CAMBIANDO EL DESTINO

Capitulo 11

Afligida por la discusión de anoche. Paula llegaba al hospital dispuesta a incorporarse a su puesto de trabajo, nada más cambiarse su ropa por su uniforme una de sus compañeras le avisó que el director quería hablar con ella.
Temblando por dentro, sin saber exactamente lo que ocurre se dispuso a ir hasta la oficina de su jefe.

Con paso meticuloso haciendo crujir sus dedos de la misma inquietud, ésta tocó la puerta soltando el aire acumulado en sus pulmones tan despacio como le era posible.

Dentro de la oficina de Raúl, Paula miró aquel que se encontraba ojeando unos papeles.

--Buenos días Raúl.--Balbuceó Paula notando como sus piernas flaqueaban.

--Buenos días Paula. Por favor siéntese.--Tragando saliva sin poder tranquilizarse, Paula tomó asiento algo confundida.

--Raúl quería verme.

--Sí. El motivo por el cual te he llamado es para comunicarte que a partir de hoy trabajarás con Cosme.

-Pero...si...yo...-Aquella noticia la pilló desprevenida. ¿Porqué razón ahora Iñaki no quería trabajar juntos, no se supone que son adultos y profesionales?

-Lo siento Paula, pero Iñaki me ha comunicado que ya no desea que seas su compañera debido a unos conflictos que habéis tenido. Y por supuesto lo personal afecta en el trabajo y yo no quiero eso.

-Entiendo Raúl. ¿Sabes qué?

-Dime.

-Si tu sobrino así lo ha decido, y por lo que veo es su manera de resolver los problemas. Acepto encantada. Cambiar de compañero no me vendrá mal. Gracias por todo.

-Gracias a ti por entender y espero que pronto arregléis vuestras diferencias.

-Para arreglar los malos entendidos hay que saber escuchar y estar dispuesto hacerlo. Sin embargo Iñaki prefiere ir por la vía fácil.

-Llevas razón. Siempre le enseñado a solucionar los problemas no huir de ellos. Ya no sé qué hacer.

--Ya haces suficiente Raúl. Me marcho tengo que ponerme al día con mi nuevo compañero. --Como si aquello no le hubiera afectado en lo más absoluto, Paula se recompuesto y se marchó de la oficina de su jefe notando de nuevo la decepción.

-Paula donde vas tan pensativa.-Le preguntó Jairo.

-Ya te contaré, nos vemos a la salida o en mi casa tengo que ir con Cosme, el ahora es mi nuevo compañero.

-¿Enserio? ¿Qué ha pasado para que ahora trabajes con mi padre?

-Ahora no puedo responderte nos vemos en mi casa, Azahara se ha ido a vivir con Iñaki. Esta mañana estaba recogiendo sus cosas.

-La que va liar la señorita. Yo también tengo algo que contarte.

-No lo sabes tú bien. Nos vemos entonces en mi casa-Jairo abrazó a Paula quedando en verse en su casa.

A escasos metros, Iñaki presenciaba la escena. Un tornado de envidia y celos fluían rápido en su interior. Apretando sus puños y su mandíbula Iñaki se marchó hacia su puesto de trabajo.
Había acudido esa misma mañana temprano para hablar con su tío pidiéndole tras haberlo convencido Azahara que tras lo ocurrido anoche, lo mejor sería poner distancias entre él y Paula.
Y ahora que Paula ya no era su compañera, sentía como una nube blanca cambiaba de color por haber accedido a la petición de Azahara.
Habían sido muchos años trabajando juntos forjando una amistad indestructible cargada de sentimientos ocultos.
Furioso con él mismo empezó a trabajar con su nueva compañera.

Trabajar con Cosme no era tan malo como ella había creído. Aquel día Paula aprendió mucho, puesto que Cosme llevaba más de treinta años en la medicina. Era un hombre serio en su trabajo y a la vez divertido. Le gustaba gastar bromas con los niños y de vez en cuando se dirigía ha Paula cómo su nuera.