Dolor de Cabeza

4.9K 684 29
                                        

El caos siguió sin detenerse, los golpes iban y venían, la magia también estaba presente, destruyendo de a poco, el lugar de la Reunión, ninguno de estos Idiotas tenia la intención de parar...Se supone que yo soy la niña pequeña de este grupo, pero al ver esta pelea que no parecía tener fin, ya estoy dudando seriamente de mi edad entre los Dioses.

Quizás, debido a que soy una reencarnación, mi edad mental es mucho mayor, específicamente la de una adolescente, que fue cuando morí, pero se supone que todos estos tipos y tipas de aquí deben de tener más de 10.000 años, en comparación a mí, que edad de Diosa, tengo aproximadamente unos 10 años.

Si algo he aprendido, por cuenta propia, es que nosotros, los Dioses y Diosas, crecemos a medida de que hallan sucesos importantes en nuestras Dimensiones, una vez que alcanzamos la apariencia con la cual nos idealizan nuestros Mortales, nosotros dejamos de crecer y nos mantenemos con esa apariencia, a pesar de que a veces adoptamos uno que otro disfraz, para poder interactuar con los Mortales y salir, un poco, del aburrimiento.

La dimensión en la cual soy la Diosa, es una recién nacida, no muy diferente a mi misma, por eso mismo mi apariencia es la de una niña pequeña, en referencia a que nosotros en comparación a las otras Dimensiones, somos unos niños pequeños que nos falta mucho por aprender y vivir.

-Esto es ridículo ¿No es así? Pequeña Tindharia- me dijo de la nada el viejo decrépito.

-Si, realmente es una idiotez- le respondo, mientras veo como al Imbécil, ese Dios de cuarta que me ataco en mi primera reunión,le daban un buen golpe.

-Lo que me sorprende es que seas tú, la más pequeña de todos nosotros, la que está manteniendo la calma y la relativamente poca tranquilidad de este lugar- me dice mientras acaricia mi cabello.

No me molesta de que el viejo decrépito haga eso, él es un Abuelo cariñoso que solo quiere consentir a su nieta, y dado de que aquí todos están peleando, él no puede mimar a los demás.

El campo de fuerza, el cual nos estaba rodeando, se estaba haciendo débil, eso significa de que pronto me veré involucrada en la estúpida pelea de los Idiotas.

Respiro un poco hondo, tranquilizandome y esperando al primer Idiota que me ataque, como soy una niña, soy la única persona aquí presente que puede actuar siendo impulsiva, nosotros los niños pequeños, somos seres impulsivos por naturaleza, por eso solemos meternos en problemas....Mentalmente hablando, soy una vieja pesada, pero en edad de los Dioses soy una niña.

Finalmente el campo de fuerza se rompe, el viejo decrépito se agacha mientras me arrastra con él, evitando un ataque, los gritos son más fuertes, puedo ver algunas heridas y creo que una que otra parte del cuerpo saliendo volando....Realmente no es tan grave, si lastimaran nuestro cuerpo físico sería peligroso, pero aquí todos somos manifestaciones de la Voluntad de nuestras respectivas Dimensiones, nuestros cuerpos físicos están en nuestros respectivos Hogares.....Si ya los Mortales son unos Idiotas que necesitan confiar en los Dioses, me incluyo, para hacer cosas, si nosotros nos fuéramos totalmente, se crearía el caos y seguramente la Dimensión se iría al baño de lo mal que estará.

Me está doliendo la cabeza, si es que es posible eso, así que coloco ambas manos en ella, en representación a lo que estoy sintiendo, el viejo decrépito se da cuenta de eso.

-¿Te sientes bien?- me pregunta preocupado.

-No, quiero irme a casa, pero sé que no puedo hará que acabe la Reunión- le digo mientras de a poco comienzo a pararme algo mareada.

-Si quieres, puedes retirarte- me ofrece el Dios más viejo.

-No, soy una maldita floja e indiferente, pero no soy irresponsable, se que esto es obligatorio, así que me quedaré hasta el final, eso sí ¿Puedo gritar? ¿Puedo usar palabras groseras?- le pregunto al hombre.

-Permiso concedido- me afirma

-Gracias- digo, más que dispuesta a soltar un poco de mis pensamientos a la Idiotez del lugar.

-¡CALMENSE Y CALLENSE DE UNA MALDITA SANTA PUTA VEZ- grito más que enfadada, ojalá me escuchen.

No me hacen caso, así que solo queda usar eso, lo que hacía cuando mis compañeros de clases me dejaban harta.

Sin decir nada, comienzo a acercarme a la pelea, golpeando a cada tonto o tonta que se me acercaba con el fin de lástimarme, está bien que estén aburridos, pero por favor no me involucren, soy la más pequeña de aquí y ahora mismo estoy con el humor de vieja de mierda.

Cuando llegue al que sería el ojo del huracán, vuelvo a gritar.

-¡MALDITA SEA! ¡USTEDES SON UNOS IDIOTAS INFANTILES!-

Creo que se están callando.

-! ESTÁ BIEN QUE ESTEN ABURRIDOS, PERO POR FAVOR, DEJEN ESTA ESTUPIDEZ! ¡SON DIOSES Y DIOSAS! ¡SE SUPONE QUE DEBEN DE MANTENER LA PAZ DE SUS DIMENSIONES Y ESTANDO AQUI TODO SE VA AL CARAJO!- grito, diciendo algunas cosas que se que si fueran mortales me matarían o golpearían después.

-¡¿NO DEBERIAN DE DARME EL EJEMPLO A MÍ!? ¡UNA DIOSA RECIEN NACIDA! ¡UNA DIOSA, QUE UNA VEZ FUE UNA MORTAL Y NO SABE NADA DE SER UNA DIOSA! ¡REALMENTE SON UNOS IDIOTAS QUE NO SE MERECEN NI UNA PISCS DE RESPETO O ADMIRACIÓN!- sigo gritando, me estoy en parte descargando un poco la frustración de esta reunión.

-¡ME DAN DOLOR DE CABEZA! ¡SON UNOS IDIOTAS! ¡¿COMO PUEDEN SER DIOSES O DIOSAS! ¡POR MI PARTE PUEDEN IRSE A DONDE NI SIQUIERA UNA ESTRELLA PUEDA VERLOS!- digo, mientras coloco mi mano en mi frente, ya revelando lo que sentía.

La sala se quedó en silencio, espero que no me ataquen, por lo menos no cuando tengo este terrible dolor de cabeza, ya que así no puedo devolver el golpe.

Quiero irme a casa y si es posible, aunque lo dudo rotundamente, no volver a una estúpida reunión con estos Idiotas que se hace pasar por Dioses y Diosas.

Soy un....¡¿Árbol!?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora