Tu recuerdo en mí- (Christopher Vélez- CNCO)

41. Christopher fase "idiota"

Volví jajajaja sigo con vida!!!

Bueno este capitulo va dedicado a: @gxrlbxd y @AthziryRoman (Ustedes fueron las primeras en responder a la trivia "Abichuelos" jejejejeje. Gracias por apoyarme en esta novela ggg. En verdad me alegra que sigan pendientes de los capítulos que se van subiendo. Gracias por votar, por comentar y por darle amor a los Abichuelo jijij. Las quiero chicas :) )

—¡Menzota!—decía a mi lado una voz femenina

La mayoría de las veces que hablaba con la voces, yo solía desear con todas mis fuerzas alejarme de ellas, sin embargo ahora solo quería volver para pedirles explicaciones sobre la reciente reunión.

—ESTÚPIDA, HÁBLAME—me decía Ami, con la voz temblorosa

Como no tenía caso seguir aferrándome al encuentro, decidí que lo mejor era responder a los llamados de Ami.

—¿Amanda?—yo abrí los ojos lentamente, y ella solo me abrazó fuertemente

—Te odio—ella parecía en serio asustada—. En serio que te voy a seguir odiando, si sigues imitando a la niña del exorcista. Por Dios, mujer estabas llorando como loca, y después... te quedaste como muerta, sin hacer nada. Yo creí que hasta dejaste de respirar...

—Ya calmate, bella—le pedí, intentando retomar la conciencia por completo

—No me calmo, babosa—ella se separó de mi, mirándome con un puchero triste—. No sabía que hacer, porque para colmo estoy sola aquí contigo.

—¿Cómo que sola?—yo me quedé mirándola petrificada

Lo último que supe antes de acostarme a dormir, fue que Ami y Christopher estaban plácidamente dormidos.

—Ah... entonces ni tú sabes porque no está aquí—ella me miró pensativa—. Por un momento creí que te lo dijo, y por eso mismo te iba a preguntar cuando despertaras.

Dejando de lado mi cansancio provocado por las voces, me senté de un brinco para mirar de mejor manera el sillón en el cual estaba recostado Chris, pero me llevé una decepción al solo encontrar una sabana tirada encima.

—¿Y a donde iría a estas horas?—espié a la ventana donde aun permanecía oscuro, y luego tomé mi celular para ver la hora encontrándome con que eran las 4 y 30 de la mañana.

—Pues no lo sé—ella bostezó, acomodándose a mi lado—. Tal vez iría a buscar algo de comer.

—Ojalá que si—hablé, mientras volvía a tomar mi celular para llamarlo.

Sinceramente me preocupaba que haya desaparecido así, a vísperas de nuestra "casi pelea"

Cuando lo llamé, me llevé una gran sorpresa al notar que el maldito teléfono me mandaba al buzón de voz. Y sin duda ese hecho, me daba mala espina.

¿Será que él se enojó conmigo, por haberme portado esquiva luego de lo que oí con Victoria?

—No puede ser—bufé de mal humor—. Yo debería ser la que esté aplicando la ley del hielo, no él.

Amanda al escuchar lo que dije, me clavó la vista y me dio una mirada seria.

—Bueno... creo que ya me callé por mucho tiempo, así que...—ella acercó su cara a mi exageradamente—. ¿Qué mierda pasó? Ya los veo raritos desde ayer, luego que los encontré en mi habitación.

—Es que... es algo complicado—suspiré, bajando la vista y ella por su parte se agachó y me puso la cara otra vez en frente.

—No me importa, dime.