16. El amor verdadero no sabe de tiempos

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3 meses después.

Asmodeos se adentro en una de las grandes salas de conferencia, un centenar de personas lo esperaban. Entre ellos su hijo Magnus Bane. Estaban todos ansiosos por los anuncios de la nueva temporada. Camille se paseaba con su novio francés en el gran ventanal.

El Colon tenia sus grandes encantos y desencantos. La gente solía ser muy amable, pero solo los que nada tenían que ver con la danza. En su mayoría, los bailarines eran superficiales y soberbios. Preocupados solo por su maquillaje y ropas. Magnus toco el anillo de Alec que colaba de su cuello en una cadena hermosa de plata que le había dado Izzy cuando vio que lo tenia puesto todo el tiempo.

"No vas a andar con dos anillos, mejor llévalo así " le había sugerido.

La familia Lightwood era algo que él no entendía, tan unidos, tan únicos. Lo apretó en su puño pensando tal vez que eso haría que se sintiera menos impotente y solo. Llevaba puesto un saco azul oscuro largo, el pelo lucía perfectamente parado y rapado a los costados, tenía maquillaje con brillos puestos que resaltaban el delineador negro que rodeaba sus ojos tristes. Su padre le tomo el hombro para que notara su presencia en el lugar, sabia que no hacia falta que dijera nada pero un "Gracias por venir" no estaba de mas.

- Queridos. Se que es complicado sacarlos de sus mundos pero dada la ocasión.. - Tosió como para asegurarse de que lo miraban y eso hicieron. Se callaron todos y se sentaron alrededor de la gran mesa.

- La obra elegida ha sido la bella y la bestia. - Anuncio otro hombre, uno pálido y de pelos blancos que nadie recordaba su nombre.

Magnus rodó los ojos y se hecho hacia atrás tapando sus ojos.

- ¿Que pasa Magnus? ¿Te aburrimos los que no somos un vegetal como tu novio? - Dijo Camille empezando a reírse. Algunos se rieron, pero la mayoría miro con disgusto a la joven y hermosa bailarina.

- Señorita Betancourt, a menos que quiera hacer de taza o decorado debería ser mas respetuosa.

- Por favor, soy la bailarina estrella... - Rodó los ojos y todos empezaron a reírse.

- Nadie es indispensable en este lugar. Magnus no será parte principal de la obra pero si será el coreógrafo. Trabajara con todos ustedes y será el encargado de la selección.

Todos hicieron un silencio ensordecedor, al parecer la noticia no era la que esperaban. Magnus normalmente era la estrella y si no lo era, era de esos personajes que la gente quería ver mas que al protagonista. Siempre atraía el amor de la gente.

- Ugh estamos arruinados... - dijo por lo bajo Camille.

- En realidad. - Magnus se levanto y todos lo miraron. Nadie podía dudar de su belleza.- Será una gran oportunidad para todos. Camille! - Esta lo miro y ambos cruzaron rayos.- Será una versión alternativa así que, dado a tu hermoso talento deberías hacer de Gastón.

Todos estallaron de risas, menos Magnus que se sintió raro de la nada y de repente su celular vibraba.

Era un mensaje.

De Isabelle.

Alec.

Había despertado.

• • •

Salio corriendo de la reunión y Asmodeos corrió detrás de el. Elías que estaba sentado leyendo una revista de modas con muy pocas ganas se levanto enseguida tirando la revista a un costado, se acomodo el saco y camino junto a Magnus, era como si lo hubieran ensayado. Subieron todos al auto, cada uno en su lugar. El bailarin sintió que estaba a punto de morir de angustia. Apretó el anillo con fuerza entre sus dedos.

Enseñame a Amar (P3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora