Giros del destino

~ 20 ~

- Puedes creer que se enamoro de ella cuando le dio una patada? - pregunto Ga Eul a una divertida Ha Ni

- Deja de burlarte! - reclamo Jan Di - es un buen chico

Las chicas habían pasado cerca de dos horas riendo, la casa usualmente silenciosa de los Yoon fue invadida por las ruidosas mujeres del F4, ya sea por novias o hermanas, eso era algo que no había sucedido, y gracias a Ha Ni, Ji Hoo miraba una divertida escena en la sala de su casa, donde las tres mujeres contaban divertidas anécdotas de su vida en torno a una mesa llena de Soju.

La mañana siguiente las chicas amanecieron con una brutal resaca, los F4 las esperaban en la misma sala donde la noche anterior tanto se habían divertido, ella no fueron a llorar las penas, fueron a echarlas por la ventana, y así fue como resulto, sin penas, pero con un dolor de cabeza espantoso, revuelto con unas hermosas burlas de los cuatro hombres más poderosos que habían dejado el trabajo de lado, solo para reírse de ellas

- Me duele la cabeza - se quejo la menor

- Te hiciste la grande, no pediste mi autorización, mocosa! - reclamo en burla su hermano

- Podrías hablar mas bajo? -pregunto la maestra

- No lo creo... ustedes vinieron a acompañarla y terminaron igual de ebrias? - pregunto Jun Pyo

- Somos mayores de edad, no tenemos que darles explicaciones - se quejo Jan Di

Los muchachos solo podían reír de las caras de sufrimiento de las chicas, finalmente decidieron que esa semana, pasarían el fin de semana en la casa de campo de los So, todos ellos, además de las dos amigas de Ha Ni, ella se fue mucho más animada a casa de los Baek, sabía perfectamente que aun debía hablar con su padre, Ji Hoo la llevo.

En la casa de los Baek, el desayuno era silencioso, todos deseaban saber como estaba la castaña, pero ninguno quería incomodar a Gi Dong, pronto escucharon unas risas, y como la
puerta de la entrada se abría, de ella Ha Ni entraba sonriente del brazo del príncipe blanco.

- No puedo creer que Jun Pyo te llamara a las tres de la mañana solo para saber si Jan Di estaba ahí - comento con una carcajada

- Y eso es poco, antes él la seguía - ella lo miro incrédula

- Y ella no lo notaba - Ji Hoo negó - si lo hubiera notado, lo hubiera matado - comento haciendo reír al castaño

Gi Dong se levanto inmediatamente y se dirigió a su pequeña, la abrazo tomándola por sorpresa, ella estaba ahí, estaba de vuelta, y estaba con una sonrisa en los labios, eso era todo
lo que él quería.

- Hija! - grito mientras la abrazaba tan fuerte que prácticamente perdió el aire de sus pulmones - estas bien?

- Papa, estoy bien - respondió, y hasta ese momento comprendió que su padre estaba tanto o más afectado que ella, y la familia Baek estaría muy confundida, aunque sabía que probablemente, su padre le habría contado todo, o parte de la historia - tranquilo, Ji Hoo me cuido recuerdas, en las buenas y en las malas - comento haciendo sonreír a su padre ante el recuerdo de ambos castaños cada vez que uno de los dos tenía un pequeño accidente

- Joven Yoon -antes de poder inclinarse, Ji Hoo se inclino

- Señor Oh, tiene una hija maravillosa - dijo sonriendo - por favor solo llámeme Ji Hoo, ya no es un empleado de los Song, es simplemente el padre de mi mejor amiga - añadió

- Gracias, por cuidarla, Ji Hoo

Los Baek estaban atentos al intercambio de palabras, una porque querían saber cómo estaba la castaña y dos porque no estaban del todo convencidos de que fuera Yoon Ji Hoo, el nieto del ex - presidente Yoon. Después de dejar a la castaña sana y salva en su casa, Ji Hoo se retiro, sabía que eso era algo que ella debía enfrentar sola, esa, lamentablemente, era una lucha que no le correspondia.

Gi Dong tomo la mano de Ha Ni y la guio al sofá, le dio una cálida sonrisa y le ofreció un té, el debía hablar con ella, pero sabía que los Baek estaban demasiados curiosos.

