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Ji Hoo se separo lentamente de ella; Ha Ni no podía creer lo que estaba sucediendo, hace solo unos minutos su primer amor le estaba rogando por una oportunidad y ella se la negó, pensando que el amor no era para ella, hasta hace solo unos meses, para ella el amor era sinónimo de dolor, de lagrimas y sufrimiento, cuando se reencontró con el F4, el amor tubo un nuevo significado, el amor entre sus amigos era diferente era un nuevo recuerdo y un nuevo significado de ese sentimiento, pero para ella el amor unilateral que sufrió con Seung Jo  la había marcado para relacionar el amor con sufrimiento, se había hecho a la idea de que no podría tener un buen recuerdo de ese sentimiento; pero ahora, en ese instante, frente a ella había un gran hombre, uno que siempre la había respetado, cuidado y defendido, además siempre la había hecho sentir importante, valorada, querida; eso era lo que la confundía, no sabía que decir, estaba aturdida, sabía que sentía algo por él, pero en esta situación no era mucho lo que podía decir, estaba sobrecogida por la situación, la pelea con Seung Jo la había agotado y no esperaba esta situación en ese momento.

-  Ji Hoo, yo… - estaba sin palabras

- No quiero que respondas a mi confesión – le dedico una sonrisa tranquilizadora, aun cuando por dentro era un caos, por una parte estaba feliz de no haber sido rechazado de inmediato, ella había aceptado su beso, no lo aparto era una esperanza para él -  solo quería decirte lo que siento, se que aun no estás lista, es demasiado pronto para que aceptes los sentimientos de alguien más, estas demasiado herida y lo entiendo – dijo mientras se giraba para mirar la noche, sabía que si seguía mirándola no se resistiría para darle otro beso

-  Lamento no poder responderte ahora – susurro ella, sus mejillas sonrojadas  le dieron a Ji Hoo la respuesta que el necesitaba, si ella no sintiera nada por el, ella no estuviera de ese modo, simplemente lo hubiera rechazado y ya, pero ella no estaba lista, eso era todo.

- No quiero presionarte, solo quiero que sepas que estaré a tu lado, como un amigo, hasta que te decidas a aceptar mis sentimientos, solo quiero verte y hacerte feliz. – volvió a verla y deposito un cálido beso en su frente -  vamos adentro, el tío Song quería hablar algo con nosotros – se tenso ante eso

-  No tengo nada que hablar con ese hombre. – dijo apartándose bruscamente de el

-  Ha Ni, estábamos juntos cuando te enteraste de la verdad, no has pensado en ello? – ella palideció al recordar ese momento – se que no es algo en lo que deba entrometerme, pero ya es momento de que empieces a sanar tus heridas, de lo contrario jamás podrás ser feliz, no quiero que te llenes de odio

-  No es odio – susurro después de unos minutos de silencio

- Entonces?

- Es miedo – confeso – tengo miedo a ser alejada de ustedes nuevamente, tengo miedo a dejarlo entrar en mi vida y que vuelva a destrozar todo lo que he construido estos años, lo que estoy reparando ahora que los tengo a mi lado, tengo miedo de que mi padre piense que quiero separarme de él, miedo de que si vuelvo a relacionarme con Song Young Soo termine aun mas herida que cuando era una niña y sé que esta vez no podría salir adelante – murmuro al borde de las lagrimas

- Nada de eso pasara – la tranquilizo Ji Hoo -  recuerdas cuando él te busco en casa de los Baek? – ella asintió – dije que no volvería a arrebatarme a una de las mujeres más importantes en mi vida y lo creas o no, eres la más importante en mi vida – la abrazo fuertemente – yo te protegeré – le susurro al oído

Ese era el final, no había nada que él pudiera hacer, el debía dejarla ser feliz, el solo la había lastimado, no tenía derecho a volver a pararse frente a ella, a ese tipo se le notaba en la cara lo mucho que la quería, si el hubiera sido sincero desde el principio, quizás en este momento ella estaría sonriendo entre sus brazos y no en los de el, pero al Gran genio Baek Seung Jo le gano el orgullo y solo por no dejarse vencer por su madre, perdió al amor de su vida. Desde ese momento el se apartaría de ella y no volvería a molestarla nunca, solo la dejaría ser feliz y el trataría de buscar algo con lo que sobrevivir, algo que lo ayudara a olvidar que en un momento tuvo al amor de su vida a sus pies y que por idiota y orgulloso lo perdió. Se dió la vuelta dejando atrás la imagen del amor de su vida en brazos de otro hombre, entro con el rostro serio sin demostrar que el dolor lo consumía por dentro

-   Ji Hoo, nos puedes dejar a solas? – interrogo Song Young Soo, la castaña había accedido a hablar con él, pero con la única condición de que Ji Hoo no la dejara sola, por eso ahora estaban en un salón solo ellos tres.

-  Lo siento señor Song, pero no se puede – comunico sin dejar de abrazar a Ha Ni, quien temblaba, estaba demasiado asustada y de seguro no escucharía ni la mitad de lo su padre biológico le dijera, ella no quería escuchar, tenía miedo de volver a sufrir el abandono de alguien más, no estaba lista para volver a sufrir de esa manera, un suspiro la saco de sus pensamientos

- Esta bien, no insistiré – dijo resignado – Ha Ni, quiero contarte lo que paso hace doce años con…- ella lo interrumpió

-  Lo sé – el Song abrió sus ojos sorprendidos

- Woo Bin te lo dijo? – estaba atónito, ella lo sabía?, desde cuando lo sabía?

- No, estaba en casa de Woo Bin cuando usted llego y hablo con él. El día que él decidió casarse con Jae Kyung, el día que usted le conto la verdad de la muerte de mamá

-  Hija…

- No me llame así por favor – pidió ella casi con dolor

- Sé que no merezco pedirte una oportunidad, Gi Dong, el me conto lo que has sufrido estos años, se que es todo mi culpa, sé que no merezco tu perdón, pero también sé que heredaste el corazón de tu madre, una persona pura, amable, cariñosa, sencilla y caritativa; por eso espero que en la inmensa bondad que posees puedas perdóname algún día.

- No sé si tengo esas características señor Song, pero juro que estoy intentando recordar todos los buenos momentos que pase a su lado -  comento con lagrimas corriendo por sus mejillas.

-  Ha Ni, tengo algo más que decirte, Woo Bin y Jae Kyung, ya se fueron de luna de miel, quiero que tu vayas a mi casa hasta que Woo Bin regrese – soltó de golpe y ella se alarmo

-  No puedo, no puede separarme de mi padre – se había puesto a la defensiva

- Ha Ni, escúchame no es lo que intento hacer, solo quiero protegerte – intento hacerla entrar en razón, no podía asustarla diciéndole la verdad eso solo le destrozaría los nervios.

- No, puedo cuidarme sola, lo he hecho por años, no es algo de lo que deba preocuparse ahora – dijo antes de levantarse y salir del salón en el que estaban

-  Ji Hoo, necesito que  me ayudes.

-  Lo intentare pero no puedo obligarla – dijo antes de dar una reverencia y salir tras ella

   

Giros del destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora