Bizzle Gang » +18

08. El enojo de Bizzle » Parte 2

Estado: California, Malibú. Hora: 20:05 a.m
19 de Enero, 2014.

Omniscient.

Los ojos de Justin cada vez se tornaban más obscuros ante el enojo, la lujuria y las ganas de satisfacer sus necesidades que llevaba acumulados dentro de sí para este punto. Acerco su mano izquierda al rostro de Kylie solo para trazar un camino desde su mandíbula hasta sus pequeños labios color rosa, ella lucía tan inocente ante sus ojos, lastima que esa imagen fuese a durar tan solo unos pocos segundos antes de comenzar con su labor.

La tomo por la mandíbula fuerte y la acerco a su rostro, ella aún dormía plácidamente por lo cuál de mala gana opto por soltar su delicado rostro bruscamente para descender sus manos por su cuerpo, ella no era nada curvilínea en lo absoluto pero en ese momento era lo último que le importaba,  dio un fuerte apretón en el muslo de su pierna derecha y no se lo pensó mucho para atacar sus labios, mejor dicho «devorar». Su enojo aumentaba considerablemente por el hecho de que Kylie no le correspondiera el beso, se separó de ella y le dio una bofetada en su mejilla derecha, luego una en su izquierda logrando así que la chica comenzara a reaccionar.

Una sonrisa diabólica se planto en su rostro una vez que la vió fruncir el ceño en su dirección, con amabas manos apretujó sus senos y ella se removió incómoda.

—¿Q-qué haces? —apenas y pudo hablar, aún no entendía la escena en la cuál se encontraba y su voz no le salía precisamente de la mejor manera luego de estar dormida tanto tiempo.

—¿Qué crees que hago preciosa? —apuntó Bizzle mientras volvía a tomar con rudeza su pequeña mandíbula—. Te voy a cojer, te voy a cojer tan jodidamente fuerte qué desearás no haber nacido.

Kylie se congeló ante sus duras palabras "¿acaso está loco?" se pregunto a sí misma, y honestamente si lo estaba.

—Suéltame —suplicó la indefensa castaña.

—Tienes dos opciones princesa —la voz rasposa de Bizzle provoco que ella sintiera escalofríos—. Dejas que te folle sin quejarte cómo una zorra o le dices adiós a este jodido mundo.

Al escuchar sus palabras, Kylie sintió un vacío en su estomago y comenzó a considerar todas las buenas y malas decisiones que tomó durante su corta vida, definitivamente esta era la peor, haber ido a aquella fiesta de fraternidad, demonios cuanto lo lamentaba.

Observó silenciosa cómo Justin se deshacía de su cinturón para luego desabrocharse la camiseta blanca que traía puesta, tres cadenas decoraban su cuello y un tatuaje en forma de cruz plasmado en su pecho fue lo que apenas logró ver ya que aún no se quitaba la camiseta del todo, la imagen definitivamente podría ser la más sexy del mundo en otros momentos.
Débilmente trató de cubrir su cuerpo desnudo con sus manos lo cuál desde luego no funcionó en lo absoluto, Bizzle la tomo por amabas muñecas y colocó estás por encima de su cabeza, se acercó peligrosamente a su rostro y tomó sus labios sin permiso alguno, Kylie no correspondía su beso lo cuál comenzó a irritarle.

—¿En verdad quieres morir hoy, ah? —amenazó y a duras penas ella le comenzó a seguir el beso mientras lloraba en silencio, las manos de Justin se situaron en sus piernas, luego con su izquierda comenzó a masajear el interior de su pierna izquierda, muy cerca de su zona sensible. Cada que se acercaba a su centro ella presionaba ambas piernas impidiéndole que continuase.

—Por favor... —lloriqueo llamando así la atención de Bizzle.

—¡La nena está llorando! —carcajeó el castaño mientras acariciaba el centro de ella.

—DETENTE —chillo asustada y el hizo aún más presión provocando que a ella le doliera.

—Bizzle, lamento interrumpir hombre, pero tenemos un 009B —un llamado a la puerta interrumpió el acto, Kylie sintió un alivio interno mientras observaba atenta los movimientos del chico que tenía sobre ella. Justin maldijo un sin fin de veces antes de levantarse, tomó el saco que reposaba en el suelo y sacó un arma de allí antes de salir.