Capítulo 20

60 10 0
                                    

Tal como había predicho, con el paso de las horas llovía con más intensidad. Claro, yo ya me encontraba en casa; encerrada en mi habitación. Y aún tenía puesto su suéter; pues me daba la impresión de que él estaba cerca de mí. Y me gustaba tener esa sensación. No la cambiaría por nada del mundo. E incluso me quedé dormida con él puesto.

(...)

La semana corrió súper rápido. Y no pude dejar de pensar en esa "cita doble" en la montaña, sin dudas, la idea más descabellada que ha tenido mi "mejor amiga" ha sido ésta.

Era un viernes por la tarde y me encontraba con mi "mejor amiga" en el aula de clases, estábamos platicando sobre dicha salida. Pues ella era la que había planeado todo, y me estaba contando con lujo de detalles todo lo que había pensado hasta ahora.

 Y bien... Partiremos mañana a las seis de la tarde. ¿De acuerdo?
— Si, de acuerdo... — lancé un suspiro.
— ¿Y ya lo invitaste?
— Si... — respondí.

Ella solo me miraba como siempre solía hacerlo. Con cierta picardía, así como si estuviera planeando algo malo. Pero en realidad no era así. O tal vez era entusiasmo mezclado con excitación. No lo sé. Ella era muy impredecible. Ella era sin duda mucho más alta que yo. Y más esbelta sin dudarlo. Tenía un lindo cabello color chocolate y un color de ojos ¿verde césped? ¿O verde moco tal vez?

De acuerdo ya, el punto es que sus expresiones siempre eran una mezcla de emociones inusuales. Y nunca podías averiguar lo que pensaba, era imposible.

 ¿¡Hey!? ¡Deja de pensar tanto— dijo esto chasqueando sus dedos frente a mi rostro.

Inhalé y exhalé profundamente.

— Bien, ya. Aún no me presentas a tu nuevo novio...
 Lo conocerás mañana... ¡Nos llevará en su coche! — dijo dando pequeños aplausos cerca de su pecho — ¡Y no llevarás nada! Solo tu ropa y cosas personales. Ya me encargué de todo...

Y asentí. No tenía idea de lo que podía pasar mañana, tenía un mal presentimiento. Pero algo dentro de mí sabía que yo ansiaba ir a ese lugar. Y solo era porque él estaría conmigo. Él sería mi cita. No pude evitar sonreír ante ese pensamiento.

*Ring, ring, ring...*

Sentí un gran estruendo en el bolsillo trasero de mi pantalón. Introduje mi mano para extraer mi teléfono celular, y vi que él me estaba llamando. Aunque no sabía para qué.

— Dame unos minutos... — le dije a mi "mejor amiga".

Ella solo asintió.

Alejándome un poco suspiré y luego atendí.

— ¿Si?  

 Hola, pensé que no atenderías... 

— ¿Sucede algo? — repuse.

 Si, es solo que no me dijiste a qué hora saldremos mañana para ir a acampar...

<<Ah, ¡cierto! Para eso me llama... ¿Para qué otra cosa podría ser?>> me dije a mí misma.

— Antes que todo. Debo decirte que no iremos solos. Es más bien una especie de... — hice una pausa para tragar saliba — cita doble; mi "mejor amiga", su novio. Y se supone que tú serías mi cita.
 Esto se pondrá interesante — noté como reía en tono bajo —como ya te dije antes, será todo un placer... 

— ¡Bien! ¡Saldremos a las seis de la tarde! Te pasaremos buscando a tu casa en coche, ¡gracias por aceptar cariño! — respondí algo entusiasmada.

Y colgué de inmediato, ahora estaba decidido, quería ir a ese lugar solo porque él estaría conmigo.

I looked for you for sex Donde viven las historias. Descúbrelo ahora