Era la primera vez en mucho tiempo que no había dormido tan bien.
Nada de llantos antes de dormir,
Nada de pesadillas por las madrugadas,
Nada de insomnio,
Nada de el.Era algo aliviante, pero a la vez temeroso no tener la idea de culpabilidad oprimiéndose sobre su pecho. Nada podría cambiar su tan gran inicio de día.
Hasta que reviso su celular.
Tenia un mensaje, solamente un maldito mensaje, para volverla a hacer que su ego se cayera y su desconfianza tomara su lugar.
<< Te espero fuera de tu casa. >>
Ella trago duro.
Asemejo que probablemente podría ser una broma de mal gusto, pero se veía tan real que no le hizo caso a su cerebro y fue directamente ahí, al lugar que no debió de ir; a fuera.Lo vio.
El estaba sentado sobre la entrada de la casa. Estaba dormido.Entre sus brazos, traía algo, pero lo tenia tan bien restringido que no podía alcanzar a identificarlo.
Lo supuso. El todavía seguía con las mismas ropas que cuando lo encontró empapado con la lluvia, sus ojos decoraban con unas ojeras muy notables y sus expresiones delataban que en realidad la estaba pasando muy mal para dormir.
—El se quedo toda la noche aquí... —Susurro.
Uraraka se acerco tan lenta y sigilosamente, lo agarro del hombro y empezó a menearlo bruscamente, hasta que después de unos cuantos golpesitos, abrió con gran pesadez los ojos.
El quedo por unos segundos fuera de si. Tenia tanto sueño que no podía distinguir del todo donde pudiera estar, hasta que miro a su alrededor y vio a la chica con una expresión de alteración y preocupación.
—Buenos días...
La chica se exalto. ¡¿Era lo único que podía decir?!
¡¿Podías decirle a la persona que te encontró fuera de su casa a tales horas de la mañana "Buenos días"?!—¡¿Pero que haces aquí, Todoroki?! —Gritó con brutalidad Uraraka. —¿Acaso sabes que hora es? ¡No me digas que te la pasaste aquí toda la noche!
—En realidad estoy aquí desde las cinco de la mañana, pero como no he dormido nada, decidí dar una pequeña siesta. —Contesto lo mas normal posible.
Es impresionante el nivel de rapidez que dos personas pueden olvidar de un momento a otro como para que terminen hablando lo mas sencillo posible.
Ella se encontraba preocupada; ¡mas que preocupada!
El se levanto del frió piso, posándose frente a la chica, quien aun seguía fuera de si.
El estaba nervioso, pero confiaba en su amigo, y si decía que debía de reconquistarla, lo haría.
El extendió su mano derecha frente a Uraraka, entregandolé un ramo de flores... Tulipanes, en pocas palabras justo sobre su cara.
—Ten. —Dijo antes de que ella agarrara el ramo.
—¿Qué... es esto? —Comento, atónita ante la situación.
Todoroki reacciono.
—No sabia si te gustaban los tulipanes o las rosas, así que me decidí por los tulipanes. —Dijo lo mas inocentemente posible. —Si no te gustan, los podría cambiar. La señora de la florería...
—¿Qué es esto? —Interrumpió Uraraka.
Tal vez el pensaba... tal vez lo logro pensar, que con un ramo dela noche a la mañana, los harían reconciliarse.
El era ingenuo.
Cero experiencia en el amor.
Ella estaba dolida.
Quería desaparecer.Lágrimas empezaron a brotar sobre los ojos de la chica. Apretaba fuertemente el ramo y mordía su labio inferior, tratando de controlar mas sus impulsos y no caer vulnerablemente ante el.
—¿Crees que con un ramo de Tulipanes podrá arreglar todo el dolor que me provocaste? —Exclamo.
A lo que Todoroki, no pude argumentar.
—No. —Dijo. —Pero pienso que, tal vez, pueda acercarme a ti.
Uraraka se sentía usada. Se sentía como si un niño jugara con un juguete y al siguiente día lo cambiara por uno mejor.
Se sentía pésimo, y no quería volverse a sentir así.
Ella tiró el ramo de tulipanes frente la presencia de Todoroki, y el solamente le quedo mas que observar.
—No quiero tu ramo.
Y cerró la puerta de su casa, dejándolo completamente solo y un ramo de Tulipanes regados sobre el piso.
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Cartas a un Joven Llamado Shouto || Todochako
Fanfic《Para no deprimirme y saber que tal vez nunca estés conmigo, trate de usar una forma clandestina de llamarte la atención.》