Mi Mate, Solo Mio

Capítulo 20

Aiden.

Salgo del cuarto corriendo, tratando de que la toalla que traigo en mi cintura no caiga. Estaba por enjabonarme cuando escuche unos escandalosos gritos, llego hacia un pasillo, y veo que hay una gran puerta café, por alguna extraña razón mi pulso se acelera, tomo él picaporte entre mis dedos y abro de un jalón la puerta. - ¿ Sucede algo?. - en pocos segundos siento como o mas bien alguien se cuelga de mi cuello y me abraza. - ¡¡HEERRMANOO!!. - grita la chica que esta asfixiándome. Alto, dijo ¿hermano?.

Siento sus lágrimas en mi hombro, por inercia llevo mi mano a su espalda y la masajeo tratando de calmarla. - ¿ C-como q-que hermanos? - dirijo mi mirada hacia Alessandra tratando de que me explique, pero noto una presencia atrás de ella.

Siento como me estremezco al ver unos ojos idénticos a los mios, con mi mirada recorro su rostro y cada vez estoy mas sorprendido por él parecido hacia mi. - ¿Q-quien es-s uste-ed?. - hablo tartamudiante, no entiendo nada de lo que esta pasando, ¿quienes son estas dos personas?.

Siento como la chica que tenía encima, se va separando de mi, una vez en él piso, puedo mirar su rostro, es muy bonita, su cabellera corta, color negro brillante, me hace recordar a cierta pelinegra que tengo a unos metros de distancia, sigo observando su rostro, sin duda alguna tiene un rostro angelical.

- ¿C-como?, no, lo co-onoces. e-es nuestr-ro p-a... - habla pero una fuerte voz la hace parar. - Sasha, calla, ve y consigue un poco de ropa para él. - habla él hombre, su voz se me hace un poco familiar. - Pero... - protesta la chica, llamada Sasha, pero la vuelven a callar.

- Por favor, él aun no lo sabe, necesito hablar con él, y creo que en estas condiciones sera un poco incómodo. - termina de hablar y es cuando caigo en cuenta que sigo en toalla, siento como mis orejas empiezan a calentarse y mis mejillas a ponerse coloridas.

- E-esta b-bien padre. - habla Sasha, pasa por mi lado y me da un beso en la mejilla, no se como reaccionar a eso, así que solo bajo él rostro. Siento unos pasos acercarse a mi, por su rico olor se que es Ale. - Seque no entiendes nada y estas muy confundido, pero quiero que lo escuches, por favor,deja que te explique todo. - subo él rostro al escucharla, observo sus hermosos ojos verde azulados, no se que es lo que este señor me tenga que decir, pero por ella haré lo que dice. Asiento atontado por su hermoso rostro, joder, me tiene entre sus manos.

Se escucha como la puerta es abierta, y se asoma un pequeño cuerpo. - Aquí esta la ropa. - habla Sasha, veo como mi Ale se acerca y la toma, agradeciéndole, se vuelve a cerrar.

- Toma, ahí esta él baño, ve. - la tomo y camino hacia él baño, entró y cierro la puerta a mi espalda, recorro cada rincón de este baño, es muy lujoso. Quito la toalla de mi cadera, y empiezo a vestirme, después de unos minutos acabo, cuando estoy a punto de abrir la puerta escucho la voz de Ale. - Trata de ser cuidadoso con él, recuerde que toda su vida a sido una mentira, no me gusta verlo triste, aunque se que va a ser imposible. - de quien hablan?, escucho como sus pasos se alejan y salgo rápido del baño. - Te iras?. - camino hacia ella, estaba a punto de abrir la puerta.

Me da una sonrisa de esas que solo me da a mi, e visto que casi nunca sonríe, al menos que este yo, y eso me hace sentir especial. - Claro que no, estaré afuera, nunca te abandonaría, pero debes hablar con él a solas. - habla, me calmo al escuchar eso, por un momento pensé que se iría. Se acerca y me da un beso en la comisura de mis labios. - Te amo. - me susurra en él oído, sonrió y me acerco a ella, le doy un beso en su frente. Se separa de mi sonriendo, me da la espalda y camina hacia la salida contoneando sus caderas, paso saliva, calma Aiden.

Sin duda alguna ese vestido le queda de maravilla. - Podemos hablar. - escucho que dice él hombre atrás de mi. Doy media vuelta y asiento. - Claro. - Señala una de las sillas que están enfrente de su escritorio, doy unos cuantos pasos y tomo asiento.

