7. Cambio De Look.
Ya estoy entrando a casa cuando oigo a mi madre hablar por teléfono con alguno de sus clientes mientras camina de un lado a otro, yo paso por su lado ignorándola y me dirijo al comedor donde está mi padre sentado en el sofá y mirando una libreta. Yo me siento a su lado y enciendo la tele, al ser temprano estaban haciendo sin chan en neox pero en vez de en francés, en inglés, menos mal que al ser animadora profesional y viajar tanto me han obligado a hablar perfectamente el inglés.
-¿Qué tal va todo por el instituto cariño? ¿Te gusta? -Pregunta mi padre haciendo como si le interesase, pero sé que lo hace para quedar bien, en realidad él está ahora ocupado con lo que haya en esa libreta.
-Bien, pensaba que sería peor Nueva York -Eso último lo dije con una sonrisa pensando en Éric pero la quité enseguida.
-¿Sigues comunicándote con Matías y las chicas? -Noté una punzada de dolor y rabia en el pecho al mencionar a Matías.
-¿Sabes qué? No sé porque te empeñas ahora en preguntarme toda esta mierda, no hagas como si te importara porque yo sé que no. -Me levanté del sofá y estaba dispuesta a salir de la sala pero su grave voz me detuvo.
-Eso no es verdad, me importas mucho y lo sabes.
Hasta aquí llegaba mi paciencia.
-¡¡¡¡Si de verdad te importara no me habrías obligado a mudarme a esta mierda de ciudad por tu estúpido trabajo, no habría dejado de ser la capitana de los Wild Mights y mi novio no me habría dejado por ya no ser capitana!!!! -Grité furiosa mientras algunas lágrimas brotaban de mis ojos.
-¡¡Todo esto lo hago para que podáis tener todo lo que queráis!! -Dijo en mi mismo tono de voz.
-¡¿Pero es que no lo entiendes?! ¡¡Yo sólo quiero tener al padre que pasaba tanto tiempo conmigo cuando era pequeña!!
Salí corriendo de la sala para dirigirme al cuarto que me hizo mi madre de las animadoras y pude escucharla gritar cuando pasaba por su lado corriendo y llorando.
-Marina, ¿Qué te pasa? -Pero yo no paré y seguí corriendo hasta encerrarme en mi lugar favorito de la casa, la sala de las animadoras.
Estoy metida en mis pensamientos, pensando en lo mucho que cambió mi padre cuando lo ascendieron en el hospital, lo mucho que cambió mi madre cuando también la ascendieron en el buffet de abogados, prácticamente nos criamos mi hermano y yo por nuestra haya desde que ellos dejaron de pasar tiempo con nosotros y ya hace más de tres años que no vemos a nuestra haya. Ahora que por fin he conseguido ser alguien en la vida siendo tricampeona mundial también me lo querían arrebatar. Estoy pensando que lo único bueno que me ha salido de venir a NY son Cárol y su amigo que ya no me acuerdo de su nombre, me parece que no son tan frikis, son majos y simpáticos, cada día me caen mejor porque después de todo, las apariencias engañan. Podría decir que Éric también me cae bien pero eso sería caer bajo y él solo es un mujeriego rompecorazones...
Después de un rato cogí el móvil y encendí el skype. Me puse a hablar con mis mejores amigas y estuvimos así unos 30 minutos hasta que se tuvieron que ir a entrenar.
Estoy recostada en la tumbona y apunto de dormirme cuando oigo sonar mi móvil.
-Llamada telefónica-
-¿Si?
-Marina, soy Cárol, ¿te apetece ir esta noche a una fiesta? Yo no suelo ir a esas cosas pero he supuesto que tú sí, así que si quieres... ah, y vendrá Álex -(así que así se llamaba ese amigo suyo)
ESTÁS LEYENDO
UN SEGUNDO CAMBIA UNA VIDA.
Ficção AdolescenteMe llamo Marina y mi vida acaba de dar un giro de 360º. Yo solía ser la chica perfecta con unos padres adinerados, un novio perfecto, mi grupo de los populares perfecto, mi equipo de animadores perfecto por no decir que soy la capitana de los Wild M...