Adorable Maldición(Terminada)

Sin previo aviso

Sujeto a Andrea y nos metemos en el primer salón vacío que encuentro, cierro la puerta con delicadeza dejándola entreabierta para poder observarlo, ahora que lo detallaba con mayor detenimiento, notó que lleva un pantalón negro con una camisa blanca y unos zapatos beige, su cabello es liso y esta bien cuidado, él seguía diciendo "Aló, aló" hasta que se cansó y colgó.

-¿Qué te pasa?

-Es él...

-¿Qué? ¿dónde estás?

-Allí al frente -señalo donde esta.

-Andrea ve a donde señalo- no puede ser... esa bom bom es tu admirador secreto.

-¡No es mi admirador secreto! Deja de inventar cosas... lo que me pregunto es, ¿qué hace aquí?

-Vamos a averiguarlo.

Y con esta última decisión, Andrea me tomó de la mano y me llevo a donde estaba aquel chico, yo me resistía pero no demasiado porque podría hacerle daño, en el momento que ya logró safarme de ella, él nota mi presencia.

-Hola -dice sonriendo y se acerca hacia nosotras- creí que ibas a la universidad.

-Estoy en ella.

-¿Estudias aquí? Vaya... que coincidencia, yo igual. Veo que seguiste mi consejo.

-no sé por qué me sonrojo por lo que me dice- Sí, estudio aquí y no tenía otra opción, te estaba llamando para poder planificar un día para devolvertelo.

-Así que eras tú la que llamabas... puedes quedarte con el todo el tiempo que tú quieras.

-Andrea carraspea-

-Disculpa... ella es mi mejor amiga: Andrea.

-Un placer Andrea, mi nombre es William -estrecha la mano de Andrea.

-Mucho gusto William, gracias por prestarle tu sweter a Anna, no puede estar faltando a clases. Eres todo un caballero.

-sonríe- sólo hice lo que mi corazón dictó.

-río- eres tan cursi... guarda mi número, si no me dan mucha tarea te entrego tu sweter esta misma tarde.

-No hay apuro.

-Yo si lo tengo. Hasta pronto -doy media vuelta y me dirijo al salón en el que teníamos la próxima clase.

¿Qué se ha creído él? Solamente porque me hablé de esa manera cree que voy a caer rendida a sus pies completamente y perdidamente enamorada, estás bien equivocado y como dirían las españolas "Que capullo tan engreído". Andrea no me pidió explicación alguna, ella sabe cómo soy con este tipos de "inconvenientes". Sinceramente le recomendaría que ni perdiera su tiempo conmigo, que idiotez.

Hice como si ese suceso no hubiera ocurrido en mi día y seguí como si nada, al culminar las clases me doy cuenta de que no nos habían asfixiado con la tarea, aprovecharé esta oportunidad para entregar este sweter, pero primero debo buscar a mi hermano así que le paso un mensaje.

Hermano, ¿dónde estás? -lo mando.

La respuesta es casi instántanea.

En 10 minutos salgo, ¿qué  necesitas?

Va a fastidiarme hasta que llegué a la casa pero si no es así, se extenderá el lapso de tiempo con el que voy a interactuar con... con... ¿cómo era que se llamaba? Ni siquiera le presté atención cuando mencionó su nombre.

Necesito que me lleves a la casa, te espero en el estacionamiento -lo mando

Está bien, te quiero.