Capítulo 26: "¿Por qué es tan especial?"

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Verla llorar a Luz era una de las cosas que más me dolían y desesperaban.
¿Quién podía hacer llorar a una personita así?

-Eu ¿qué pasó? -pregunté sentándome a su lado en la escalerita de la entrada.
Me abrazó con tanta fuerza que pude sentir lo destrozada que estaba por dentro.

-Ey no llores, mi vida...por favor. Dale, contame qué pasó.

-La pelotuda de Camila me metió los cuernos a más no poder - dijo entre lágrimas.

-¿Es en serio? ¿La señorita Luz, reina del drama está llorando por una chica? - dije intentando hacerla reír.

-¡No te burles, tarada! - contestó sonriendo y dándome un pequeño empujón.

-Ahora hablando en serio, contame bien todo - dije acomodándole un mechón de pelo detrás de la oreja.

Luz sacó sus cigarrillos, encendió uno y empezó el relato...

-La muy puta se estuvo acostando con otra mina, mientras supuestamente estaba de novia conmigo. ¿Querés? -preguntó ofreciéndome un cigarrillo.

-No, gracias ¿Y vos cómo te...?

-¿Perdón? ¿Ludmila la reina del drama se negó a un pucho? OMG,¿de qué me perdí? - preguntó sorprendida y con una sonrisa de oreja a oreja. Era tan linda cuando sonreía...

-No seas tonta, simplemente no quiero...- respondí mirando al suelo.

-Ahjá, supongamos que te creo, en fin.. ¿qué me ibas a preguntar? -dijo dando otra calada.

-Que cómo te diste cuenta de eso...

-¿De eso qué?

-De que te estaba metiendo los cuernos...

- Por un amigo.

-¿Qué te dijo?

-Fue algo así como,"ehh..Luz,no quiero ser mete púa, pero me parece que Camila anda en algo con alguien más".

-¿Así de una te lo tiró?

-Así de una... sin anestesia.

-Qué forro...

Luz pasó del llanto, al enojo en solo un par de segundos. Su inestabilidad emocional era terrible.

-No, boluda, está perfecto. Me gusta que me digan las cosas de frente, aparte la piba me estaba pelotudeando y vaya a saber uno hace cuánto.

-¿Y qué onda, qué le dijiste a la loca?-pregunté super interesada.

-¿Querés pasar y tomamos unas birras? - dijo cortando completamente la conversación.

-Pasamos si querés, pero yo no tomo.

-Ah, entonces no. No me divierte tomar sola... en fin, no le dije nada a Camila, quería descubrirlo sola, así que intenté revisarle el celular, pero cuando lo agarré, me di cuenta de que había cambiado la contraseña. Le pedí la nueva,se puso nerviosa y empezó "¿para qué, por qué?" Blah,blah. Ahí ya noté algo raro... le pregunté qué me estaba escondiendo y decía que nada, entonces me enojé y le grité "¡Si no me estás escondiendo nada, ¿por qué no puedo usar tu teléfono?!" Y dijo algo de la privacidad, blah,blah, de la confianza, y toda esa mierda.

-¿Posta? - pregunté abriendo los ojos como platos- Qué caradura la mina.

-Literal. Bueno, la cosa es que le dije de una "¿Vos me estás cagando con alguien más, no?" Me lo negó a muerte, hasta que después de varios minutos empezó a llorar y a pedirme perdón.

Mi primera vez con élDonde viven las historias. Descúbrelo ahora