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Alex:

-Tengo que irme- me levanté sin mirar a la mujer que estaba al lado mío.

-Alex... no quiero que te sientas atada a una relación que no deseas y por lo que veo no deseas.

-¿Qué dices Alice?

-Lo digo porque no me has mirado a los ojos en todo este tiempo... ni siquiera te digo nada por desaparecer, sabes que eso a mi no me molesta. Pero lo que si es que tú me trates como si fuéramos unas desconocidas y esa etapa ya la pasamos hace mucho...

Mientras me vestía y ella hablaba yo no podía dejar de pensar en la desesperación de Piper hace unos minutos. No me podía concentrar en nada, simplemente mi mente no podía procesar ni siquiera el simple hecho de que tenía que arreglar la situación con Alice, luego salir a trabajar y aclarar las cosas con Piper.

-... y se que ni siquiera me estás escuchando en estos momentos- Alice no era agresiva ni posesiva así que solo la vi levantarse de la cama y me sentenció con su silencio.

-Ali... escucha pasare esta noche por ti a tu casa y hablaremos ¿de acuerdo?

-Si como quieras.

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Subiendo las escaleras alcancé a escuchar la voz de Nicky hablando con otra chica en su cuarto.

-Me importa una mierda, solo contrólala... sabes que no podemos dejar que le pase algo malo.

Decidí ignorarlo y caminé hasta el cuarto de Piper. Solo esperaba no tener mas dramas y poder seguir con mi día normal.

La vi acostada boca arriba con sus audífonos puestos, me acerqué a su campo de visión para que pudiéramos hablar y en seguida me di cuenta que tenía heridas en la cara. Todo el orgullo, el mal humor, el cansancio que traía se fueron a la mierda.

-Pipes...- Le quite el audífono y puse mis dedos en sus heridas para comprobar que tan profundas eran.

-No me toques.- se sentó rápidamente aún sin mirarme.

-Estás lastimada. Solo quería...

-Ja. Que ilógica. ¿Qué te importa a ti si estoy lastimada o no?

Me quedé mirándola mientras me sentaba en frente de ella.

-Si me importa Pipes.

Después de eso se arriesgó a mirarme.   -Lo mismo le dirás a tu novia

Diablos Nicky.

-Realmente me importas una mierda Alex, si para ti fue un desliz lo qué pasó ayer pues bien... sal de mi cuarto.

-Pipes.

-Véte. Ahora.

Salí del cuarto sintiendo un vacío en el estómago y en ese momento me di cuenta como eran las cosas con Piper. Siempre mal entenderíamos todo.

Ese día en la noche estábamos todas reunidas escuchando a Paris quien nos daba una charla sobre las ETS y como prevenirlas. Cuando de la nada llegó otra señora que se recostó en la puerta detrás de la jefe mirándola con atención. Todas desviamos la atención hacia ella cosa que no pasó desapercibida por Paris.

Cuando se vieron se miraron con complicidad, se abrazaron y me pude dar cuenta que algo se dijeron al oído.

Minutos más tarde terminamos la charla. Mi atención se centró en Piper quien subió corriendo las escaleras, no podía simplemente ignorarla porque se había convertido en una tarea difícil pero debía aprender a no darle tanta importancia.

-Alex ¿puedes venir un momento?

Caminé a la oficina de la jefa. La señora que había llegado a interrumpir la charla estaba sentada fumando y revisando su celular.

-Tengo un trabajo para ti- miré a Paris con atención - Kathe cuéntale...

La señora se levantó y se acercó a mi mirándome con atención. -Escucha quiero hacer un trío...

-Qué sorpresa- respondí sarcástica. Ella rio y continuó hablando.

-De chicas.- sonreí disimuladamente porque la idea me agradaba -Y tú eres una de las elegidas.

-¿Y quien es la otra?

-Para eso te llamamos. Porque necesitamos hablarlo contigo...

-¿Desde cuando podemos escoger con quien acostarnos?- mire a Paris.

Ella no respondió pero entendí que estaba enojada por la forma en que movió los labios.

-¿Entonces tienes alguien en mente?

-No en realidad...no tengo ese tipo de química con las chicas de acá.

-Me parece que no me entiendes Alex... quiero un trío con chicas que en realidad si... ya sabes... sientan atracción por otras chicas.

-La mayoría de chicas están dispuestas a todo así que solo elijan una y déjenme saber.- abrí la puerta para salir y antes de marcharme escuché a Paris decir lo último.

-El trío es en dos horas.- me detuve en seco, miré el reloj y me di cuenta que sería muy tarde para hablar con Alice. Lo pensé unos segundos y al final solo terminé cediendo. Luego arreglaría las cosas con ella.

Me estaba terminando de arreglar cuando entro Paris a mi cuarto -En cinco minutos te espera Kathe en el cuarto de conferencias.

-¿Ya eligió la otra chica?

-La tuve que elegir yo.- cerró la puerta de golpe sin decirme más.

Baje entrando a aquel cuarto que me causaba curiosidad desde hace mucho, cuando entre Paris dijo que era para trabajos muy especiales y otros trabajos que no eran propiamente de relaciones sexuales directas. Nunca supe de que iba hasta que entré.

El cuarto era enorme, tenía luces muy tenues y en el centro una cama realmente inmensa con sábanas negras de seda. Me di cuenta que en un rincón habían unas cámaras y unos computadores, obviamente estaban apagados. Y al otro lado estaba Kathe en ropa interior sentada en una silla de cuero rojo.

-Quítate el vestido y los zapatos. Luego solo siéntate en el borde de la cama mirando hacia la puerta.

Obedecí

Estaba mirando impaciente para saber quién entraría mientras acomodaba mi cabello de forma tal que no cubriera mi pecho.

La puerta se abrió.

-Piper...

Piper Prepago Donde viven las historias. Descúbrelo ahora