Bizzle Gang » +18

12. Tercer club » Parte 4

Estado: California, Malibú. Hora: 02:40 a.m
21 de Enero, 2014.

Omniscient.

El lugar desbordaba llamaradas de fuego ante cualquier persona que se detuviera a observarlo por escasos segundos, Justin devoraba la boca de Kylie cómo si se tratara de la primera vez que la tenía solo para él.

Kylie introdujo sus manos bajo la polera de Justin y acarició sus duros abdominales, el sostenía el rostro de ella entre sus manos mientras la besaba con pura pasión y al sentir el tacto por parte de ella sintió su miembro endurecerse más de lo que ya estaba. Apretó sus piernas y la jaló para que quedara al borde del lavamanos para poder así hacerle sentir su excitación, Kylie respondió enredando sus piernas alrededor de sus caderas para así poder sentirlo aún más.

—No quiero verte hablando con ese tipo de nuevo ni con algún otro hijo de puta más ¿de acuerdo? —interrumpió él para atacar su cuello con besos húmedos, ella jadeó y posó su mano sobre el cuello de él para proporcionarle caricias.

—¿Me has oído? —preguntó nuevamente y ella asintió apenas consciente. De repente Bizzle paró con los besos y se alejó dejándola con una excitación increíble y totalmente mojada.
El plan de Justin era hacerla rogar, desde luego que estaba furioso por verla coquetear con su mayor enemigo, así que esta sería su forma de hacerla pagar, mediante la humillación. Aunque por poco se deja llevar.

Pero lo que no sabía él, es qué, él humillado sería otro.

—¿Q-que haces? —preguntó Kylie con la voz entrecortada cuando lo vió alejarse.

—Te veo en casa. Khalil te lleva —respondió y giró sobre sus talones para alejarse, Kylie elevó una de sus cejas al ver cómo el se alejaba y una sonrisa burlesca apareció sobre su rostro.

—¿Así de poco hombre, eres?

Habló ella dejando a Bizzle sin aliento, ¿ella había dicho qué?.

—¿Qué has dicho?.

—He dicho que si así de poco hombre eres, por dejar a una chica caliente y sin darle placer —Kylie levantó su vestido dejándole una muy buena vista a Justin. El cerro la puerta con pestillo y se dió la vuelta.

—Oh no, tú no has dicho algo cómo tal —dijo mientras se acercaba, Kylie notó la mandíbula de él tensarse y con eso fue cómo enviar descargas a su centro.
Ella posó su mano sobre su centro, por encima de sus bragas dejando a Justin sin aliento nuevamente.

—Vaya que sí lo he dicho.

Bizzle no tardó en quedar frente a ella mientras observaba los movimientos tan exquisitos que se hacía ella misma, su mano izquierda se posó sobre la de ella para posteriormente ser sustituida.

—¿En verdad crees que no soy lo suficientemente hombre para ti? —jadeó el castaño mientras corría sus bragas para acariciar mejor su centro. Kylie echó la cabeza hacia atrás y jadeo ante la hermosa sensación.

—Sí, lo creo —gimió y el aumentó los movimientos, cuando ella trató de levantar la cabeza por poco se sintió a morir cuando sintió su lengua hacer maravillas sobre su clítoris. Ella colocó su mano derecha sobre la melena castaña de él y dio leves jalones cada que Justin aumentaba los movimientos.

De repente ya no solo era la lengua o solo los dedos, ahora eran ambos y la combinación resultaba impresionantemente deliciosa.