan intima.

Jimin sonrió amplio y pronto iniciaron una pelea para saber quién ensuciaba más al contrario.

En un segundo ambos pararon, se miraron con intensidad y pronto Jimin estaba sobre la encimera, con los muslos abiertos a YoonGi que enseguida tomó su lugar entre ellos.

[***]

Cuando Jin regresó a la cocina para la comida, se encontró con un pequeño Jimin, abrazado a YoonGi cual koala, con éste último bebiendo sangre de su cuello. Todo el humano cubierto en crema, mermelada y demás alimentos que los humanos consumían.