Muchas gracias por la cantidad de nombres hermosos y originales que me dejaron ❤❤💞, y aunque fue difícil de elegir, este sin duda, fue uno de los que más me gustó como sonaba ❤💞
.
.
.
—Todo estará bien —le aseguró Milo con una suave sonrisa, tocándole el hombro.
—Eso no lo sé. Yo debía estar ahí con ella, no se sé porqué no me dejaron entrar.
—Porque fue de urgencia, Andrew. No hubo tiempo de prepararte a ti.
—Angie debe estar muy asustada —pronunció afligido—. Le dije que estaría a su lado en todo momento.
—Y ella lo sabe, debe entender porqué tú no estás ahí. Fue una cesaria de urgencia. Tranquilo, tu bebé y Angie estarán bien.-o-o-o-o-
Y luego de la larga espera, de los miedos y dudas, y sobre todo, la incertidumbre, su bebé finalmente estaba allí... Sana.
Angie sonrió con lágrimas en los ojos, tomando a la pequeña entre sus brazos.
Había sido un largo camino, y el mayor de sus anhelos, finalmente estaba en sus brazos.
Tan frágil y hermosa, producto del gran amor que se tenían ella y Andrew.
—Eres perfecta —susurró besando suavemente su cabecita, escuchando un bajo quejido de la bebé.
La puerta se abrió, y reveló a un muy preocupado Andrew, que inmediatamente al verla a ambas, cambio rápidamente de expresión.
Se acercó a Angie, y le sonrió cálidamente, antes de besar sus labios.
—Mírala —le dijo emocionada—. Es hermosa, Andrew. Y está muy sana, nuestra hijita está bien.
—Es muy pequeña —pronunció tocando con la punta de su dedo una de las mejillas de las niña—. Hermosa como su mamá.
Angie sonrió, cerrado sus ojos y apoyando su cabeza contra el brazo de Andrew. Se sentía exhausta.
—¿Cómo le pondremos, mi amor?
—Arlette.
—¿Arlette?
—Me gusta, suena bien.
—Bienvenida a nuestra familia, cariño.
—Será una niña muy tranquila, ni se ha inmutado al escucharnos hablar —sonrió el moreno.-o-o-o-o-
—Seis meses después—
—Ven aquí, amor —le dijo Andrew sonriendo.
La pequeña castaña sonrió ampliamente, dirigiéndose a su padre, gateando.
La tomó en sus brazos, y la llenó de besos, haciéndola reír, en esas carcajadas tan contagiosas.
—Preciosa mía —pronunció con ternura, dirigiéndose a la cocina con la niña en brazos—. Es hora de tu almuerzo, y parece que a mami se le hizo tarde una vez más.
La sentó en su sillita, y luego buscó en el refrigerador su papilla, mientras escuchaba a la niña balbucear, y golpear con sus pequeñas manitos la mesa.
—¿Tienes hambre, cariño? Solo unos segundos, y papi te dará tu comida.
La colocó dentro del microondas, y se acercó a Arlette, colocándole su babero.
Era un desafío dejar quieta a esa niña, desde que había aprendido a gatear, solía recorrer toda la casa.-o-o-o-o-
—Maldito tráfico —bufó molesta, cerrando la puerta del auto con más fuerza de la necesaria.
Se turnaban con Andrew los días de trabajo para poder quedarse a cuidar a su hija, ya que luego de los que les había tocado vivir, no confiaban en nadie para el cuidado de la pequeña Arlette.
Suspiró con cansancio, entrando a su casa.
—Amor, llegué —anunció dejando su cartera colgada.
Caminó un par de pasos por la sala, y la casa se oía muy tranquila.
Miró la hora en su reloj de pulsera, y observó que ya era más de las dos de la tarde.
Se dirigió a su habitación, y allí estaban los dos amores de su vida, durmiendo.
Sonrió enternecida y se subió a la cama, depositando un suave beso sobre los labios de Andrew, y otros sobre la frente de su pequeña hijita.
—Angie —murmuró adormilado, abriendo los ojos.
—Lamento llegó tarde, tuve un improvisto con uno de los clientes.
—No te preocupes —sonrió—. Aunque Arlette se durmió antes de que llegaras.
—¿Cómo se portó?
—Se despertó una hora luego de que te fueras —bostezó—. Y desde entonces, estuvo despierta, jugando.
—Es muy activa —rio bajo, acariciado el cabello castaño de su hija.
