Podemos arreglarlo

46 8 1
                                    

Cuando se separaron Alba volteó la mirada. Eso estaba mal, no podía pensar en Edahí de esa manera.

-Lo siento- dijo Edahí apenado, como si leyera los pensamientos de Alba.

-Yo no...- comenzó a decir Alba, pero no supo cómo continuar.

-Es difícil luchar contra lo que uno siente ¿no?- dijo Edahí mirándola fijamente. Una sonrisa de lado se instaló en su boca, la cual hacía que su hoyuelo se marcara. –Sé que no está bien Alba, pero ya no podía negar lo que estaba sintiendo.

-Edahí, no podemos arriesgarnos más de lo que lo hacemos. No controlo bien mis poderes, y al sentir mucho tiendo a perder el control. No quiero lastimar a nadie.

-Te ayudaré a controlarlos Alba, por favor, creo que esto que sentimos no es una debilidad, no hace más fuertes.

-Yo no...- dijo suspirando- no lo sé.

Edahí asintió, sabía que no era buen momento. Pero se iba a volver loco si seguía ocultando lo que sentía por Alba. Y al abrazarla fue como si su muro se viniera abajo, necesitaba tenerla cerca. Alba lo miró a los ojos por unos minutos, Edahí no pudo separar su mirada de la de ella. Estaban muy cerca otra vez. Sus labios estaban a centímetros de distancia.

-Esto está mal- susurró Alba.

-Encontraremos la manera de arreglarlo- dijo Edahí sonriendo. Alba no tuvo tiempo de reaccionar porque los labios de Edahí estaban sobre los de ella otra vez. Más demandantes que antes, más intensos. Alba se hizo para atrás hasta que su espalda pegó con la pared. Rodeó el cuello de Edahí para profundizar el beso. Sentía mil cosas en su interior, nunca se había sentido de esa manera.

Las manos de Edahí estaban sobre su cintura y la apretaban fuerte hacia la pared. Edahí se separó de Alba con la respiración acelerada y recargó su frente sobre la de ella. Se separó un poco y la vio sonriendo. Alzó la mirada y la conectó con la de ella. Vio sus ojos y estaban brillantes, rojos como el amanecer, intensos y profundos.

-Podemos arreglarlo- dijo Alba en un susurro. Con lo cual hizo que la sonrisa más grande que había visto en su vida se marcara en la cara de Edahí.

**********

Hola a todos, perdón por haberme desaparecido por un buen rato, tuve ciertos problemas personales. Pero ya estoy de vuelta, gracias a todos los que me han alentado a seguir la historia y que votan por ella. Prometo actualizar más seguido. Nos leemos pronto

SANGRE DE BRUJODonde viven las historias. Descúbrelo ahora