- Bien, empecemos. - deja caer su cuerpo en la grande silla, y suspira. - Para empezar quiero que sepas, que estoy demasiado feliz por haberte encontrado, y te pido que por favor me dejes explicarte todo. - un poco dudoso asiento, siento como en mi estómago se va formando un nudo, me siento muy nervioso.

- Hace algunos años, sufrimos un ataque de unos rogues en la manada, esa noche me encontraba con mi familia, mi hermosa familia...- repite, y noto como sus pupilas se van dilatando. - ...acababa de llegar de entrenar a los cachorros que estaban por convertirse, recuerdo que cuando cruze él umbral de la puerta, sentí una extraña sensación, mas no le tome importancia. Llegué y como todas las noches estaba disfrutando de mis pequeños hijos, escuchando sus pequeñas risas, y viendo el creciente vientre de mi mujer, hasta que de un momento a otro sonó la alarma que indicaba un ataque, no era la primera vez que teníamos uno, pero hace tiempo que no había sucedido uno, yo no quería abandonar a mi familia, así que me quede ahí, pensando que los malditos no fueran iban a meterse, pero estaba muy equivocado, de un momento a otro empezaron a golpear la puerta, por su olor supe que eran rogues, trate de llevar a mi familia hacia una parte donde estuvieran a salvo. - no entiendo porque me cuenta todo esto, estoy muy confundido. - Pero no, los malditos rogues entraron a mi hogar, juro que hice todo para salvar a mi mate y a mis cachorros. - habla, y notó como hace puño sus manos. - Luche contra ellos, saque todas mis fuerzas,  p-pero no pude, no pude defender a mi familia, mi hermosa Sasha aun estando embarazada, pudo herir a uno de ellos, pero no basto, me sentía tan impotente un completo imbécil, vi como le quitaban la vida a mi mate, y a mi cachorro. Observe como les arrancaban su vida . - me estremezco al escuchar eso, es horrible, eso, este señor es muy fuerte, sin duda alguna se gano mi admiración. - Mi esposa estaba embarazada en ese tiempo, esperábamos a nuestro tercer cachorro. - dice, tratando de sonreír, pero falla. - Cuando le arrancaron la cabeza a mi mujer, enfrente de mí, me sentí él hombre mas miserable del mundo, ver como  la cabeza  se encontraba tirada muy lejos de su cuerpo, el cuerpo de mi pequeño sin moverse, ver él terror, él pánico en los hermosos ojos de mi cachorra al ver como se acercaban a ella, gracias a la Diosa Luna, entraron lobos de la manada y acabaron con ellos.

- Con las pocas fuerzas que tenia, camine hacia ella y la tome en mis brazos, tratando de calmar su llanto, yo me encontraba devastado, me negaba a aceptar que había perdido a mi familia. - yo solo lo observó, no se que decir, estoy muy sorprendido,
n-no se que decir. - En ese momento paso algo que me dio esperanzas, mi amada mate, dio su último aliento y pudo salvar a mi cachorro. - sus ojos me observan con ¿cariño?, ¡A!, no lo se esto es muy confuso, porque me cuenta todo esto a mi, yo que tengo que ver en todo esto. - Pasaron un par de meses y mis cachorros y yo pudimos salir adelante, pero eso duró muy poco ya que, una persona que apreciaba mucho, me arrebato a mi cachorro, traiciono mi confianza. - sus ojos se vuelven un poco amarillos, yo solo paso saliva. - Mi maldito primo se llevo a mi cachorro, me alejó de el, me alejo de mi hijo. - de su ojo sale una pequeña lágrima, que la aparta con él dorso de su mano. - Pero después de tanto tiempo por fin lo e encontrado, por fin lo volveré a tener a mi lado. - dice sonriendo, noto la alegría que emanan sus ojos.

Sin que lo pueda evitar, me entra curiosidad al saber quien es su hijo. - Me alegro que ya haya encontrado a su hijo, sin duda alguna ese señor es muy malo. - hablo, Nose como hay personas tan malas, que se empeñan en destruir la felicidad de otras personas. - ¿Y quien es su hijo?. - hablo jugando con mis dedos, tengo hambre. Él alza la mirada y me mira fijamente.

- Aiden, ese hijo, eres tu.

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