Mi Próxima Misión |2° TEMPORADA|

Llegada de traición

Canción: Winona Oak & Robin Schulz —Oxygen

|Todo se dispara.
Lidiando con una mente dañada.
Algo sobre la punta de tus dedos me calman|

[CAPITULO 39]

(Jeremy)

— ¿Estas segura que no quieres que mande un equipo de seguridad contigo a Francia?

—Tranquilo, voy a estar bien —subí las pesadas maletas a la cajuela del auto y luego cerré este con fuerza—. No necesito más seguridad cuando habrá un montón de guardias cuidando el lugar.

—Bien, si necesitas cualquier cosa no dudes en llamarme, ¿de acuerdo? —Amber asintió con una sonrisa y nos despedimos con un corto abrazo y un beso en la mejilla.

Vi su moderno auto alejarse con rapidez entre las calles hasta perderlo por completo de mi campo visual.

La relación entre Amber y yo parecía intacta, incluso mejoro un poco más, luego del inconveniente en la boda y de mi repentina decisión de cancelar absolutamente todo, ella y yo habíamos quedado de ser únicamente buenos amigos, y en verdad que lo disfrutaba mucho más y ella parecía hacerlo de la misma manera.

Estaba infinitamente agradecido que a pesar de todo ella se tomara tan bien las cosas y no perjudicara nuestra relación. Ella sin duda era una mujer sumamente especial a la que me había prometido cuidar por el resto de mi vida, pues un corazón tan noble perteneciente a una excepcional mujer merecía lo mejor de este mundo.

—He escuchado que ya tiene un comprador para adquirir su preciada mansión —se acercó hasta mi el señor Writhe luego de ordenar a un par de sus hombres de que siguieran a Amber para asesorarse de que llegara sana y salva hasta el aeropuerto.

—En efecto, el papeleo ya está hecho y el monto monetario ya ha sido depositado a mi cuenta, solo falta arreglarle un par de cosas para poder entregarla intacta —mire con algo de nostalgia la inmensa morada que me había aguardado durante extensos años—. Ya estoy listo para hacer nuevos recuerdos en mi nueva casa.

—Me alegra mucho verlo tan optimista y... —su celular comenzó a sonar y lo saco de su bolsillo mirando extrañado el número que venía marcado en la pantalla—. Diga...sí, soy yo, ¿qué sucede? —un extenso silencio se creó donde solo pude escuchar tenuemente la voz de una persona al otro lado de la línea hablarle sin cansancio al señor Writhe. Este pareció molesto un momento y luego preocupado, peino su canosa cabellera oscura y luego sobo con insistencia su ceño—. ¿Él está bien?...De acuerdo, iré para haya lo antes posible...No, no me encargare del papeleo después...Bien, gracias.

— ¿Paso algo?

—Paso bastante —colgó el teléfono y comenzó a caminar hacia su auto—. Parece que su chica se está volviendo un vivo reflejo de Clark —fruncí el ceño sin entender, pero él solo se limitó a cederme el paso para entrar a su auto antes que él—. Nathen regreso herido de la misión.

— ¿Eso quiere decir que Aly ya volvió también?

—Así parece...lo llevare de vuelta a su hotel y...

—No, quiero que me lleve con ella, por favor, usted prometió que lo haría en cuanto ella llegara.

—Me disculpo por no cumplir con mi palabra esta vez pero no considero muy oportuno el que usted vaya con ella, tengo a un hombre herido que será llevado inmediatamente al hospital, solo iré a recoger unos papeles a la base y me iré con Nathen.