Mi Próxima Misión |2° TEMPORADA|

Atrapada en la boca del lobo

Canción: Nathan Wagner — Don't forget me
|Recuerda;
Que la vida siempre mejora.
Llora por mi, pero prométeme, cariño
Seguirás siendo fuerte.|

[CAPITULO 46]

Ambos estábamos de lados opuestos a la entrada que nos daría acceso a "La bodega 0"; un par de pasos pesados se escucharon del otro lado seguido de voces masculinas hablando ruidosamente en ruso, probablemente dando instrucciones de ataque en caso de que tengan que hacerlo.

Mi corazón latía desenfrenado y los nervios comenzaron a invadir todo mi cuerpo, tome con más fuerza el arma dándome un poco de valor. En cuanto esos tipos cruzaran la puerta, inevitablemente Mark y yo teníamos que darles una fuerte riña para evitar ser perseguidos por ellos.

La seguridad de la puerta comenzó a ser desactivada y ésta poco a poco empezó a abrirse, revelando a tres enormes tipos con aquellos pesados uniformes en tonos negro, rojo y plateado, haciéndolos parecer más imponentes e intimidantes.

Antes de que la puerta se cerrara logre trabarla con algo captando la total atención de los tres hombres, quienes de inmediato sacaron sus armas apuntando hacia mí, ignorando por completo a Mark que los distrajo con una bomba de humo que hizo soltar balazos al aire.

Guarde el arma en mi estuche y saque una pequeña cuerda para asfixiar a uno de los hombres. Di un golpe duro debajo de su mandíbula sintiendo la dureza de sus músculos; tome como impulso una de sus piernas y de un movimiento me trepe en sus hombros, enredando la cuerda alrededor de su cuello e intentando cortarle la respiración. Sus enormes manos hacían un intento inútil de quitarse la cuerda del cuello y de quitarme encima suyo.

Tire mi peso hacia atrás haciendo que el pesado hombre perdiera el equilibrio, y de otro movimiento hábil lo tumbe al suelo para ir con mi siguiente contrincante, quien me recibió con un fuerte puñetazo en el rostro que me hizo sentir calor en la zona afectada. Intente patearlo pero este tomo mi pierna y me tumbo directo al suelo con un golpe seco, sacó su arma listo para dispararme, pero logre evitar la bala rodando sobre mi propio cuerpo.

Me puse de pie notando como Mark aun intentaba derrumbar a su contrincante, y como este se negaba a ser una presa fácil. Necesitábamos quitárnoslos de encima para seguir con el plan, o si no terminaríamos con más oponentes y la tarea se volvería imposible.

No tuve otra opción y saque mi arma comenzando a soltar disparos que daban a la nada cuando mi oponente se escondió, Mark tomo ventaja de mi distracción y le disparó a su oponente dos veces dejándolo en el suelo.

Quite la pieza con la que había trabado la puerta y ambos ingresamos en este.

No era un lugar muy colorido, eran extensos pasillos de paredes metálicas, iluminadas por luces blancas. Ahora el plan era saber hacia dónde ir, pues una vez aquí adentro, no teníamos muchas opciones para ocultarnos, por lo que debíamos actuar deprisa.

— ¿Recuerdas algo del plano? —pregunté a Mark esperanzada, para evitar tener que sacar los planos.

—No tengo buena memoria fotográfica, pero recuerdo donde quedaba un lugar llamado "Asilo", probablemente ahí este tu hombre.

—Bien, entonces guíame.

—Sera mejor que cargues tu arma.

Hice lo que Mark me pidió, cargando y tomando en todo momento el arma con el dedo listo en el gatillo.

Ambos caminamos sigilosos pero veloces, cubriéndonos nuestras espaldas y manteniendo todos nuestros sentidos totalmente en alerta. Era un lugar silencioso, por lo que cualquier mínimo ruido haría eco en todas las paredes.