Nora tenía la vida que cualquier chica de veinte años desearía, sus padres son dueños de una de las empresas más reconocidas del país y parece que tiene una vida perfecta. Hasta que los problemas empiezan a llegar a su vida, cuando alguien entra a s...
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Ya no respondió mi mensaje, así que bloquee mi celular, espero que no le diga a Tayler de los mensajes, no se como fuera a reaccionar al saber que averigüe el nombre de su hermana, porque pensándolo bien ahora parecía medio psicopata el haber encontrado su Facebook.
Ha pasado una semana desde la ultima vez que vi a Tayler y no había recibido ni un mensaje de el, era muy raro aunque tampoco yo había intentado mandarle uno, así que estaba en la sala pensando en si apretar o no el mensaje que había escrito hace unos minutos, solo había escrito unas cuantas líneas:
Hola, han pasado varios días desde que te vi, espero que estes bien, yo lo estoy... por si tenías dudas... responde cuando puedas.
Estaba por apretar enviar cuando mi celular empezó a sonar, era Halsey, tampoco la había visto desde la ultima vez.
- Hasta que te acuerdas de mi. - Dije cuando respondí.
- No seas dramática, para que veas que no me olvido de ti quiero invitarte a una fiesta. - me reí.
- Sabes que no soy de fiestas.
- Vamos Nora, tiene como mil años que no vamos juntas a una, por favor. - Dijo con voz chillona.
- No lo se Hals, aún estoy en pijama.
- Tienes una hora para cambiarte, pasó por ti. - iba a negarme una vez más pero colgó, odiaba cuando hacía eso.
Me levante del sillón de mala gana, ese era un día en el que no quería hacer nada y ahora tenía que ir a bañarme y arreglarme y eso hice, habían pasado cuarenta minutos y ya estaba lista, mire la hora en mi celular, casi serían las ocho de la noche, le mande mensaje a Halsey para avisarle que estaba lista y salí de mi habitación no sin antes ponerme un poco de perfume. Busque a Chase para avisarle que saldríamos, no lo había visto en todo el día y eso era raro, fui hasta la cocina pero no estaba ahí, así que entre en el cuarto de empleados, toqué varias veces pero no obtuve respuesta así que abrí la puerta pero el también estaba por abrirla también, tenía una toalla amarrada a la cintura y su cabello estaba húmedo, era obvio que acababa de salir de la ducha, sentí que mis mejillas empezaron a ponerse rojas así que me aclare la garganta y mire a otro lado que no fuera el semi desnudo.
- Saldremos en unos minutos.
- Entendido señorita.
Espere a Chase en la entrada principal y también a que Halsey llegara, estaba empezando a arrepentirme de ir. Chase llegó minutos después, está vez no vestía de traje como lo había normalmente, esta vez tenía un pantalón de mezclilla y una camiseta blanca.
- Estoy listo. - me dijo.
- Halsey aún no llega.
Mi celular sonó indicándome que tenía un nuevo mensaje, era de Halsey, lo abrí en seguida.
