Después de salir de su cita rutinaria con el ortopedista, Lauren y Audrey se fueron caminando hasta al apartamento de la primera que no estaba muy lejos. La fractura estaba avanzando bastante bien y el médico creía que podría adelantar unos días la liberación del yeso. Durante el trayecto Lauren aprovechó para contarle cómo habían terminado las cosas con Brandon el fin de semana y también aprovechó para contarle sobre Tyler.
—Últimamente como que tiene mucho trabajo por allá —le dijo Lauren cuando doblaron la esquina del apartamento.
—Pues al parecer se las ha arreglado para buscar un tiempo libre —respondió su amiga señalando al chico que estaba sentado en lo escalones del edificio con la manos dentro de la sudadera. Era Tyler. Las dos amigas apresuraron el paso y cuando él las vio se puso de pie.
— ¿Qué haces aquí? —le preguntó Lauren.
—He logrado que el asunto se resuelva y bueno, he conseguido una semana libre.
— ¿Cómo es que...?
— ¿Quieres subir? —le ofreció Audrey y él asintió.
Tyler les estuvo contando como iban las cosas en el terminal y al mismo tiempo quiso saber cómo iba evolucionando Lauren y su yeso.
—Pues digamos que toda la semana estuvo bien hasta que su novio la visitó e hizo desastres. —resopló Audrey desde la cocina.
—Primero; no es mi novio. Y segundo; no le hagas caso, Tyler. El ortopeda ha dicho que todo va bien y que incluso pueden quitármelo unos días antes. —dijo Lauren levantando los pies en la mesa que estaba frente al sofá. Tyler estaba a su lado.
—No sé por qué, pero le creo a Audrey. ¿Ha estado bastante agitado el fin de semana, eh?
— ¡Uf! Aunque debo admitir que Lauren es una persona creativa si pudo acostarse con el chico de cabello largo con todo y yeso.
Audrey fue hasta donde ellos y les entregó una lata de refresco a casa uno.
Durante el resto de la mañana estuvieron armando teorías locas de cómo Lauren había hecho para poder sacar adelante su momento en la cama con Brandon y el yeso.
—Esto no me parece gracioso —decía ella en medio del sofá, pero la verdad es que estaba disfrutando de la compañía de aquellos dos.
A la hora del almuerzo Audrey tuvo que regresar a la oficina y Tyler bajó a comprar algo para almorzar. Se quedó con Lauren el resto de la tarde viendo películas y conversando de cualquier banalidad que se les ocurriese.
—Oye Tyler... tengo que preguntarte...—Él la miró confundido— ¿Te molestaste cuando tuve que cancelar tu visita por Brandon?
— ¿Qué? —dijo él desviando la mirada de repente— ¿Por qué debería?
—Vamos, dime la verdad... —insistió ella notando su cambio de actitud.
— ¿La verdad? —Él volvió a mirarla y Lauren asintió— Solo me sorprendió un poco saber que estaba aquí, aunque bueno... luego me dije ¿Tendría que estarlo, no? Es su chico.
—Pues...
—Lauren, no le des importancia. Estoy aquí, ¿no? —Le dijo él sonriéndole— además tu necesitabas verlo, me alegra saber que pudo venir y estar contigo. ¿Te parece si vemos otro capítulo?
Lauren no respondió, pero Tyler fue hasta el televisor y programó el siguiente capítulo de la serie que estaban viendo. Ella se quedó un poco inquieta con la reciente conversación, pero decidió no seguirla.
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Salud, dinero... ¡achís!
RomanceA Lauren nunca le salen los tres estornudos, excepto aquella mañana en el Terminal de Transporte. A Lauren no le gusta tomar autobuses para viajar. Es de las que prefiere quedarse en la oficina editando los videos de las campañas que al lado de sus...