Giros del destino

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Ha Ni no entendía que estaba pasando, solo supo que después de dejar a su padre a salvo, todo fue un caos, escucho un disparo y en sus manos vio sangre, pero ella no estaba herida, miro a su lado con pánico, pero Ji Hoo también estaba ileso... que sucedía? Todo era irreal pero estaba sucediendo, el conductor estaba... inconsciente? Muerto?, no lo sabía y tampoco tuvo tiempo de averiguarlo, de un momento a otro la puerta se abrió dejando ver a un tipo alto y musculoso con un arma en mano, al mismo tiempo Ji Hoo se abalanzo sobre ella, lamentablemente eso solo provoco que el saliera lastimado, dos disparos fueron dirigidos a él, no supo si realmente resulto herido por ambas balas, ya que ella misma sintió el dolor en su pierna, y entonces noto que era arrastrada fuera del vehículo y obligada a subir a otro automóvil, vio de reojo como toda la familia Baek observando esa situación, solo avanzo, no quería que los lastimaran, a ellos y mucho menos a Ji Hoo, si ella era el blanco que se la llevaran de una vez y dejaran a los demás tranquilos, un golpe en la nuca la hizo perder la conciencia y la sumergió en la más profunda oscuridad.

Cuanto tiempo llevaba en ese lugar? Quizás un par de horas? O tal vez ... Días? No lo sabía, se encontraba en una habitación vacía, solo tenía un baño y un colchón para que pudiera dormir.

Dormir? Claro, cuando ya no podía mantener sus ojos abiertos, daba gracias a los cielos por permitir que Jae Kyung la entrenara un poco cuando se conocieron, gracias a eso, ahora era un poco más sensible a los ruidos, por eso se permitía cerrar los ojos por unos minutos, pero cuando la puerta de esa habitación se abría lo hacían también sus ojos, tal como en ese momento.

- Tu querido padre te esta buscando - comento nuevamente el tipo que la "visitaba" todos los "días" o a cada hora? No lo sabía, no tenía sentido del tiempo en esa habitación iluminada únicamente por luz artificial, le habían dado agua, y habían curado la herida de bala que tenía en su pierna, al menos le tenían algo de consideración o eso pensaba. - nunca podría imaginar que uno de sus socios es en realidad cómplice de esto - susurro una vez que estuvo a su lado

- Mi padre no tiene socios - volvió a responder como cada vez que el tipo le mencionaba que la buscaban - ni siquiera se porque me tienen aquí! - reclamo

- Seguirás insistiendo en que Song Young Soo no es tu padre! - grito molesto el hombre, pero ella ni se inmuto, aunque por dentro temblaba - eres una maldita mentirosa! - grito enfurecido a tiempo que le propinaba una fuerte bofetada que la envió directo al suelo - con eso aprenderás a no mentir - le dijo mientras la veía limpiar la sangre de su labio - pero tranquila, no te dejaremos con ese que no es tu padre, no se siquiera si seguirás con vida cuando no seas útil - dijo con voz burlona a una asustada chica que veía la espalda del tipo mientras salía de la habitación

Las imágenes de esa noche regresaron a su mente cuando estuvo sola, estará bien Ji Hoo? Se pregunto por milésima vez

- Porque no le respondí! - se quejo en un murmullo - debí haberlo abrazado mas - susurro antes de soltar un par de lagrimas

La imagen de Ji Hoo herido estaba grabada en su mente como si reviviera ese momento a cada segundo, estaba asustada por lo que pudiera pasarle a ella, pero estaba temerosa al pensar que no podría ver a su padre otra vez y sobre todo le aterraba la idea de no poder decirle a Ji Hoo lo que esa noche no había podido decirle, responderle a lo que él le había confesado, le aterraba la idea de que no se enterara jamás que los sentimientos de él si eran correspondidos.

Tres días y aun no sabían nada de ella, Ji Hoo... el aun luchaba por su vida, después de la cirugía una hemorragia interna los obligo a intervenir nuevamente al heredero Yoon, había perdido demasiada sangre lo que provoco que entrara en shock provocando un segundo paro cardiaco, logro superarlo por poco. Ahora se encontraba estable, pero aun con gran riego.

- Alguna novedad? - interrogo Ga Eul a Jun Pyo cuando regreso de la cafetería con los cafés para todos.

- Nada, de ninguno - contesto con voz apagada mientras le recibía el café que le entregaba

- Creo que Woo Bin debe saberlo - comento al rizado

- Por increíble que parezca... estoy de acuerdo - murmuro él en respuesta - pero su padre lo quiere fuera de esto

- Qué pasa si se entera de alguna forma? - cuestiono Jan Di - en nunca nos perdonaría el no decírselo - añadió

- Estoy de acuerdo con ellas - dijo Yi Jeong y saco su celular - avisare al tío Song y luego lo llamare - anuncio

- Como pueden avisar luego de tres días! - grito molesto al otro lado de la línea el príncipe Song - saben todo el tiempo que hemos perdido! - reclamo

- No queríamos que te alteraras - se excusaron - además tu padre ya esta en el proceso de búsqueda

- No! Debieron avisarme de inmediato - Volvió a reclamar - saben que... ustedes se dicen mis mejores amigos, pero me ocultan las cosas importantes - los muchachos se miraron, su amigo estaba muy molesto, pero lo entendían, era una situación límite para su hermana - debo colgar

- Esperaremos pro ti en el aeropuerto - anuncio Jun Pyo

- No es necesario - discrepo

- Lo es y no hay discusión - afirmo el Gu antes de colgar

- Lo sabía, no debimos viajar - se recrimino el Song

- Tranquilízate - susurro su esposa sentada a su lado en el gran y cómodo sofá en su habitación - ya verás que nada le sucederá

- No estoy tan seguro - murmuro - nunca recibió entrenamiento, es una Song, pero no esta preparada para estas situaciones

- Ten fe en ella, todo saldrá bien, iremos a Corea y patearemos algunos traseros - le anuncio

Esa misma tarde pisaba el suelo de su amado país, en el hangar dos de sus mejores amigos lo esperaban, el tercero se encontraba en el hospital, ya empezaba a reaccionar pero estaba muy lejos de despertar y ser el mismo caballero blanco que todos conocían.

Mientras ellos recibían a su querido y furioso amigo, en un lugar no muy lejos de ahí un hombre ingresaba a la habitación donde se encontraba la castaña, pero sus intenciones no eran solo asustarla, él quería disfrutar de la juventud e inexperiencia de esa joven y linda castaña, si de todas maneras se desharían de ella, porque no disfrutar de su cuerpo antes de eliminarla del camino?

- Suéltame! - grito la castaña cuando ese tipo la tomo de las muñecas

- Eres demasiado hermosa como para no disfrutar de ti antes de borrar tu rastro - le susurro al oído, eso solo logro que el asco nublara todos los sentidos de la castaña, ella solo forcejeaba mientras ese sujeto intentaba desnudarla a la fuerza.