Soy un....¡¿Árbol!?

Un viejo conocido

Dentro de las cosas que he visto desde que me convertí en la Diosa de la Reencarnación ha sido todo tipo de vidas extrañas 

¿Pueden creer que hay gente con cabeza de pulpo y cuerpo de caballo?

 ¿Seres que parecen pulgas y tienen la fuerza de un gigante?

¡Son tantos fenómenos que ya no me sorprende que vea a una bacteria super alienígena! 

Las reencarnaciones son variadas, las vidas aunque repetitivas son interesantes, por lo que he aprendido a ver mas bien los recuerdos y dejarme para entretenerme aquellos que considero interesantes.

Que extraño...Hay una presencia que me resulta familiar, no es molesta como ciertos Idiotas que he tenido que soportar, pero es más bien nostálgica.

-¿Donde estoy?- 

Pregunta cliche

Miro al hombre de unos 23 años cabello desordenado, ensangrentado y con varios huesos rotos, sus ojos...Esos ojos, han pasado muchos años desde que los vi.

-Mira si es Doble Cara- saludo al reconocer al hombre.

El nombre, si es que no mal recuerdo, era Rasec Sagart...Un chico de otro curso en la Escuela, en lo personal no lo conocía muy bien, las pocas veces que había hablado con él me di cuenta que era un maldito farsante en el sentido que no dejaba ver su tristeza, eso era notorio si uno se fijaba en sus ojos.

-Doble Cara...Hace muchos años que no escuchaba a alguien llamarme así, desde que esa chica murió....¿Dharia?-

-Hacia muchos años que no te veía Doble Cara, aunque ahora no me llamo Dharia, soy Tindharia- me presento al hombre pero esta vez adoptando la forma en que me vio por última vez.

-¿Por qué estas aquí? y ¿Qué es este lugar?- me pregunta mas confundido mientras observaba mi lugar de trabajo.

El espacio donde decido a quien reencarnar o hacerle su próxima vida un infierno se destaca por ser la combinación de un bosque y ruinas de alguna civilización muy antigua, debido a que mi verdadero cuerpo fisico es un Árbol, este tipo de lugares, me hacía sentir comoda.

-Para empezar este lugar es mi trabajo, en segundo ahora tu eres el último de los idiotas que tengo que mandar a otra vida- respondo con indiferencia.

Se nota que este Doble Cara no ha tenido buena vida, por algo esta aquí, pero eso es lo de menos, me gustaría saber que ha pasado en mi antiguo mundo natal.

-¿Han ocurrido cosas interesantes con el resto de imbeciles desde que morí ?- pregunte un poco curiosa.

-Tu curso estuvo en duelo una semana, eras bastante querida a pesar de tu personalidad- contesta casi de inmediato.

-Tus Padres adoptaron a un niño huérfano- 

No me sorprende ese detalle, mis Padres eran personas muy amorosas.

El Doble Cara siguió contándome cosas mundanas, pero el muy ciego no me ha hablado mucho de él.

-Doble Cara, tengo que hacer mi trabajo, así que corta toda esta mierda, si no vas a contarme cosas de ti por las buenas, tendré que sacarla a la mala- interrumpo ya un poco harta.

Quiero devolverme a mi Árbol.

-!¿Cómo harías eso Dharia?¡- me pregunta un tanto ofensivo el hombre.

-Para empezar estas en mi territorio, en segundo lugar si no tengo un resumen tuyo no se a que Dimensión mandarte, tercero y más importante, dado que eres un conocido mío, evitare que tu próxima vida sea un infierno-  le explico sin muchas ganas.