—Y habladora. Ahora sólo balbucea, pero estoy seguro que cuando aprenda a hablar, será una lorita como tú. Es más, creo que es de familia —rio—. Verte a ti, a Milo y Malika, es prueba mas que suficiente.
Sonrió y acarició con su mano libre el cabello de su marido.
—Creo que se está aclarando.
—¿Sí? Tendré que ir a oscurecerlo entonces.
—Y tus ojos también.
—Mmm, sí, ya han pasado más de ocho meses desde la última inyección.
—Sabes que a mi no me molesta, amor.
—Lo sé, pero me gusta más esta imagen mía.
—Eres hermoso como seas para mi —sonrió besándolo—. Y te amo tanto.
—Y yo a ti, mi amor —sonrio contra sus labios—. Aunque ahora, no eres la única mujer en mi vida.
—No, ahora tenemos a esta hermosa princesa.-o-o-o-o-
—Años después—
—Liiika —chilló haciendo un pequeño mohín.
La muchachita castaña sonrió divertida y rodó los ojos.
—Okay, okay, toma —le dijo dándole su celular—. Pero solo un ratito, sabes que a tu papás no les gusta que uses éstas cosas.
—¡Gracias prima! —pronunció emocionada, tomando el celular.
Malika ya contaba con doce años, y la pequeña Arlette pronto cumpliría los cinco años.
—Lika, ¿qué es eso? —preguntó curiosa, señalando la pantalla.
—¿Qué cosa?
—Hay un chico en la pantalla.
—¿Qué?
Tomó el celular, y observó la foto, sonriendo divertida.
—¿Sabes quien es él?
—No, ¿Quién?
—Es el hermano mayor de Nerea, ¿la recuerdas?
—¡Sí! ¡Nere!
—Vamos a ver que quiere —le dijo atendiendo la vídeo llamada—. Hola Luca.
—Hola Lika, la semana próxima empezaremos la clases.
—Lo sé.
—Sí, pero yo iré contigo.
—¿Por qué?
—El puto de Stephan irá con su gran amigo "Colín".
Arlette se cubrió la boca al escuchar lo que había dicho.
—Idiota, estoy con mi primita, cuida lo que dices —le reclamó Malika, mostrando en la cámara a la pequeña castaña de grandes ojos pardos.
—Lo siento preciosa, pero si tuvieras un amigo traidor como yo, le dirías lo mismo —sonrió divertido.
—¿Por qué traidor? ¿Qué hizo? —preguntó curiosa la pequeña.
—Se les llama traidora a una persona cuando te cambia por otra, o te falla.
—Ahh...
—No le hagas caso, Arly, ¿Está Nerea contigo?
—Nop, se la llevaron al parque.
Sin decir más nada, Arlette se bajó de la cama de su prima con cuidado, y la dejó hablar con su amigo, cerrando la puerta suavemente.
Salió hacia la sala, y allí estaban sus papás, hablando con sus tíos.
—¿En dónde estabas, princesa?
Sonrió y se subió al sofá, donde inmediatamente Andrew la tomó en sus brazos.
—Estaba con Lika.
—Es una niña preciosa —acotó Ariel, la pareja de Milo de hacía dos años.
—Gracias —sonrió Angie—. Pero lo que tiene de preciosa, lo tiene de terrible.
—Como mi hija —rio orgulloso Milo.
—Y creo que él será tranquilo como Andrew —pronunció con una suave sonrisa mirando a su marido, tocando su vientre a penas abultado—. No me sorprendió cuando dijeron que sería un varón.
—Y yo le elegí el nombre al bebito, ¿Verdad, mami?
—Así es, cuéntales a los tíos el nombre que elegiste.
—Alek.
—Suena parecido al tuyo —sonrió divertido Milo.
—Y por eso el bebito será lindo —pronunció con simpleza la niña, haciéndolos reír....
Y aquí, la elección del segundo nombre, para niño 💕💞
¡Muchas gracias a todas las que me dejaron nombres tan bonitos y únicos! 😘❤💞
Espero les haya gustado el capitulo ❤💕💞
ESTÁS LEYENDO
Juguetes para ellas
Ciencia FicciónÁngela Dufour es una joven de veintiséis años que regresa a la casa de sus padres luego de estar estudiando en el exterior. Al llegar a su hogar, no solo se encuentra con la triste noticia de que su madre ha decidido deshacerse de todos las pertenen...