¿Que pasaría si un día despiertas y tienes poderes?
Acompaña a Thea, una chica con una vida normal, o eso creía ella, hasta que empezaron los sueños extraños. Una vez comenzaron las pesadillas, su vida se desmoronó.
...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Me di una ducha y me vestí con una sudadera granate, unas mayas y unas deportivas. Le puse a Selva sus collares y me dirigí hacia el jardín.
-¿A dónde vas?- "Mierda, Zed."
-A dar una vuelta con Selva.
-Voy contigo.
-No hace falta.
-La última vez que te fuiste sola me tocó coger un vuelo a Egipto. ¿Eres consciente de la cantidad de dinero que cuesta un maldito billete de avión?
-¿Eres consciente de que en parte fue culpa tuya?
Desde que llegamos a casa, Zed no me ha perdido de vista ni un segundo. Entiendo que se sienta culpable por lo que pasó, pero siento como si fuera el guardia que tenía dentro de la pirámide.
Salimos de la casa y nos adentramos en el bosque, no decimos ni una palabra. Aprovechamos cada momento que tenemos libre para venir a buscar el lago, así que hemos cogido la costumbre de observar hasta la piedra más pequeña del suelo. Mientras Zed mira alrededor sin saber que buscar, yo lo único que busco son las marcas que dejé en los árboles. Si ayer estaba mojada después de meterme "mentalmente" o cómo coño sea en el lago, significa que las marcas pueden estar por aquí en algún sitio, sólo hay que encontrarlas.
Este bosque es inmenso, de pequeña solía ir a uno que estaba cerca de mi ciudad natal junto a mi padre. Nos dedicábamos a hacer dibujos de los paisajes, al final del día nos los enseñábamos entre nosotros a ver cuál estaba mejor hecho. Claramente yo siempre ganaba pero no porque los míos fuesen mejores, sino porque mi padre siempre decía que lo eran.
-Thea.- Zed, que iba por delante de mí, se para en seco haciendo que me choque con su espalda.- Mira estas marcas.
Salgo de detrás de él y me acerco al árbol que segundos antes me estaba señalando. En el tronco se puede ver una quemadura con forma de mano. Sin duda son las marcas que dejé ayer.
-Son las marcas que dejé anoche.- Digo mientras toco la madera.
-¿Cómo?
-Ayer por la noche intenté contactar con mi padre al igual que lo hice con Adam y contigo con anterioridad, pero en vez de contactar con mi padre, llegué al lago. Marqué todos los árboles que pude creando un camino hasta el lago. Si mal no recuerdo marqué como unos treinta árboles más o menos.
-Por eso estabas mojada, te metiste en el lago, aunque sigo sin entender porque narices decidiste nadar en agua helada y en plena noche.
-Selva nadó y lo seguí.
-Sin comentarios...
Empiezo a buscar la segunda marca con la mirada y hago lo mismo con las demás hasta llegar al tan ansiado lago. "Por fin". Sin duda es el mismo pero parece distinto al ser de día y no tener la luna reflejada justo en el medio. Es como un oasis en medio del desierto. Simplemente precioso.
