Narra Samantha
Después de lo ocurrido, Suga me llevó a la terraza y comenzamos a platicar. Nos estábamos conociendo, y para mi sorpresa, teníamos muchas cosas en común. Entre risas y algunas historias, intenté contar chistes... pero soy terrible en eso. Decía cosas sin sentido, y aun así, él se reía. Me hacía sentir ligera, como si por un momento pudiera olvidarme de todo lo demás.
Cuando nos dimos cuenta, ya eran las 5:00 de la mañana. Me levanté de golpe al recordar que tenía que verificar que todo estuviera en orden. Fui a buscar a los chicos, pero no los encontré. Solo vi a Jihyun recostado en el sofá con su novia.
—¿Dónde está Jimin? —le pregunté.
—Ni idea —respondió, medio dormido.Fui al jardín, y ahí estaba Jimin con sus amigos, completamente borrachos.
—¡Park Jimin, en este momento se acaba esta fiesta! —le grité, furiosa.
—No me molestes... —respondió arrastrando las palabras. Estaba completamente ebrio.—Ahora mismo me vas a conocer.
—Ya lo veremos... —se burló.
Suga se acercó.
—Samantha, me tengo que ir. Ya tienes mi número. Cualquier cosa, me llamas.
—Sí, está bien. —Le di un beso en la mejilla.
—Cuídate. —Se marchó.
Jimin, con voz sarcástica y mirada molesta, dijo:
—¿Ya es tu novio?
—No lo es. Es mi amigo.
—Jajajajaja... como si fuera a creerte.
—Bueno, no tengo por qué darte explicaciones. Así que, Park Jimin, en este instante termina la fiesta.
—Está bien. —Se levantó tambaleando y gritó—: Amigos, lamentablemente la fiesta se termina por culpa de esta señorita. Lo siento.
—¡Ah, qué mal! —respondieron todos.
Los invitados comenzaron a irse, todos menos sus amigos más cercanos.
—¿Y ustedes qué esperan? —les dije, exasperada.
—Ellos se quedan. —respondió Jimin.
—Ugh, está bien... —resoplé.
Narra Jimin
Desperté con un dolor de cabeza insoportable. En serio, ayer tomé demasiado... pero, al mismo tiempo, me sentía feliz. Hacía mucho no organizaba una fiesta. La última vez que lo hice, mi madre me encontró acostándome con mi novia y me castigó durante tres meses. ¿Pueden creerlo? Pero como ahora se fue de viaje, aproveché.
Me arrastré hasta el baño, me bañé y me vestí. Eran las 12:00 del mediodía cuando bajé al living. Los chicos estaban ahí, junto a mi hermano.
—Jimin, te pasaste. La fiesta estuvo excelente. Lástima que se acabó tan rápido. —dijo Namjoon.
—Ni me lo recuerdes... todo por culpa de esa gata. No la soporto. —respondí.
—Pero tienes que aceptar que está buenísima. Tiene un cuerpazo. —dijo Jin.
—Sí... es una diosa. —admití, sin pensar demasiado.
—Oye, si no la quieres en tu casa, yo con gusto la acepto en la mía. —dijo Hoseok entre risas.
—Estás loco. Ella va a ser mía. —contesté, medio en broma, medio en serio.
—Jimin, no seas así. Ya tienes a Jazmín. Dale la oportunidad a otro. —intervino V.
—Es verdad. V tiene razón. —añadió Jungkook.
—Ya les dije que no. —respondí con fastidio—. Y hablando de ella, ¿dónde está?
—Fue a comprar algunas cosas. Las demás están limpiando y una está cocinando. —respondió Jihyun.
—Si la hubieras visto... traía unos shorts con una blusa de tirantes. Se veía tan sexy. —dijo Jin.
—Sí, es tan hermosa... —agregó Hoseok.
—¡Hey! Dejen de hablar de Samantha, ¿ok? —les dije, molesto.
—Como si fuera tu propiedad... —refutó Namjoon.
—¡Claro que sí lo es! —contesté sin pensar.
—La que te pertenece ahora es Jazmín, tu novia. Y además, tienes que aceptar que Samantha no es un objeto ni un premio. Es una persona con sentimientos. No deberías jugar así con ella. —dijo Jungkook con firmeza.
—No estoy jugando con ella.
—Pues parece que sí. Si solo la quieres para una noche, no lo intentes.
—¿Saben qué? Déjenme en paz. —me levanté de golpe, molesto.
—Siempre haces lo mismo, Jimin. Te molesta que te digamos la verdad —dijo Namjoon, recostado en el sillón.
—No estoy jugando con Samantha. Solo... no me agrada que se meta en mis cosas.
—¿No te agrada? —rió Hoseok—. Pues a mí me parece que estás más pendiente de ella que de tu propia novia.
—No digas estupideces.
—¿Estupideces? Vamos, Jimin, mírate —añadió Jin—. ¿Desde cuándo te importa tanto con quién habla una "sirvienta", como la llamas?
—¡Es que ella es diferente!
Todos lo miraron en silencio, sorprendidos por sus propias palabras.
—Vaya... eso no sonó a alguien que no siente nada —comentó V, sonriendo de lado.
—¿Y qué más da? —dije, rascándome la nuca, incómodo—. Ni que fuera algo serio.
—Yo sí la invitaría a salir —dijo Hoseok de pronto—. Es dulce, tiene carácter... y está buenísima.
—¡Ni lo sueñes! —reaccioné al instante, sin pensar.
—¿Y por qué no? Si a ti no te interesa y a nosotros sí.... —dijo Jin, encogiéndose de hombros.
—Vamos, chicos, no empiecen —intervino Jungkook con tono más serio—. Samantha no es un trofeo. Está pasando por muchas cosas y ustedes hablando como si fuera un juego.
—¿Y tú qué? ¿También estás interesado en ella? —pregunté con sospecha.
Jungkook asiente.
—Además no se trata de eso. Solo digo que merece más respeto del que tú le das.
—Lo que sí está claro es que no es como Jazmín —añadió V—. Samantha tiene algo diferente... te reta, no te aguanta todo. Y eso, hermano, es lo que te tiene loco.
—¿Loco? Yo estoy perfectamente bien —respondí, aunque nadie pareció creérselo.
—Claro, por eso ayer casi te la llevas por la fuerza —dijo Namjoon con sarcasmo.
—No fue así... —murmuré, bajando la mirada un instante.
—Tienes que decidir, Jimin —dijo Hoseok con más seriedad—. Si sigues tratándola así, no solo la vas a perder... también te vas a quedar solo.
Me quedé callado. Por dentro, una rabia extraña me hervía. No sabía si era porque tenían razón... o porque, por primera vez, me daba cuenta de que Samantha no solo me gustaba... sino que ya no la quería ver con nadie más.
.
.
.
¡Hola, querida gente de Wattpad!
Lamento mucho no haber podido actualizar antes, no he tenido tiempo.
Pero aquí les dejo su nuevo capítulo. ¡Gracias por leer!Att: Badgirl ♡

ESTÁS LEYENDO
Mi sirvienta (Editando)
Fiksi PenggemarUna joven se convierte en la empleada de una de las familias más poderosas de Corea del Sur. Donde tendrá que soportar los malos tratos de un chico exigente, controlador y mujeriego que solo se preocupa en si mismo.