«Capítulo 5»

1.7K 74 31
                                    

Capítulo 5: "Noche de copas"

Los rayos del sol calaron en mi rostro haciéndome abrir los ojos, di un bostezo y me estiré en la cama.

Estaba apunto de abrir la puerta cuando escuché esa voz que tan bien conocía.

—Alice es su problema, ella fue quien habló sobre el divorcio, yo le pedí que no se fuera y no me hizo caso— dijo Edward, sentí dolor al escuchar las palabras de Edward.

— ¿Y tú crees que ella quería quedarse aún contigo mientras tú te vas con la tal Tanya?— escuché la voz de Alice, se escuchaba enojada.

—Tú también, Tanya es solo mi amiga, no entiendo cuál es el maldito problema, Bella también tiene como amigo a Jacob y nunca le insinué que se acostaba con él como ella conmigo— en eso tenía razón, pero Jacob no era resbaloso como Tanya.

—No compares, por lo que me has contado esa Tanya no es una santa y Jacob es un buen chico, me dijiste que él estuvo con Bella— respondió Alice.

—Sabes que, me largo de aquí, ¿por qué nadie me escucha o me apoya? Ahora hasta mi familia está en mi contra solo porque Bella les vino a llorar, ¿de verdad Alice?— dijo enojado, sentí furia al escuchar lo que decía. Era un idiota, si yo le hubiera hecho lo mismo tal vez él estuviera peor.

—No vino a llorarle a nadie Edward, está dolida. ¿Qué no la entiendes? Es tu esposa, tú deber es cumplir con ella no con otra tipa, ella te ama Edward, tú la amas. ¿Por qué no luchaste por ella? ¿Por qué no la detuviste?.

Edward se quedó en silencio.

—Lo ves— dijo Alice.

Dejé de escuchar lo que decían Alice y Edward pues sabía que si seguía oyendo, terminaría llorando.

Me di una ducha larga, sólo esperaba que Edward se fuera ya.

Edward POV

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Edward POV

Salí de la casa de Alice enojado, ahora todos estaban en mi contra. ¡Genial!.

Conduje hasta el hospital, necesitaba mantener mi mente ocupada y dejar de pensar en lo que estaba pasando.

Entré al hospital.

—Eddie— sonrió Tanya al verme, caminé hacia ella.

—Hola Tanya— la saludé, ella me abrazó.

— ¿Te sientes mejor?— tocó mi frente.

—Sí, sólo fue un resfriado nada más— le comenté, entré a mi consultorio y solté un gran suspiro, estoy hecho un lío.

Ángela, la recepcionista de mi piso me trae unos papeles para que los firme, comencé a leerlos con calma y después los firmaba. Escuché que tocaban la puerta.

Te encontré Donde viven las historias. Descúbrelo ahora