Mi Guardaespaldas. (TERMINADA)

23

La casa se quedó en completo silencio, solo podía escuchar el latido de mi corazón que golpeaba con fuerza contra mi pecho, no sabía que hacer ahora, quizás Tayler está herido y si subo el otro tipo podría hacerme daño, pero también quería estar seguro de que Tayler estaba bien. Así que empecé a subir las escaleras lentamente hasta llegar arriba, se escucharon varios pasos al fondo del pasillo así que camine lentamente hasta llegar a la puerta de mi habitación pero no hice más, solo esperé mientras escuchaba pasos moverse por toda la habitación hasta que se detuvieron.
Mi respiración empezó a agitarse nuevamente así que puse mi mano en mi boca para tratar de calmarme, entonces escuche nuevamente los pasos acercarse al pasillo y después una arma estaba en mi cabeza, sentí que mi respiración se cortó, iba a desmayarme en cualquier momento, pero entonces mis ojos encontraron los suyos y alejo el arma de mi.

-Maldición Nora - Dijo con los dientes apretados. - Dije que te quedarás abajo.

No sabía que decir y aunque tuviera algo que decir no podría por el nudo que tenía en la garganta y las enormes ganas de llorar, no pude resistir más y rompí en llanto, Tayler me rodeo con sus brazos mientras yo no paraba de sollozar.

- Todo está bien. - me decía para tranquilizarme mientras acariciaba mi cabello. - Lo siento

No sabía que era lo que sentía, quizás el haberme apuntado con su arma en la cabeza, nos quedamos ahí un par de segundos hasta que se empezaron a escuchar sirenas a lo lejos.

- Yo los llame. - me dice alejándose de mi. - Ve abajo, necesito revisar el cuerpo.

Dios, eso sonó demasiado mal, pero hice lo que me pidió. Como se supone que dormiría sabiendo que alguien murió en esta casa.

Los oficiales aún seguían arriba con Tayler mientras yo esperaba sentada en el sillón, al parecer el tipo solo había querido robar ya que pensaba que la casa estaba vacía o eso es lo que había alcanzado a oír, minutos después bajaron con un chico esposado y sin ninguna herida de bala, no entendía nada. El tipo me miro a los ojos pero enseguida bajo la mirada, parecía un poco arrepentido y asustado, sentí un poco de lastima por el, no parecía tener más de veinte años y estaba arruinando su vida haciendo este tipo de cosas.

Los oficiales me dijeron que tenía que ir a declarar mañana por la mañana y aunque no quería hacerlo era necesario. Subieron al chico en la patrulla y se fueron de la casa.

Tayler suspiro fuertemente y se dejó caer en el sillón.

- Vaya día. - Dijo poniendo una mano sobre su rostro.

- Creí que el chico había muerto. -añadí sentándome al lado de el, me miro.

- Mi arma solo dispara tranquilizantes, los duerme al instante. - explicó.

- Me alegro de que no haya muerto. - el frunció el ceño.

- Intento robar en tu casa y ¿te alegra?

- Parecía arrepentido. - dije, el sonrió dulcemente, tomo mi mano y le dio un pequeño beso.

- No puede ser posible que seas tan buena persona. -Me quede mirándolo fijamente y el enseguida soltó mi mano. - Aun estás molesta conmigo.

- No estoy molesta, estoy confundida. - dije. - ¿Que es lo que quieres de mi Tayler? - pregunte sin siquiera pensarlo.

- Todo Nora, todo.

- Pues no lo parece. - solté y me levante del sillón pero el volvió a sentarme jalándome del brazo.

- ¿En serio quieres que deje de cuidarte? - preguntó mirándome fijamente.