Salvado por el chico nuevo.

Capítulo 14

___POV ALEC___

Magnus se removía incómodo de su asiento cada 5 minutos y eso me desespera.

-¿Qué te pasa?-
Murmuré con pesadez.

-¿Uh?... oh, nada Garbancito, lo siento.-
Fingió un sonrisa y se volteó mirando al frente.

-No puedes mentirme Bane, algo te pasa y haces que me desconcentre de clase, ¿Qué te pasa?-.
Magnus pareció dudar unos segundos antes de girarse un poco y acercarse a mí disimuladamente.

-Hay una chica sentada en la fila de adelante, tres mesas a mi derecha. Me ha estado mirando toda la maldita clase y me hace sentir muy incómodo-

Miré hacía su derecha siguiendo sus propias indicaciones, de tanto buscar a la misteriosa chica, me encontré con una asiática pelinegra.

-¿Camille?-
Lo miré fijamente y el abrió los ojos como platos.

-¿No quieres decirlo más alto? Creo que en Hong Kong no te han escuchado-
Me miró con el ceño fruncido y reí levemente.

-Ella se llama Camille Belcourt. Llegó de intercambio hace tan solo un año. Parece no ser muy amigable, se junta con otros chicos como Rafael Santiago y Simon Lewis. Los tres juntos son una especie de grupito "anti gente mundana"-
Hice comillas mirando a Magnus, y este parecía no quitar la mirada de Camille.

¿Es normal que eso de cierta forma me duela?

-Oye... ¿Te gusta?-
Le susurré esperando lo peor.

-No.-
Murmuró sin pensar y me miró para continuar hablando.

-Los chicos de ojos claros me gustan más-
Devolvió la mirada a la chica, para luego comenzar a prestar atención a la pizarra.

¿Y eso que significa?

¿Acaso le...? ¿Acaso le gusto?

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Un papel voló en dirección a nuestra mesa por cuarta vez dirigido desde la derecha que daba con Magnus, Camille le había mandado una notita hace 10 minutos y desde entonces no han parado.

Esto que siento... ¿Son los tan famosos celos?, porque mierda, se sienten horribles. Más aún cuando son hacia alguien que no es nada tuyo. No me sentía nada bien, no por el hecho de las notas, si no porque mi cabeza dolía mucho y los gritos de mis compañeros más los del profesor no ayudaban en nada.

Apoyé mis brazos sobre la mesa, y luego de mover un poco la silla hacia atrás dejé mi cabeza caer sobre mis brazos y suspiré, la luz, los gritos, los celos, todos juntos me estaban taladrando la jodida cabeza.

No aguanté más, mi cabeza se partía al medio y esto parecía un estadio de fútbol, lleno de gritos y risas. No lo aguanto, no así. Guardé mis cosas rápidamente, y antes que el profesor pudiera siquiera verme, salí de la clase, caminando a paso lento por el pasillo y tomando mi cabeza, fuí víctima de unas pisadas fuertes que por mi desgracia hacían eco y rebotaban en mi cabeza.

-¡Alec! ¿A donde vas?-
Gritó Magnus desde mitad de pasillo, fruncí el ceño por el ruído, ignorandolo y siguiendo mi camino hacia la salida.

-¡ALEC!-
Gritó aún más fuerte provocandome una punzada de dolor en toda la cabeza, soltando un gemido de dolor paré de caminar y me dejé caer al suelo por una pared.

Magnus pareció entender mi malestar.

-¿Garbancito? ¿Qué pasa?-
Habló esta vez totalmente preocupado a la vez que más bajo lo que agradecí conpletamente.

-M-Mi cabeza... Me duele mucho-
Lo miré adolorido y este suspiró mirando alrededor.

-Deberías ir a casa... una pastilla no será de ayuda cuando salgan todos de clase en menos de 20 minutos-
Acarició mi cabeza con algo de ternura.

-N-no puedo ir a casa... mamá... e-ella...-

-¿Está en tu casa?-
Asentí a su pregunta.

-Le doy igual mientras regrese antes de las 10 de la noche a mi casa-

Magnus pensó unos pocos segundos, acto seguido me ayudó a levantarme y con las cosas de ambos en una de sus manos, tomó mi mano izquierda y me guío por el pasillo.

-¿Magnus?, ¿A donde me llevas?-
Bajé un poco el ritmo de la caminata al sentir mi cabeza comenzar a doler otra vez con intensidad.

-A mi casa, papá aún no llegó de su viaje así que no serás molestia allí. Aunque no puedo esperar a presentarte a mi padre, sé que le caerás bien.-
Salimos del Instituto y respiré hondo el aire fresco, siempre me ayuda.

El recorrido a la casa de Magnus fue en un completo silencio para nada incómodo, estaba muy agradecido de que no hayamos hablado porque gracias a eso mi cabeza dolía mucho menos, de todas formas el sol directo en mi cabeza provocaba que el dolor no se fuera del todo.

Mientras miraba el suelo en la caminata, sentí mi mano ser tomada por la suya, sus dedos se entrelazaron con los míos y sentí mi estómago ser testigo de las famosas mariposas.

Miré nuestras manos con una pequeña sonrisa, aún estoy dudoso de mis sentimientos hacia Magnus, pero él es la primera persona que es capaz de hacerme temblar las piernas con apenas mirarme.
Eso es bueno... ¿No?.

Un maullido proveniente de un callejón sin salida llamó mi atención y provocó que parara de caminar, sonaba como un gato pequeño.

-¿Escuchaste Eso?-
Murmuré a lo que recibí un asentimiento como respuesta.

-Debería ir a ver-
Magnus soltó mi mano con delicadeza y comenzó a seguir a paso lento y cuidadoso los maullidos provenientes del callejón.

Paró en seco a un costado de una caja de cartón y suspiró agachandose, tomó algo en brazos y volvió a mi con un pequeño gatito blanco y gris atigrado.

-Supongo que... tengo nueva mascota-
Sonrió acariciando levemente con ternura al felino que se encontraba totalmente cómodo en sus brazos, siquiera mostraba miedo hacia Magnus y eso es tierno.

-¡Genial!, ¿Cómo lo vas a llamar?-
Miré atento al gato que ronroneaba con las caricias del mayor mientras retomabamos el camino a su hogar.

-Es una buena pregunta...-
Se mostró serio varios segundos y luego miró sonriente al gato.

-... Te llamaré Presidente Miau-
Asintió convencido provocandome una leve sonrisa.

Se ven tan lindos juntos...

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¡Hola!
Es la primera vez que dejo una nota en la novela XDD.

Quiero saber como se están sintiendo con mi historia hasta ahora:

¿Les gusta?
¿Tienen alguna idea de lo que pueda llegar a pasar?
¿Alguna sugerencia en cuanto a la gramática / forma de escribir?

Por favor si responden me harían muy felíz.