- Hija - la llamo como disculpándose - les conté la verdad - ella solo le sonrió en respuesta

- Mi pasado no me define - comento mirándolo - ya no me importa que el mundo lo sepa, no fui yo la que huyo - aclaro mirando a los Baek - no me avergüenzo de nada, Gi Dong es mi padre adoptivo, y estoy orgullosa de eso - dijo mientras le daba un abrazo a su padre, el resto de la mañana paso tranquila, entre platicas de su pasado y lo que le había sucedido y momentos de llanto, por parte de la señora Baek, debido a todo lo que Ha Ni sufrió

- Mi niña, si tu... quieres irte de aquí - comento en un momento, dejando a todos helados - si deseas seguir tu camino, ya sea como una Song o solo como Oh Ha Ni, sola - aclaro - no me opondré - susurro con un nudo en la garganta

- Oh Gi Dong - lo llamo ella, solo lo llamo de esa forma el día en que le sugirió que regresara a enfrentar a su verdadero padre - nunca vuelvas a decir eso, si quieres desacerté de mi, deberás echarme de tu lado, en caso contrario, siempre seré una carga molestar para ti - dijo muy seria

- Nunca has sido una carga, eres todo lo que tengo en el mundo - sonrió cálido tomando sus manos

Finalmente los dueños de casa quedaron conformes con su explicación, y el único que quería
disculparse era Seung Jo, pero no sabía cómo hacerlo, por eso estaba esperando a la salida del baño, cuando la puerta se abrió, el se despego inmediatamente de la pared y se le planto enfrente

- Podemos hablar? - pegunto tranquilo, ella lo miro un momento y después suspiro

- Pasa - le dijo mientras se dirigía a su cuarto - que necesitas?

- Hablar contigo, yo... yo... no sabía de tu historia... yo - él no sabía que decir

- Alguna vez te preguntaste que era lo que había pasado yo antes de llegar a esta casa? - pregunto tranquila mirando por su ventana

- No, solo asumí que tu único dolor era el haber perdido a tu madre - susurro

- Te intereso siquiera el llegar a conocerme? - su tono era demasiado pasivo para su gusto

- Varias veces quise hablar contigo, pero no soy bueno con las palabras - se excuso

- Puede que te cueste comunicarte, pero siempre se puede comunicar cariño - susurro ella - eso me dijo Ji Hoo, tampoco era bueno con las palabras, pero siempre estuvo conmigo, hasta cuando nos separaron, nadie sabe lo que te voy a decir, por lo que espero no se lo digas a nadie- pidió a lo que el asintió - un día cuando tenía solo 5 años, alguien intento secuestrarme - el genio palideció - yo estaba en casa de los Gu, Joon Hee estaba ahí, la Gu mayor - explico - pero ella no quería cuidarme por lo que me dejo en el patio de la mansión, un hombre había ingresado burlando toda la seguridad de la casa, cuando el tomo mi brazo yo intente gritar, pero ya me había cubierto la boca, en ese momento Ji Hoo apareció, cuando vio la forma en que ese hombre me había sujetado, él corrió hacia el hombre y le dio una patada, Joo Hee regreso en ese momento y ella termino todo, cuando le pregunte a Ji Hoo que hacia ahí, el solo me dijo "aunque no me llames, siempre sabré cuando estás en problemas, estamos conectados" - comento pensativa - desde ese día, siempre que alguien me lastimaba o intentaba dañarme, esperaba ver su rostro a mi lado, eso cambio cuando te conocí, desde ese momento, al que quería ver defendiéndome, apoyándome eras tú.

- Perdóname - susurro - lamento todo el daño que te cause

- Lo lamento, pero es muy tarde, yo... no puedo perdonarte - dijo antes de caminar a la puerta y abrirla para pedirle que se vaya.

Mientras tanto un abuelo observa la foto de su nieto en compañía de una bella señorita, la cual no era una de las candidatas que él tenía en mente, quizás, debería hacer una pequeña visita de cortesía a los jóvenes, quizás solo era de las tantas señoritas de paso que se acercaban al muchacho.