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Piper:

Después de un tiempo te acostumbras al dolor de tu cuerpo después del sexo, pero nunca nadie te dice cuando, ni cómo, ni con quien el sexo rompe barreras que producen otro tipo de dolor.

No podría decir con exactitud cuánto tiempo llevaba mirando a Alex pero ya se había recuperado de su último orgasmo. Totalmente desnuda, sentada en mis piernas mientras yo sentía arder entre su cuerpo y la pared en la que estaba recostada.

Podía comparar la sensación de estar con ella con la de estar en un parque de diversiones. Entrar a todas esas atracciones, sentir el cuerpo de una manera diferente, sentirse morir, girar, ir de un lado a otro, subir, bajar, el vértigo y después de eso estando ya en el piso una vez todo se detuvo, sentir que aún todo da vueltas... todas las sensaciones están hay mezcladas y seguramente habrán residuos de estas en los sueños.

Así era estar con Alex.

Así era cuando consumía drogas.

Así era ser adicta.

Sus ojos se paseaban entre mis ojos y mis labios. -Tienes que irte.

Ella se quedó mirándome unos segundos más. -No pensaba quedarme.

-No quiero que suene grosero.

La escuche reír burlonamente de lo que había dicho mientras alejaba su cuerpo del mío y buscaba su ropa. -No lo es.

-Al...

-No me llames Al.

-Solo lo digo porque no quiero que pregunten dónde estás... Al...

Ella detuvo su búsqueda solo para girarse a mi y enfatizar en lo que iba a decir. -Hubieras pensado en eso hace unas dos horas y media ¿no?... tienes que ensayar tus excusas.

No tenía como discutirle, aún sabiendo que había perdido el sentido del tiempo, que en lo absoluto no me interesaba que pensaran las demás y que en lo único que estaba en mi cabeza antes de haberla visto a los ojos era en la forma en que su cuerpo y el mío no encajaban en lo absoluto pero estábamos empeñadas, enloquecidas en que así fuera y por mi estaba bien porque me encantaba así yo no estuviera destinada para ella.

Trataba de no mirarla pero su cuerpo paseándose en el reducido espacio que eran los cuartos de este puto lugar, me hacía perder el control. Tomé su brazo con fuerza deteniéndola y haciéndola acercarse a mi una vez más. Ella casi se rehúsa por lo que tuve que actuar rápido y tomarla de la cintura.

-No voy a ser un dulce que solo chupas cuando estás aburrida.

-Si lo serás... pero no solo cuando esté aburrida... más bien cuando yo quiera.- la tomé de la cara con fuerza y la acerqué a mi besándola con fuerza.

-Diablos Piper me estás lastimando.

-No sabía que te ponías sensible después de tan solo dos horas de sexo.- traté de besarla de nuevo pero ella se alejó bruscamente.

-En serio estás muy mal Piper.- tomó una de las sabanas y salió sin esperar respuesta.

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Me desperté sintiendo aún la droga en las yemas de mis dedos. Si no me moría de sobredosis seguro me mataba el bajón de las horas siguientes.

¿Cómo mierda había llegado a mi casa? Tomé mi celular y en realidad no había pasado tanto tiempo, solo el suficiente como para que Paris enloqueciera por no verme trabajando.

Intenté disipar el efecto de la luz en mis ojos llevando mis manos a mi cara y justo en ese momento recordé a Alex... todo de ella, hasta su olor estaba impregnado en mi.

-Hey Chapman.- Volví a la realidad después de haber pasado toda la mañana en la ducha tratando de sacarme los restos de la noche anterior y vi a una muy enojada Nicky en frente de mi.

-¿Qué quieres?- seguí mi camino porque ya empezaba a sentir el dolor en mi piel. Una línea Piper.

-Saber donde está Alex.

-¿y por qué yo debería saberlo?- me detuve cerrando los ojos antes de que la migraña me matara y Nicky aprovechó para tomarme del brazo con fuerza.

-Porque no soy estupida y se lo que hicieron ayer.- abrí los ojos para mirarla, no esperaba que nadie se diera cuenta pero tampoco que supieran con exactitud lo que había pasado. -escúchame bien rubia, no te atrevas a arruinarla... no te atrevas a llevarla a tu mundo de mierda y drenarle todo lo buena que es. Tú no la mereces. No mereces a nadie.

-Si puede ser cierto. Pero ¿no has pensado tal vez que ella está no se con su novia recompensándola por lo de ayer?

-¿Cómo sabes que tiene novia?

No lo sabia. -Intuición.

Nicky me miró sospechosa -... Da igual solo has que aparezca o Paris sabrá de esto...

Pase saliva con dificultad cuando entre al cuarto, todo estaba justo como lo habíamos dejado ayer.

Mierda.

El teléfono sonaba pero nadie contestaba del otro lado de la línea. Toque el borde de la cama por debajo hasta encontrar una bolsita.

Segunda llamada. Empecé a separar el polvo en líneas. Solo una línea, lo juro.

Piper: Contesta Alex.

Primera línea. El teléfono timbraba por tercera vez.

Piper: Pensé que eras una persona madura ¿acaso no eres prepago? Te pago porque aparezcas.

Segunda línea.

Alex: No se de que me hablas.

Tercera línea y cuarta llamada. Ya no podía seguir concentrándome en Alex.

-¿Qué quieres Piper?

-¿Donde mierdas estás?

-¿De cuando acá te doy explicaciones?

-Mierda Al...- aspiré la cuarta línea esperando realmente que dejara de afectarme lo que estaba pasando. -¿Puedes dejar de pensar solo en ti por un segundo?

-Lo dice la que se droga mientras me está hablando.

-Esto no es por mi idiota es por ti. Nicky te busca.

-¿Y?

Ella de verdad sabia como destrozarme los nervios.

-Qué si no apareces le contará a Paris.

-¿Y?

Y ahí me quebré -Dios Alex... no me hundas de esta manera.

-Tú te estás ahogando en un vaso de agua, no fue la gran cosa y no creo que Paris se moleste sólo porque dos de sus chicas tuvieron un pequeño desliz.

Un pequeño desliz, eso es lo que eres Piper.

-Solo aparece...- me limpie la nariz. -Si fue un pequeño desliz para ti, entonces que nadie más lo sepa.

Terminé la llamada y lancé el celular a la mierda mientras sin controlar mis acciones mis uñas se clavaban en la piel de mis mejillas.

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¿Aún tengo lectores? Jajajaja

Piper Prepago Donde viven las historias. Descúbrelo ahora