Cap.25 - Pulgas

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Unos gritos ensordecedores me despiertan. No son gritos que escuche salir a partir de las cuerdas vocales de una persona, sino de las mentes. Me incorporo y miro la hora en mi reloj. Se ha hecho de noche, llevo toda la tarde durmiendo en el sofá del salón. No dejo de escuchar los gritos en las cabezas de Thea, Zed y Gabriel, pero no logro escuchar ni lo más mínimo los de Adam y Eleanor.

"Thea"

<<En el momento en el que más lo necesito... yo solo quería volver a la normalidad. Pero cuando desaparece es cuando más lo necesito. Soy una inútil.>>

"Zed"

<<Que coño hago ahora. No puedo verlos así. Ele... te juro que el cabrón que te ha separado de nosotros va a sufrir.>>

Gab, sin embargo, no está pensando en nada, solo grita. Gritos, gritos y más gritos. Hace unos diez segundos que desperté y ya sé todo lo que ha pasado, es abrumador. Las personas son totalmente diferentes a cómo realmente son por dentro. Hay muy pocas personas que digan todo lo que piensan, y, claramente, casi ninguna piensa en si misma de una forma positiva, a no ser que seas el ser más narcisista del mundo. Dolor, tristeza y cansancio es lo único que se puede llegar a ver reflejado en sus mentes, mientras que una sonrisa sobresale de sus rostros. Yo sigo la teoría que dice que el psicólogo y el psiquiatra son los primeros en volverse locos... porqué será...

Son las personas más parecidas a mí, son capaces de adentrarse en las mentes de las personas de la forma más retorcida que te puedas imaginar. Leen y estudian varios libros de psicología y gracias a ello son capaces de conocer a una persona. Los seres humanos somos simples, pero seguimos creyendo que nuestros problemas personales son los peores que nadie ha vivido jamás. "Cariño, déjame decirte que en este mundo hay millones de personas, y tú, solo eres una pulga insignificante más." Cada día escucho cómo todas las personas que me rodean sufren en silencio sus problemas, pero... "¿cómo me afecta eso a mí?", imagínatelo. Una persona con depresión no deja de decirse a sí misma lo malo que es todo a su alrededor, pero en realidad creo que todas las personas sufren depresión hasta cierto punto. Nadie se cree el mejor, y todo el mundo nace sabiendo que su vida va a terminar dentro de unos años que se pueden convertir fácilmente en horas. Nacemos y trabajamos con el fin de no morir antes de tiempo, la economía solamente sirve para creernos la mentira de que con dinero viviremos mejor. El dinero sólo es una supervivencia, porque sin él, tu fatídico destino llegará antes. Así que sí, todas las personas tienen una máscara que deja ver lo felices que están con sus familiares, con su trabajo, con sus amigos... sin pensar en que todo esto sólo es una pantomima que necesitan para que la muerte no llame a sus puertas. Yo, sigo aquí, escuchando todos y cada uno de los pensamientos de las pulgas insignificantes llamadas humanos que hay a mi alrededor, aceptando lo que somos en realidad y volviéndome, "¿sabia, inteligente, culta?", mejor dicho loca.

Denki (Electricidad)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora